Negocios particulares recibieron orden de cerrar el martes por la tarde
por el luto
MARÍA MATIENZO PUERTO | La Habana | 29 de Noviembre de 2016 - 22:41 CET.
Dueños de negocios particulares fueron avisados de que a partir de las
4:00 de la tarde de este martes debían cerrar sus establecimientos,
confirmaron varios de ellos a DIARIO DE CUBA.
Sin embargo, casi una hora después del límite impuesto por el Gobierno
muchos locales continuaban abiertos.
"Sí, nos llamaron por teléfono para decirnos que teníamos que cerrar",
dijo antes del mediodía una cuentapropista que no quiso identificarse.
"Tengo miedo de que cualquier gesto de resistencia se convierta en una
cacería de brujas y lo perdamos todo. De mí dependen todos los que
trabajan para mí", apuntó.
Los promotores del Callejón del Chorro apremiaban antes del almuerzo a
los turistas para compensar las previsibles pérdidas.
"Entren ya", les decían para atraerlos a sus restaurantes.
Cada vez que algún turista les comentaba que solo querían tomar algo,
ellos les respondían: "Si quieren ver algo de tomar tienen que manyar
primero".
"La idea es que vayamos a las 7:00 a la Plaza" de la Revolución, dijo
una camarera que no se sentía con autoridad para hablar por el
restaurante para el que trabaja.
Para esa hora está previsto el acto multitudinario en homenaje a Fidel
Castro.
La orden de cerrar se hizo extensiva a los negocios estatales. "Tenemos
que cerrar a las 4:00 por lo que tú sabes", dijo un dependiente de La
Bodeguita del Medio.
Por estos días los negocios han tenido que acatar normativas que
restringen el consumo de alcohol a los cubanos.
"El asunto es complejo", dijo el portero del Hotel Inglaterra. "¿Cómo le
decimos a los extranjeros que no pueden consumir alcohol o, peor, cómo
le explicamos a un cubano que el extranjero puede consumir cerveza y él,
que está justo en la mesa del lado, no?"
Source: Negocios particulares recibieron orden de cerrar el martes por
la tarde por el luto | Diario de Cuba -
http://www.diariodecuba.com/cuba/1480455689_27069.html
Información de varios fuentes en castellano y ingles sobre la economía Cubana. Datos económicos sobre Cuba de la prensa internacional.
miércoles, 30 de noviembre de 2016
The Washington Post aprueba intención de Trump de exigir más a Cuba
The Washington Post aprueba intención de Trump de exigir más a Cuba
Martinoticias.com
El presidente de los Estados Unidos, Barack Obama (d) junto con el
presidente electo Donald Trump (i) al final de su encuentro en el
despacho oval en la Casa Blanca, en Washington (Estados Unidos), hoy, 10
de noviembre de 2016. El presidente de Estados Un
El diario llama a no revertir medidas de Obama populares entre los
cubanos, pero lamenta que que Raúl Castro haya usado la apertura
unilateral de EE.UU. para engrosar las arcas del Estado, y no para
acelerar las reformas.
El diario The Washington Post dice en un editorial que la muerte de
Fidel Castro ha despertado esperanzas entre los cubanos más jóvenes, en
la suposición de que la resistencia del fundador de la revolución estaba
frenando los cambios en la isla, y ahora Raúl Castro no tendrá ninguna
excusa.
Desafortunadamente, observa el diario capitalino, el general Castro ha
dejado claro que su objetivo es cambiar la economía estatal apenas lo
necesario para salvarla y, en ninguna medida, el sistema político
totalitario. En ese sentido, apunta, la apertura negociada con el
presidente Obama no la ha aprovechado para acelerar las reformas, sino
para engrosar las arcas del Estado con una nueva corriente de ingresos
en divisas procedentes de los turistas y las empresas estadounidenses.
Señala el Post que los cubanos que aplaudieron la reanudación de las
relaciones porque esperaban una mejoría en sus vidas han sufrido una
amarga decepción, mientras que aquellos que trabajan activamente en pro
de una mayor libertad política han sufrido más, y no menos represión.
El cotidiano aboga por que estos hechos se tomen en cuenta cuando la
nueva administración y el nuevo Congreso de los Estados Unidos tracen la
política cubana. "(El presidente) Obama", dice, "estiró los poderes
ejecutivos para ofrecer concesiones al régimen de Castro mientras le
exigía poco a cambio. La mayor parte del beneficio ha ido a parar a
instituciones controladas por los Castro, como la industria estatal del
turismo. Funcionarios militares y policiales de Estados Unidos han
cortejado a sus homólogos cubanos, pasando por alto con frecuencia su
historial de abusos contra los derechos humanos".
Para la publicación, una mejor política se alinearía con las esperanzas
de los cubanos de a pie y las demandas legítimas de los movimientos
pro-democracia de la isla, lo cual no necesariamente significa revertir
medidas que han sido populares entre los cubanos como la reanudación de
las relaciones diplomáticas y el relajamiento de las restricciones a la
circulación de personas y bienes entre los dos países.
Pero sí debe significar ─propone el editorial─que los intercambios
oficiales con el régimen, y cualquier concesión que lo beneficie, estén
condicionados a reformas tangibles que beneficien al pueblo de la isla:
mayor acceso a Internet, ampliación del espacio para los negocios
privados, y tolerancia a la expresión crítica y a las reuniones de
grupos como Las Damas de Blanco.
El Post recuerda las recientes declaraciones del presidente electo
Donald Trump en torno a la muerte de Fidel Castro, a quien describió
como "un "dictador brutal", y los propósitos de su administración de
hacer lo que esté en sus manos para que "el pueblo cubano pueda iniciar
finalmente su camino hacia la prosperidad y la libertad", con un acuerdo
en el que La Habana acceda a reciprocar la apertura estadounidense con
beneficios "para el pueblo cubano, los cubanoamericanos y los Estados
Unidos en general".
La publicación considera refrescante que el mandatario entrante vincule
las buenas relaciones entre Cuba y los Estados Unidos con avances en
materia de derechos humanos en la isla. Pero advierte que sería perverso
aplicar ese precepto sólo a Cuba y no a otros regímenes autocráticos
como los de Egipto, Turquía y Rusia.
"Los cubanos", concluye diciendo el Washington Post, "no son los únicos
que merecen la solidaridad de los Estados Unidos con su lucha por los
derechos fundamentales".
