lunes, 17 de diciembre de 2012

Yo te debo, tú me debes, todos nos debemos

Yo te debo, tú me debes, todos nos debemos
Martes, 11 de Diciembre de 2012 06:17
Escrito por Paulino Alfonso Estévez

Cuba actualidad, Lawton, La Habana, (PD) De los temas más tratados por
el diario oficialista Granma son los referentes al calamitoso estado
financiero que tiene el sistema empresarial castrista, sobre todo las
deudas entre las empresas y por consiguiente, con el casi invalido fisco
castrista.

Después del ya olvidado perfeccionamiento empresarial, en Castrolandia
quedaron 1200 empresas; de ellas solo 550 son las que generan el 90% de
las divisas que necesita el régimen para su sostenimiento. Las restantes
650 solo generan producciones que llegan a la población en la nominal
moneda nacional,
aunque a precios equivalentes a como se ofertan en dólares.

Hay aquí un truco macabro ¿Cuál es? Ahora les digo.

Los mercados de productos industriales ofertan a altos precios las
mermas de las importaciones que son devueltas al comercio exterior o
sufren pequeñas averías en su aplicación. En esto se distinguen los
materiales de construcción, productos de aseo personal y domestico, etc.

Este mismo proceder, pero en dólares, se puso en práctica para
autofinanciar al proyecto del Barrio Chino. Aquí era el Comercio
Interior castrista a través de una empresa creada a tales fines la que
adquiría las mermas de quincallería en Guanzhou, China, y las revendía
en La Habana, al 270% de su costo de adquisición, según Comercio
Interior, para cubrir los costos de transporte (la tierra rara no cuesta
tanto como esta basura que los chinos vendían a unos deslumbrados y
ambiciosos pacotilleros). Esto se canceló a los tres años, solo después
que la policía, a través del consabido chivatazo chino, se enteró de que
las tiendas chinas florecían en toda la isla gracias a nuestras
emprendedoras mujeres y que las tiendas en divisas no vendían ya como antes.

Pero volvamos a nuestros carneros. La cadena de impago, como
cándidamente la llaman los medios oficiales, es solo el "recurso del
método" que utilizan los delincuentes, digo, dirigentes estatales para
tapar los robos y desvíos de toda esta mercancía, ya que ellos saben que
no es del interés del castrismo, por no estar dentro de su cadena
alimentaria.

Solamente cada vez que al general la saca a relucir es para amenizar
esos grises y aburridos aquelarres y de paso brindar alguna información
importante a la prensa castrista y a algunos eternos vacacionistas
acreditados como periodistas extranjeros para que se ganen el pan de su
día. ¡Que bueno es el general ¡

Como siempre en toda crónica del Decameron hay un carnudo, quien es el
ultimo en enterarse, aquí el cornudo es el Fisco, que siempre anda entre
trancas y barrancas hasta que al darse por enterado el estado
paternalmente le resuelve los problemas, que como son en moneda
nacional, eso es pecatta minuta.

¿No es verdad que los cubanos vivimos mejor que los yanquis y sus
primos, los europeos? Estos últimos, según el Granma, se están
suicidando cada vez más por el problema de la deuda pública de sus
respectivos gobiernos.

Que suerte que tenemos al general quien se preocupa de los ¿sueldos? de
los maestros, médicos, aburridos burócratas y los siempre prestos a
reprimir esbirros Sigamos pues conjugando el verbo deber hasta la
saciedad .Aquí en Castrolandia no pasa nada.

Para Cuba actualidad: paulino.alfonso@yahoo.com

http://primaveradigital.org/primavera/economia/51-economia/5984-yo-te-debo-tu-me-debes-todos-nos-debemos.html

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