miércoles, 15 de julio de 2015

Cuba, un inversionista por mes para el Mariel

Cuba, un inversionista por mes para el Mariel
"Estamos en el mes de julio y hemos aprobado a razón de casi una empresa
por mes", dijo la directora general del Mariel, Ana Teresa Igarza.
Agencias
julio 14, 2015

Siete empresas recibieron aprobación para instalarse en el puerto de
Mariel y la zona industrial aledaña, una señal de que el proyecto de
mayor envergadura económica de Cuba podría finalmente arrancar.

"Estamos en el mes de julio y hemos aprobado a razón de casi una empresa
por mes", dijo a The Associated Press en entrevista exclusiva Ana Teresa
Igarza, directora general de la oficina de la Zona Especial de
Desarrollo de Mariel.

En un futuro también podrían establecerse por primera vez en medio siglo
las empresas estadounidenses que ya mostraron interés concreto en ir a
Mariel de la mano de un acercamiento diplomático entre Washington y La
Habana.

Ubicado a unos 50 kilómetros de la capital, el puerto de Mariel con sus
17.9 metros de profundidad reemplazará al de La Habana que no pudo ser
ampliado mientras la zona aledaña se convertirá en un polo de desarrollo.

Un recorrido de AP por el puerto y la zona de desarrollo notó los
progresos en unas 4.500 hectáreas de lo que se denominó sector A, el
primero en ponerse en marcha. A lo largo del camino hay camiones
aplastando tierra para el asfaltado, excavadoras trabajando y se
construye una explanada para la instalación de las dos primeras
fábricas, una española de bebidas y otra mexicana de cárnicos.

Más allá se ve el muelle del puerto, de 700 metros de largo, y las
cuatro grúas utilizadas para levantar los miles de coloridos
contenedores acumulados formando largos pasillos. También se alistó una
línea de tren que servirá tanto para la carga como para el traslado de
los trabajadores.

Según Teresita Trujillo, especialista de la oficina de la Zona Especial
de Desarrollo de Mariel, se espera generar unos 70.000 empleos.
Actualmente hay 328 trabajadores propios del área a los que se suman
4.000 que temporalmente laboran en la construcción.

Aunque el puerto se inauguró en enero de 2014 y la norma que regula la
actividad –y por la cual se dan facilidades fiscales y aduaneras– fue
publicada en 2013, no fue hasta fines de 2014 que se aprobó la primera
empresa.

"El ritmo que estamos teniendo es el que se había previsto desde un
inicio", dijo Igarza para quien se avanzó "sin prisa pero sin pausa", la
misma frase que usó el gobernante Raúl Castro para contestar las
críticas de los que urgían apurar las reformas. Para Igarza no se trata
de desinterés de los inversores o exceso de selectividad cubana.

"A la fecha hay más de 400 empresas que han contactado a la oficina",
expresó. "Los primeros (inversores) son los más difíciles, cuando éstos
comienzan a invertir con más agilidad lo van haciendo los otros, pero
hay una etapa de acercamiento", explicó. De esas 400 compañías foráneas,
unas 25 completaron la documentación, comentó la directora.

Sin embargo, observadores consideraron que la vulnerabilidad económica
de la isla requiere mayor rapidez en la puesta en marcha. "Los tiempos
de los sectores que están promoviendo la reforma del llamado eslogan
'sin prisa pero sin pausa' creo que son inadecuados", dijo a AP Arturo
López-Levy, profesor del Centro de Estudios Globales de la Universidad
de Nueva York.

De todas maneras, indicó, el puerto de Mariel y su zona de desarrollo
son una buena idea. "Tiene una legislación especial que le permite
eliminar mucho de los cuellos de botella que existen como legado de la
economía de comando (estatal) que existió en Cuba en los años 90, pero
que tiene todavía una presencia importante".

De las siete empresas aprobadas, dos son belgas, dos mexicanas, una
española y dos cubanas y se dedican a la alimentación, la industria
química, la logística y la automatización, explicó Igarza. Aunque
prefirió no dar nombres de las empresas aprobadas, desde México se
informó que la firma cárnica Richmeat fue autorizada a instalar una
procesadora y la compañía Devox General Paint una fábrica de pinturas.

Las exigencias de Cuba contemplan un estudio de factibilidad económica y
medioambiental para evitar tecnología contaminante, indicó la
funcionaria. Tampoco es aceptable que las firmas sólo busquen poner una
maquila que no aporta innovación.

El deshielo en la relación con Estados Unidos abrió una importante
posibilidad de negocios no sólo por el atraque de muchos buques sobre
los que hoy pesan sanciones si se acercan a la isla, sino por la
instalación de firmas estadounidenses. "Son bastantes" los empresarios
del vecino país interesados, dijo Igarza. Uno de ellos es la firma
Cleber de Alabama, una ensambladora de tractores que incluso sin esperar
el fin del embargo de Washington a Cuba tramitó permisos en el
Departamento del Tesoro estadounidense.

Source: Cuba, un inversionista por mes para el Mariel -
http://www.martinoticias.com/content/cuba-mariel-inversiones-autorizacion/98851.html

No hay comentarios:

Publicar un comentario