Source: The Washington Post aprueba intención de Trump de exigir más a
Cuba -
http://www.martinoticias.com/a/aprueba-washington-post-intencion-de-trump-de-exigir-reciprocidad-a-cuba/134441.html
Martinoticias.com
El presidente de los Estados Unidos, Barack Obama (d) junto con el
presidente electo Donald Trump (i) al final de su encuentro en el
despacho oval en la Casa Blanca, en Washington (Estados Unidos), hoy, 10
de noviembre de 2016. El presidente de Estados Un
El diario llama a no revertir medidas de Obama populares entre los
cubanos, pero lamenta que que Raúl Castro haya usado la apertura
unilateral de EE.UU. para engrosar las arcas del Estado, y no para
acelerar las reformas.
El diario The Washington Post dice en un editorial que la muerte de
Fidel Castro ha despertado esperanzas entre los cubanos más jóvenes, en
la suposición de que la resistencia del fundador de la revolución estaba
frenando los cambios en la isla, y ahora Raúl Castro no tendrá ninguna
excusa.
Desafortunadamente, observa el diario capitalino, el general Castro ha
dejado claro que su objetivo es cambiar la economía estatal apenas lo
necesario para salvarla y, en ninguna medida, el sistema político
totalitario. En ese sentido, apunta, la apertura negociada con el
presidente Obama no la ha aprovechado para acelerar las reformas, sino
para engrosar las arcas del Estado con una nueva corriente de ingresos
en divisas procedentes de los turistas y las empresas estadounidenses.
Señala el Post que los cubanos que aplaudieron la reanudación de las
relaciones porque esperaban una mejoría en sus vidas han sufrido una
amarga decepción, mientras que aquellos que trabajan activamente en pro
de una mayor libertad política han sufrido más, y no menos represión.
El cotidiano aboga por que estos hechos se tomen en cuenta cuando la
nueva administración y el nuevo Congreso de los Estados Unidos tracen la
política cubana. "(El presidente) Obama", dice, "estiró los poderes
ejecutivos para ofrecer concesiones al régimen de Castro mientras le
exigía poco a cambio. La mayor parte del beneficio ha ido a parar a
instituciones controladas por los Castro, como la industria estatal del
turismo. Funcionarios militares y policiales de Estados Unidos han
cortejado a sus homólogos cubanos, pasando por alto con frecuencia su
historial de abusos contra los derechos humanos".
Para la publicación, una mejor política se alinearía con las esperanzas
de los cubanos de a pie y las demandas legítimas de los movimientos
pro-democracia de la isla, lo cual no necesariamente significa revertir
medidas que han sido populares entre los cubanos como la reanudación de
las relaciones diplomáticas y el relajamiento de las restricciones a la
circulación de personas y bienes entre los dos países.
Pero sí debe significar ─propone el editorial─que los intercambios
oficiales con el régimen, y cualquier concesión que lo beneficie, estén
condicionados a reformas tangibles que beneficien al pueblo de la isla:
mayor acceso a Internet, ampliación del espacio para los negocios
privados, y tolerancia a la expresión crítica y a las reuniones de
grupos como Las Damas de Blanco.
El Post recuerda las recientes declaraciones del presidente electo
Donald Trump en torno a la muerte de Fidel Castro, a quien describió
como "un "dictador brutal", y los propósitos de su administración de
hacer lo que esté en sus manos para que "el pueblo cubano pueda iniciar
finalmente su camino hacia la prosperidad y la libertad", con un acuerdo
en el que La Habana acceda a reciprocar la apertura estadounidense con
beneficios "para el pueblo cubano, los cubanoamericanos y los Estados
Unidos en general".
La publicación considera refrescante que el mandatario entrante vincule
las buenas relaciones entre Cuba y los Estados Unidos con avances en
materia de derechos humanos en la isla. Pero advierte que sería perverso
aplicar ese precepto sólo a Cuba y no a otros regímenes autocráticos
como los de Egipto, Turquía y Rusia.
"Los cubanos", concluye diciendo el Washington Post, "no son los únicos
que merecen la solidaridad de los Estados Unidos con su lucha por los
derechos fundamentales".
Source: The Washington Post aprueba intención de Trump de exigir más a
Cuba -
http://www.martinoticias.com/a/aprueba-washington-post-intencion-de-trump-de-exigir-reciprocidad-a-cuba/134441.html
Casa Blanca defiende política de Obama tras muerte de Castro
Casa Blanca defiende política de Obama tras muerte de Castro
noviembre 28, 2016
Martinoticias.com
Washington afirma que el fallecimiento del exgobernante cubano no
afectará los avances de Estados Unidos para normalizar las relaciones
con la isla de gobierno comunista.
La muerte de Fidel Castro probablemente no afectará los esfuerzos de
Estados Unidos para normalizar las relaciones con Cuba, dijo el lunes la
Casa Blanca.
El portavoz de la Casa Blanca Josh Earnest dijo a periodistas en su
conferencia diaria que el impacto económico del acercamiento diplomático
ya está en marcha en temas como los vuelos comerciales, que a partir de
este lunes inauguran la ruta entre Miami y la capital cubana.
Earnest agregó que cualquier medida para dar marcha atrás con los
avances hechos en la normalización de las relaciones entre Estados
Unidos y Cuba durante los últimos dos años "asestará un significativo
golpe económico" a los ciudadanos de la isla.
El vocero adelantó a la prensa que el presidente Obama no viajará a Cuba
para los funerales de Fidel Castro, y agregó que este martes podrá
informar sobre la decisión que se tomará de enviar a algún representante
de Washington a La Habana.
Las preguntas de la prensa surgen ante las críticas hechas a Obama por
su declaración sobre el fallecido exgobernante cubano, en las que
expresó que durante casi seis décadas la relación entre Estados Unidos y
Cuba estuvo marcada por la discordia y profundos desacuerdos políticos.
En el mensaje de Obama por la muerte de Castro, el mandatario
estadounidense recordó que durante su presidencia trabajaron duro para
dejar atrás el pasado, en pos de un futuro en el que la relación entre
los dos países se defina no por las diferencias, sino por las muchas
cosas que comparten como vecinos y amigos.
Source: Casa Blanca defiende política de Obama tras muerte de Castro -
http://www.martinoticias.com/a/cuba-estados-unidos-relaciones-futuro-funerales-/134371.html
noviembre 28, 2016
Martinoticias.com
Washington afirma que el fallecimiento del exgobernante cubano no
afectará los avances de Estados Unidos para normalizar las relaciones
con la isla de gobierno comunista.
La muerte de Fidel Castro probablemente no afectará los esfuerzos de
Estados Unidos para normalizar las relaciones con Cuba, dijo el lunes la
Casa Blanca.
El portavoz de la Casa Blanca Josh Earnest dijo a periodistas en su
conferencia diaria que el impacto económico del acercamiento diplomático
ya está en marcha en temas como los vuelos comerciales, que a partir de
este lunes inauguran la ruta entre Miami y la capital cubana.
Earnest agregó que cualquier medida para dar marcha atrás con los
avances hechos en la normalización de las relaciones entre Estados
Unidos y Cuba durante los últimos dos años "asestará un significativo
golpe económico" a los ciudadanos de la isla.
El vocero adelantó a la prensa que el presidente Obama no viajará a Cuba
para los funerales de Fidel Castro, y agregó que este martes podrá
informar sobre la decisión que se tomará de enviar a algún representante
de Washington a La Habana.
Las preguntas de la prensa surgen ante las críticas hechas a Obama por
su declaración sobre el fallecido exgobernante cubano, en las que
expresó que durante casi seis décadas la relación entre Estados Unidos y
Cuba estuvo marcada por la discordia y profundos desacuerdos políticos.
En el mensaje de Obama por la muerte de Castro, el mandatario
estadounidense recordó que durante su presidencia trabajaron duro para
dejar atrás el pasado, en pos de un futuro en el que la relación entre
los dos países se defina no por las diferencias, sino por las muchas
cosas que comparten como vecinos y amigos.
Source: Casa Blanca defiende política de Obama tras muerte de Castro -
http://www.martinoticias.com/a/cuba-estados-unidos-relaciones-futuro-funerales-/134371.html
Aquel que dejó cenizas
Aquel que dejó cenizas
El desenlace se esperaba desde hacía tiempo
Martes, noviembre 29, 2016 | Miriam Leiva
LA HABANA, Cuba.- Fidel Castro falleció el 25 de noviembre a las 10:29
de la noche y, por voluntad propia, sus restos serían cremados, según el
breve comunicado leído por Raúl Castro en la televisión cubana a las 12
de la media noche.
Como difunto, el exgobernante merece respeto. Seguramente expiró en un
mullido lecho, rodeado de sus familiares más cercanos; quizás dejó las
orientaciones para sus funerales. José Martí, el Apóstol de Cuba, lo
acogería en su monumento de la Plaza de la Revolución y en el Cementerio
Santa Ifigenia de Santiago de Cuba.
El gobierno decretó duelo oficial de nueve días y un recorrido desde La
Habana a Santiago del cortejo fúnebre, siguiendo inversamente la ruta de
la "Caravana de la Libertad" del jefe guerrillero en enero de 1959. El
Comandante legó su predilección por el simbolismo en las fechas: el
deceso coincidente con el 60 aniversario del inicio de la revolución por
la salida del yate Granma de México en 1956, y el entierro el 4 de
diciembre, día de Santa Bárbara, Shangó en el sincretismo religioso,
venerados con grandes ofrendas. Toques de tambor y todos los rituales
desde la madrugada serían suspendidos en esta solemne ocasión para
disgusto de muchos miles de creyentes.
Gran parte de los cubanos dentro del archipiélago reaccionaron con el
silencio, el comentario apagado, sin congoja. El desenlace se esperaba
desde hacía tiempo. El alegre, chistoso, jovial y bullicioso cubano se
protege en la concha cuando siente peligro por opinar distinto de la
línea oficial, teme las consecuencias en su vida, y desencantado de las
promesas incumplidas cuida su endeble status o atisba el horizonte para
saltar al extranjero.
Respetuoso alivio flota en el ambiente, porque ya el Comandante
permitirá descansar a todos, al no temer su interferencia en los cambios
imprescindibles. Cada foto y cada escrito resultaban sobrecogedores. La
impresionante presencia verde olivo y la voz atronadora se convirtieron
en apariencia lastimosa y frases delirantes. Él aseveró: "la historia me
absolverá", al concluir el juicio por el ataque al Cuartel Moncada en
1953. Mucho acumuló durante 63 años, y su historia demorará en
escribirse objetivamente, según se conozcan los secretos de todas las
partes involucradas. Sin embargo, resulta imposible eximirlo del
precario estado actual de Cuba, porque durante 47 años todo lo decidió y
prohibió.
En 1959, Fidel Castro líquido una dictadura sangrienta, fue el político
más popular de todos los tiempos en Cuba y aglutinó el poder con las
falsas promesas de democracia y apego a la religión. Será recordado por
desmembrar las familias y enviar sus hijos a escuelas en el campo, el
éxodo de más de dos millones de cubanos, las penurias de un pueblo
obnubilado y dispuesto a inmensos sacrificios; por el despojo inicial a
los grandes propietarios, continuado con los pequeños durante la
Ofensiva Revolucionaria de 1968; por sus inmensas obras improductivas:
la fallida Zafra de 1970, la destrucción de la industria azucarera
forjadora de la nacionalidad cubana y de toda la agricultura con el
desarraigo del hombre de campo; por la dilapidación de los recursos
llegados de la Unión Soviética y el campo socialista; por no haber
invertido los petrodólares de Hugo Chávez en la capitalización de la
destruida o anticuada industria.
Fidel Castro coartó los derechos, aduciendo las dádivas estatales de
educación y sanidad universales, en realidad provenientes del aporte de
todos los trabajadores. Legó una economía enclenque, salarios y
pensiones de miseria, la dualidad monetaria, las grandes deudas
acumuladas desde 1986, y un tejido social desprovisto de los elevados
valores éticos y morales, orgullo de los cubanos durante siglos.
Fidel Castro será recordado por los fusilamientos y largas condenas de
prisión; por el castigo con trabajo agrícola y la expulsión de los
puestos laborales a causa de opiniones distintas a las oficiales; por el
acecho de la Seguridad del Estado, los informantes y los Comités de
Defensa de la Revolución; por la imposibilidad de acceder a una
universidad "solo para los revolucionarios".
El tiempo no hará olvidar que estuvo a punto de provocar una
conflagración nuclear en octubre de 1962, el fomento de las guerrillas
en América Latina y las guerras en el extranjero, la persecución a
homosexuales, la prohibición de las minifaldas y los Beatles hasta
finales de los años 1980, y de la práctica religiosa y el turismo hasta
1992.
Raúl Castro heredó las ruinas que él mismo ayudó a crear. Mencionó la
necesidad de cambios estructurales y de conceptos en 2007, que redujo a
la actualización del sistema económico y social fidelista fracasado.
Pero reconoció que "el obstáculo fundamental que hemos enfrentado, tal y
como previmos, es el lastre de una mentalidad obsoleta, que conforma una
actitud de inercia, o de ausencia de confianza en el futuro", en su
Informe al VII Congreso del PCC del 16 de abril de 2016.
Diez años después de abandonar inevitablemente el poder absoluto, fuera
del archipiélago cubano, de Fidel Castro se destaca la colaboración
positiva de médicos, maestros y técnicos en el extranjero; y los
elevados índices de salud y educación, logrados con el sacrificio y la
baja calidad de vida de los cubanos durante 57 años. El ancianito
desgastado se visualiza amablemente, gracias al proceso de limpieza de
la nefasta imagen realizado por Raúl Castro con las oportunidades
brindadas por la comunidad internacional, los papas y eminencias de
diversas religiones, el vuelco en las relaciones con Estados Unidos, la
colaboración con la Unión Europea, y la condonación de las deudas. Los
intereses económicos han jugado un importante papel, pero también el
general presidente tiene el espacio para abrir la participación
ciudadana en la toma de decisiones.
La compulsión a los cubanos para firmar un Juramento a las palabras del
Comandante podría buscar el fortalecimiento del inmovilismo o
utilizarlas para revertirlo: "Revolución es sentido del momento
histórico; es cambiar todo lo que debe ser cambiado; es igualdad y
libertad plenas; es ser tratado y tratar a los demás como seres
humanos", discurso del 1 de mayo de 2000.
La elevada asistencia de la población a las dilatadas pompas fúnebres
denota la usual compulsión a los estudiantes, trabajadores, campesinos y
miembros de las llamadas organizaciones de masas y de la sociedad civil,
así como la movilización de los cientos de miles de militantes del
partido y la juventud comunistas, los organismos militares, los
excombatientes y personas que realmente lo admiran. Sin embargo, las
autoridades deberían reconocer los sentimientos reales de la mayoría de
los cubanos y acometer cambios radicales.
Source: Aquel que dejó cenizas | Cubanet -
https://www.cubanet.org/opiniones/aquel-que-dejo-cenizas/
El desenlace se esperaba desde hacía tiempo
Martes, noviembre 29, 2016 | Miriam Leiva
LA HABANA, Cuba.- Fidel Castro falleció el 25 de noviembre a las 10:29
de la noche y, por voluntad propia, sus restos serían cremados, según el
breve comunicado leído por Raúl Castro en la televisión cubana a las 12
de la media noche.
Como difunto, el exgobernante merece respeto. Seguramente expiró en un
mullido lecho, rodeado de sus familiares más cercanos; quizás dejó las
orientaciones para sus funerales. José Martí, el Apóstol de Cuba, lo
acogería en su monumento de la Plaza de la Revolución y en el Cementerio
Santa Ifigenia de Santiago de Cuba.
El gobierno decretó duelo oficial de nueve días y un recorrido desde La
Habana a Santiago del cortejo fúnebre, siguiendo inversamente la ruta de
la "Caravana de la Libertad" del jefe guerrillero en enero de 1959. El
Comandante legó su predilección por el simbolismo en las fechas: el
deceso coincidente con el 60 aniversario del inicio de la revolución por
la salida del yate Granma de México en 1956, y el entierro el 4 de
diciembre, día de Santa Bárbara, Shangó en el sincretismo religioso,
venerados con grandes ofrendas. Toques de tambor y todos los rituales
desde la madrugada serían suspendidos en esta solemne ocasión para
disgusto de muchos miles de creyentes.
Gran parte de los cubanos dentro del archipiélago reaccionaron con el
silencio, el comentario apagado, sin congoja. El desenlace se esperaba
desde hacía tiempo. El alegre, chistoso, jovial y bullicioso cubano se
protege en la concha cuando siente peligro por opinar distinto de la
línea oficial, teme las consecuencias en su vida, y desencantado de las
promesas incumplidas cuida su endeble status o atisba el horizonte para
saltar al extranjero.
Respetuoso alivio flota en el ambiente, porque ya el Comandante
permitirá descansar a todos, al no temer su interferencia en los cambios
imprescindibles. Cada foto y cada escrito resultaban sobrecogedores. La
impresionante presencia verde olivo y la voz atronadora se convirtieron
en apariencia lastimosa y frases delirantes. Él aseveró: "la historia me
absolverá", al concluir el juicio por el ataque al Cuartel Moncada en
1953. Mucho acumuló durante 63 años, y su historia demorará en
escribirse objetivamente, según se conozcan los secretos de todas las
partes involucradas. Sin embargo, resulta imposible eximirlo del
precario estado actual de Cuba, porque durante 47 años todo lo decidió y
prohibió.
En 1959, Fidel Castro líquido una dictadura sangrienta, fue el político
más popular de todos los tiempos en Cuba y aglutinó el poder con las
falsas promesas de democracia y apego a la religión. Será recordado por
desmembrar las familias y enviar sus hijos a escuelas en el campo, el
éxodo de más de dos millones de cubanos, las penurias de un pueblo
obnubilado y dispuesto a inmensos sacrificios; por el despojo inicial a
los grandes propietarios, continuado con los pequeños durante la
Ofensiva Revolucionaria de 1968; por sus inmensas obras improductivas:
la fallida Zafra de 1970, la destrucción de la industria azucarera
forjadora de la nacionalidad cubana y de toda la agricultura con el
desarraigo del hombre de campo; por la dilapidación de los recursos
llegados de la Unión Soviética y el campo socialista; por no haber
invertido los petrodólares de Hugo Chávez en la capitalización de la
destruida o anticuada industria.
Fidel Castro coartó los derechos, aduciendo las dádivas estatales de
educación y sanidad universales, en realidad provenientes del aporte de
todos los trabajadores. Legó una economía enclenque, salarios y
pensiones de miseria, la dualidad monetaria, las grandes deudas
acumuladas desde 1986, y un tejido social desprovisto de los elevados
valores éticos y morales, orgullo de los cubanos durante siglos.
Fidel Castro será recordado por los fusilamientos y largas condenas de
prisión; por el castigo con trabajo agrícola y la expulsión de los
puestos laborales a causa de opiniones distintas a las oficiales; por el
acecho de la Seguridad del Estado, los informantes y los Comités de
Defensa de la Revolución; por la imposibilidad de acceder a una
universidad "solo para los revolucionarios".
El tiempo no hará olvidar que estuvo a punto de provocar una
conflagración nuclear en octubre de 1962, el fomento de las guerrillas
en América Latina y las guerras en el extranjero, la persecución a
homosexuales, la prohibición de las minifaldas y los Beatles hasta
finales de los años 1980, y de la práctica religiosa y el turismo hasta
1992.
Raúl Castro heredó las ruinas que él mismo ayudó a crear. Mencionó la
necesidad de cambios estructurales y de conceptos en 2007, que redujo a
la actualización del sistema económico y social fidelista fracasado.
Pero reconoció que "el obstáculo fundamental que hemos enfrentado, tal y
como previmos, es el lastre de una mentalidad obsoleta, que conforma una
actitud de inercia, o de ausencia de confianza en el futuro", en su
Informe al VII Congreso del PCC del 16 de abril de 2016.
Diez años después de abandonar inevitablemente el poder absoluto, fuera
del archipiélago cubano, de Fidel Castro se destaca la colaboración
positiva de médicos, maestros y técnicos en el extranjero; y los
elevados índices de salud y educación, logrados con el sacrificio y la
baja calidad de vida de los cubanos durante 57 años. El ancianito
desgastado se visualiza amablemente, gracias al proceso de limpieza de
la nefasta imagen realizado por Raúl Castro con las oportunidades
brindadas por la comunidad internacional, los papas y eminencias de
diversas religiones, el vuelco en las relaciones con Estados Unidos, la
colaboración con la Unión Europea, y la condonación de las deudas. Los
intereses económicos han jugado un importante papel, pero también el
general presidente tiene el espacio para abrir la participación
ciudadana en la toma de decisiones.
La compulsión a los cubanos para firmar un Juramento a las palabras del
Comandante podría buscar el fortalecimiento del inmovilismo o
utilizarlas para revertirlo: "Revolución es sentido del momento
histórico; es cambiar todo lo que debe ser cambiado; es igualdad y
libertad plenas; es ser tratado y tratar a los demás como seres
humanos", discurso del 1 de mayo de 2000.
La elevada asistencia de la población a las dilatadas pompas fúnebres
denota la usual compulsión a los estudiantes, trabajadores, campesinos y
miembros de las llamadas organizaciones de masas y de la sociedad civil,
así como la movilización de los cientos de miles de militantes del
partido y la juventud comunistas, los organismos militares, los
excombatientes y personas que realmente lo admiran. Sin embargo, las
autoridades deberían reconocer los sentimientos reales de la mayoría de
los cubanos y acometer cambios radicales.
Source: Aquel que dejó cenizas | Cubanet -
https://www.cubanet.org/opiniones/aquel-que-dejo-cenizas/
Trump says Cuba has to act or he'll end the diplomatic thaw, but it's not that simple
Trump says Cuba has to act or he'll end the diplomatic thaw, but it's
not that simple
Tracy Wilkinson
In his latest comment on Cuba since the death of revolutionary leader
Fidel Castro, President-elect Donald Trump said Monday he would end
Washington's diplomatic thaw with the island unless Cuba makes "a better
deal."
"If Cuba is unwilling to make a better deal for the Cuban people, the
Cuban/American people and the U.S. as a whole, I will terminate deal,"
Trump tweeted.
President Obama and Cuban President Raul Castro renewed diplomatic ties
in 2014 after a half-century of Cold War hostility. Since then, through
a series of executive orders, Obama has eased restrictions on Americans
traveling to Cuba and U.S. firms doing business there.
Castro, at the same time, has made it easier for Cubans to travel and to
engage in limited private enterprise.
However, Castro has not enacted significant political reforms, and the
death Friday of his brother, former president and leader of the
revolution Fidel, at age 90, is not likely to usher in quick change.
It was not clear what Trump meant by a "better deal." An email seeking
clarification from his transition team was not answered.
Previously, however, Trump has spoken of the release of political
prisoners and more open space for free expression of opinions and
dissent. These are the same elements the Obama administration has been
demanding, while choosing not to delay economic progress while awaiting
political change.
From a legal standpoint, Trump could easily reverse Obama's executive
orders with little more than a signature. Politically, however, renewed
estrangement would be more complicated and would isolate the U.S. as the
only country in the world that does not recognize the Communist-led
government in Havana.
Trump and his top aides have sent conflicting signals over his likely
Cuba policy.
On Saturday, his staff put out a statement saying a Trump administration
would "do all it can" to help Cubans achieve prosperity and liberty. But
it did not mention reversing Obama's actions expanding ties.
"While Cuba remains a totalitarian island," Trump said, "it is my hope
that today marks a move away from the horrors endured for too long, and
toward a future in which the wonderful Cuban people finally live in the
freedom they so richly deserve."
Kellyanne Conway, a top advisor, told NBC's "Meet the Press" on Sunday
that "nothing is definite" when it comes to Cuba. But Trump's soon-to-be
White House chief of staff, Reince Priebus, said that Trump would be
looking for "some movement in the right direction" to keep the Cuba
opening on course.
Conservative Republicans, like Sens. Marco Rubio and Ted Cruz, oppose
detente with Cuba as long as any Castro continues to rule. But a growing
number of Cuban Americans, as well as most Democrats and a substantial
segment of the business community, want better ties and opportunities
for economic exchange.
Source: Trump says Cuba has to act or he'll end the diplomatic thaw, but
it's not that simple - LA Times -
http://www.latimes.com/nation/politics/trailguide/la-na-trailguide-updates-trump-demands-cuba-action-to-keep-1480358091-htmlstory.html
not that simple
Tracy Wilkinson
In his latest comment on Cuba since the death of revolutionary leader
Fidel Castro, President-elect Donald Trump said Monday he would end
Washington's diplomatic thaw with the island unless Cuba makes "a better
deal."
"If Cuba is unwilling to make a better deal for the Cuban people, the
Cuban/American people and the U.S. as a whole, I will terminate deal,"
Trump tweeted.
President Obama and Cuban President Raul Castro renewed diplomatic ties
in 2014 after a half-century of Cold War hostility. Since then, through
a series of executive orders, Obama has eased restrictions on Americans
traveling to Cuba and U.S. firms doing business there.
Castro, at the same time, has made it easier for Cubans to travel and to
engage in limited private enterprise.
However, Castro has not enacted significant political reforms, and the
death Friday of his brother, former president and leader of the
revolution Fidel, at age 90, is not likely to usher in quick change.
It was not clear what Trump meant by a "better deal." An email seeking
clarification from his transition team was not answered.
Previously, however, Trump has spoken of the release of political
prisoners and more open space for free expression of opinions and
dissent. These are the same elements the Obama administration has been
demanding, while choosing not to delay economic progress while awaiting
political change.
From a legal standpoint, Trump could easily reverse Obama's executive
orders with little more than a signature. Politically, however, renewed
estrangement would be more complicated and would isolate the U.S. as the
only country in the world that does not recognize the Communist-led
government in Havana.
Trump and his top aides have sent conflicting signals over his likely
Cuba policy.
On Saturday, his staff put out a statement saying a Trump administration
would "do all it can" to help Cubans achieve prosperity and liberty. But
it did not mention reversing Obama's actions expanding ties.
"While Cuba remains a totalitarian island," Trump said, "it is my hope
that today marks a move away from the horrors endured for too long, and
toward a future in which the wonderful Cuban people finally live in the
freedom they so richly deserve."
Kellyanne Conway, a top advisor, told NBC's "Meet the Press" on Sunday
that "nothing is definite" when it comes to Cuba. But Trump's soon-to-be
White House chief of staff, Reince Priebus, said that Trump would be
looking for "some movement in the right direction" to keep the Cuba
opening on course.
Conservative Republicans, like Sens. Marco Rubio and Ted Cruz, oppose
detente with Cuba as long as any Castro continues to rule. But a growing
number of Cuban Americans, as well as most Democrats and a substantial
segment of the business community, want better ties and opportunities
for economic exchange.
Source: Trump says Cuba has to act or he'll end the diplomatic thaw, but
it's not that simple - LA Times -
http://www.latimes.com/nation/politics/trailguide/la-na-trailguide-updates-trump-demands-cuba-action-to-keep-1480358091-htmlstory.html
Sin azúcar y sin país
Sin azúcar y sin país
ROBERTO ÁLVAREZ QUIÑONES | Los Ángeles | 29 de Noviembre de 2016 - 14:02
CET.
"Sin azúcar no hay país", decía una muy popular frase en Cuba,
atribuida al hacendado cubano José Manuel Casanova. Siempre pensé que
era una exageración, un decir. Pero estaba equivocado, Fidel Castro
demostró que era verdad.
Hoy en la Isla no hay azúcar, y tampoco país, pues, ya en ruinas, suelta
los pedazos y es el fantasma de la otrora próspera nación que llevamos
en la memoria quienes vimos al barbudo comandante entrar en La Habana en
1959.
Pretender abarcar en un solo trabajo periodístico el devastador legado
económico del Führer cubano, ya definitivamente fuera del escenario
político, no es viable. Me limitaré a la industria azucarera, la espina
dorsal de la economía cubana desde fines del siglo XVIII.
De entrada, Castro convirtió a nuestro país en importador de azúcar,
luego de haber sido el mayor productor y exportador mundial durante más
de un siglo y medio. La producción azucarera cayó al mismo nivel de
1894, cuando la Isla era colonia de España.
En 2002 Fidel tuvo una "perreta" debido a la ineficiencia azucarera y,
sin convocar al Consejo de Ministros o al Buró Político del Partido,
ordenó desmantelar 95 de los 156 centrales azucareros del país y reducir
la superficie cañera de dos millones de hectáreas a 750.000. Luego se
desmantelaron otras cinco fábricas. Quedaron en pie 56.
Y él declaró por la televisión: "el azúcar es la ruina del país".
Calificó de "disparate" la actividad azucarera. Todo ello cuando el
precio mundial del azúcar comenzaba a repuntar por la escasez de oferta.
Desde el 2000, antes de la rabieta de Fidel, el precio aumentó en un
8,8% anual, y de seis centavos la libra llegó a 31 centavos en 2010,
récord en 32 años. Luego ha oscilado en torno a los 20 centavos. Hace
unos días, el 28 de noviembre, el azúcar se cotizó a 19,98 centavos en
el mercado de Nueva York.
Parte de la cultura nacional
El azúcar se enraizó en la cultura y el paisaje cubanos por casi 200
años. Recuerdo que de niño cuando yo dibujaba un bohío de guano, alguna
vaca pastando y palmeras, siempre incluía una espigada chimenea a lo
lejos echando humo. Los centrales azucareros eran una constante en la
imaginería infantil isleña.
El azúcar comenzó a obtenerse en forma sólida hace 2.500 años en la
India y en Persia. La caña de azúcar ya se conocía en Nueva Guinea hace
8.000 años. La palabra azúcar viene del vocablo árabe hispano
"assukkar", que se origina del árabe clásico "sukkar", a su vez tomada
del griego "sakjar", derivada de la palabra persa "sakar".
A España la caña la llevaron los árabes, Cristóbal Colón la introdujo en
La Española en su tercer viaje, en 1498, y Diego Velázquez la llevó a
Cuba en 1523. Haití, con mano de obra esclava era ya en 1750 el mayor
productor y exportador mundial de azúcar. Pero en 1791, aprovechando el
caos resultante de la Revolución Francesa, estalló la insurrección
liderada por Toussaint L'Ouverture y los esclavos haitianos destruyeron
los ingenios en los que eran explotados.
Ello propició una colosal expansión en Cuba, convertida en la azucarera
del planeta.
Este auge lo aceleró la llegada de la Revolución Industrial a la Isla.
En 1819 se introdujo en el ingenio Cambre, de Pedro Diago, en Güines, la
primera máquina de vapor en el mundo que sustituyó a los bueyes para
mover los molinos. En 1850 se instaló por primera vez a nivel mundial,
en el ingenio Amistad, de Joaquín Ayestarán, también en Güines, la
primera centrífuga, que sustituyó el sistema de purgar el azúcar con barro.
Ya con el más alto nivel tecnológico en materia azucarera, el 19 de
noviembre de 1837 Cuba se convirtió en el primer país de Latinoamérica
con ferrocarril, segundo del continente luego de EEUU (Albany, 1831), y
el séptimo en el mundo, 11 años antes que en España (aún hay quienes
dicen que el primer ferrocarril en territorio español fue el de
Barcelona a Mataró, en 1848), y sólo 12 años después de estrenarse el
primer tren de la historia entre Stockton y Darlington, Inglaterra.
Para que las carretas de caña tiradas por bueyes no se atascaran (muchas
no llegaban al ingenio) con las lluvias, se construyó un primer "camino
de hierro" de 50 kilómetros entre Güines y La Habana, cuando muchas
naciones europeas aún lo no tenían, y antes que los mayores países
latinoamericanos: México (en 1850), Brasil (1854) y Argentina (1857).
También los habaneros viajaban en cómodos coches "con ventanillas
corredizas, el techo cubierto con cuero muy fuerte, cojines de paño en
los asientos, molduras y manijas de bronce",segúnlas crónicas de la época.
Cuba fue la azucarera del mundo durante más de 160 años. En 1894 la Isla
alcanzó el millón de toneladas métricas (1,1 millones), un tercio de
toda el azúcar producida globalmente. Con la guerra de independencia la
producción cayó, pero en 1905 se produjeron 1,3 millones de toneladas
métricas en 174 ingenios. Y en 1925 la zafra llegó a 5,1 millones de
toneladas métricas. Una de cada cuatro libras de azúcar producidas en el
mundo era cubana.
En 1940 Cuba devino el productor de azúcar de caña más eficiente
mundialmente al registrar un 13,17% de rendimiento industrial: por cada
100 partes de peso verde de la caña se extrajo más de 13 partes de
azúcar. Algo nunca visto. En los años 50 la Isla exportaba la mitad de
toda el azúcar mundial, con una producción entre 5,3 y 7,1 millones de
toneladas métricas, en 161 fábricas y un rendimiento industrial promedio
de 12,7%, el mayor del planeta.
Desde 1934 hasta 1959 las exportaciones cubanas de azúcar hacia EEUU se
rigieron por un sistema de cuotas de importación fijadas por Washington,
que pagaba un precio superior al del mercado mundial. Era ese el Mercado
Preferencial Azucarero de EEUU para Cuba y otros países azucareros. Por
entonces la Isla exportaba a EEUU más de tres millones de toneladas
métricas anuales.
La plaga Castro-Guevara
Algo que la propaganda fidelista distorsionó es que si bien en la
primera mitad del siglo XX el grueso del capital invertido en la
industria azucarera era estadounidense, para mediados de la centuria eso
había cambiado con el avance de lo que Manuel Moreno Fraginals llamó la
"sacarocracia criolla".
En 1939 eran propiedad de hacendados cubanos 56 centrales, que producían
el 22% del azúcar. Pero en 1958, con 121 de los 161 centrales (36 eran
de capital norteamericano y otros cuatro de otras naciones), los
industriales cubanos producían el 67% del azúcar. Ese porcentaje habría
seguido subiendo en los años sucesivos.
Pero llegó Castro y, asesorado por el Che Guevara, a fines de 1960
estatizó toda la industria azucarera. En solo dos años la producción se
derrumbó de 6,8 millones de toneladas métricas a 3,8 millones en la
zafra 1962-1963.
El "genial" dueto Castro-Guevara consideró que Cuba no podía depender
más del azúcar y que había que industrializar el país. El 23 de febrero
de 1961 el dictador creó el Ministerio de Industrias y puso de ministro
al Che —hasta entonces presidente del Banco Nacional de Cuba—, a cargo
de las industrias del país nacionalizadas cuatro meses antes.
Mostrando su ignorancia olímpica en economía, Castro y el Che no
advirtieron que solo exportando azúcar podrían obtener las divisas para
instalar fábricas. El ministro argentino viajó por el mundo y gastó
cientos de millones de dólares en la compra de plantas completas , casi
todas obsoletas tecnológicamente. Y se desmantelaron 130.000 hectáreas
de caña.
La plaga Castro-Guevara se propuso realizar buena parte de la cosecha
cañera con trabajo voluntario para forjar la "conciencia
revolucionaria" y crear el "hombre nuevo" comunista.
Con la consigna "Que no quede una caña en pie", desde 1961 los
cañaverales fueron invadidos por oficinistas, médicos, ingenieros,
obreros, profesores, artistas, y otros profesionales que machete en
mano cortaban la gramínea cómo podían en jornadas extenuantes.
Fue implantada la "emulación socialista". Las brigadas de macheteros
—habituales o "voluntarios"—, compulsadas a ganar la banderita de la
emulación (los estímulos monetarios estaban prohibidos), arrojaban
resultados desastrosos. Al cortar las cañas dejaban unos tronquitos de
hasta tres pulgadas en la parte baja, que es la más rica en sacarosa.
Esa azúcar se perdía y obligaba a emplear equipos pesados para arrasar
los campos y sembrar caña nueva para la siguiente cosecha, lo cual
elevaba los costos.
También el corte inadecuado arriba dejaba caña en el cogollo (parte
verde de donde salen las hojas y que no contiene azúcar), o quedaba
cogollo en la caña que iba para el central. Eso bajaba el rendimiento
industrial.
Costaba más transportar, albergar, avituallar y alimentar a aquellos
improvisados macheteros citadinos —que seguían cobrando su salario
normal— que el dinero que generaban con su trabajo. Los costos por libra
de azúcar superaban el precio en el mercado mundial.
"Los diez millones van"
La zafra solo se recuperó a fines de los años 60 cuando la Unión
Soviética, interesada en tener en Cuba una "cabeza de playa"
político-ideológica para expandirse hacia Latinoamérica, comenzó a
subsidiar las zafras, incluyendo los camiones, equipos, fertilizantes,
pesticidas, etc.
La URSS enviaba el algodón que en Ariguanabo y otras textileras se
transformaba en tela dura para ropa de trabajo. Las camisas y pantalones
"de salir" casi desaparecieron y la industria del calzado casi solo
producía botas y zapatos "de trabajo". De paso, Castro prohibió celebrar
la Nochebuena, Navidad, Fin de Año, Año Nuevo y el Día de Reyes, porque
interferían con la zafra.
En el delirium tremens de su megalomanía, el caudillo quiso realizar en
1970 la mayor producción azucarera lograda jamás en la historia
universal: 10 millones de toneladas métricas. Fueron virtualmente
paralizadas las restantes industrias al compás de la febril consigna
"Los diez millones van". El músico Juan Formell se lo creyó y creó la
orquesta de Los Van Van.
Ni había caña suficiente, ni capacidad industrial para ello. El ministro
del ramo, Orlando Borrego, se lo dijo a Fidel y fue destituido al
instante. Además, una gran producción derrumbaría el precio del azúcar,
pues Moscú compraría solo 3,5 o cuatro millones de toneladas métricas y
el resto aumentaría la sobreoferta que ya había internacionalmente. Se
produjeron 8,5 millones de toneladas métricas a un costo tan alto que el
país entró en una recesión de varios años.
Durante 30 años, hasta su desintegración en 1991, la URSS gastó miles de
millones de dólares para mantener y ampliar la producción azucarera
cubana (que alcanzó nuevamente ocho millones en 1990), y construyó seis
grandes fábricas. Y pagaba a Castro 45 centavos por libra de azúcar
cubana, mientras en el mercado mundial estaba a cinco centavos o menos.
Un subsidio fabuloso que se multiplicaba con la reexportación de parte
del petróleo soviético gratis "asignado" por Moscú. Al desintegrarse la
URSS la zafra se hundió, hasta el día de hoy.
Logro fidelista: importar azúcar
Si a Julio Lobo, Pepe Gómez Mena, los Falla Gutiérrez o los Fanjul (los
productores cubanos de azúcar más poderosos en los años 50) les hubiesen
dicho que Cuba tendría que importar azúcar para cubrir el consumo y
cumplir sus compromisos de exportación (que ahora prácticamente se
reducen a 400.000 toneladas métricas destinadas a China), se habrían
desternillado de la risa.
Pero lo absurdo devino realidad. A fines de 2001 los cubanos vieron
sorprendidos que procedían de Brasil las cinco libras mensuales de
azúcar sin refinar que les entregaban mediante la "libreta". Según el
Gobierno brasileño, entre 2001 y 2006 esa nación exportó a Cuba 384.204
toneladas métricas de azúcar. Y Colombia le exportó 425.609 toneladas
métricas de azúcar refino entre 2002 y 2006. En 2005 Bielorrusia exportó
a Cuba 50.000 toneladas métricas de azúcar de remolacha. Y también de
República Dominicana y hasta de EEUU (el colmo) Cuba ha importado azúcar.
Por otra parte, desde 1967 los rendimientos cubanos de caña por hectárea
son los más bajos de las Américas y probablemente del mundo. Luego de
1960 nunca los cañaverales cubanos han llegado siquiera a las 69-72
toneladas de caña por hectárea del promedio mundial. Según la Oficina
Nacional de Estadísticas e Información (ONEI), desde 2002 el promedio
cubano ha oscilado entre 24 y 41 toneladas por hectárea.
En Perú, Guatemala y Colombia obtienen entre 93 y 120 toneladas; Brasil
entre 80 y 90; El Salvador, 82; Honduras, 70; México 75-85 toneladas.
Antes del castrismo ninguna nación latinoamericana superaba a Cuba en
rendimientos cañeros. Y en la industria, la dictadura admite que la
eficiencia hoy apenas supera el 10% de obtención de azúcar por cada 100
partes de caña verde.
Sin azúcar, ni etanol
En la última zafra, la de 2015-2016, la producción azucarera no llegó a
los 1,6 millones de toneladas métricas, de las cuales unas 700.000
corresponden al consumo nacional. O sea este año se produjo tres veces
menos que en 1925.
Y ello ocurre cuando el precio mundial del azúcar ha subido a su mayor
nivel en los últimos cuatro años. La Organización Internacional del
Azúcar (OIA) prevé un déficit de azúcar de 6,7 millones de toneladas
métricas y que no habrá azúcar suficiente para cubrir la demanda global
a corto plazo. Y cualquier precio superior a los 20 centavos la libra
supera los costos de producción y da ganancia, según los expertos.
Si Fidel no hubiese destruido la industria azucarera y Cuba en 2016
hubiese producido seis millones de toneladas, la Isla habría podido
exportar 5,3 millones de toneladas, por valor de 2.332 millones de
dólares, tres veces más que los ingresos netos por el turismo.
Además, Cuba podría ser un importante exportador de biocombustibles. Con
un millón de hectáreas de caña (la mitad de las que había en 2002)
destinadas a producir solamente etanol, con un rendimiento como el de
Brasil, de 7.500 litros por hectárea, la Isla podría producir 7.500
millones de litros de etanol, que a 1,60 dólares el litro habrían
significado probablemente unos 12.000 millones de dólares, seis veces el
ingreso por turismo.
Pero el comandante calificó de "monstruosidad" producir biocombustibles
con alimentos como la caña y el maíz.
Cuba podría también desarrollar una gran industria de derivados de la
caña para producir y exportar papel, madera de bagazo para la
construcción y muebles, electricidad, fertilizantes, medicamentos y
alimento animal. Una sólida industria de la caña podría generar hasta
13.000 millones de dólares anuales.
Hoy los cubanos que viven en la Isla no tienen idea de que los hermanos
Fanjul, industriales azucareros cubanos despojados de todos sus bienes
por Fidel Castro, producen actualmente más de siete millones de
toneladas de azúcar en sus fábricas de EEUU, México, República
Dominicana, Canadá, Gran Bretaña y Portugal.
La catástrofe azucarera es solo un capítulo dentro del cataclismo
causado a Cuba por el dictador que más tiempo ha gobernado en la
historia moderna. Pero solo por haber destrozado el ancestral "sueldo"
de Cuba, lejos de ser absuelto por la historia el dictador mayor fue ya
condenado y enviado por los cubanos al noveno círculo del infierno, ese
que Dante Alighieri reservó para los peores tiranos.
Para expresar el cataclismo económico causado por Fidel Castro le doy
la palabra, con tristeza, a Luis de Góngora: "ayer maravilla fui/ y hoy
sombra de mí no soy".
Source: Sin azúcar y sin país | Diario de Cuba -
http://www.diariodecuba.com/cuba/1480424560_27052.html
ROBERTO ÁLVAREZ QUIÑONES | Los Ángeles | 29 de Noviembre de 2016 - 14:02
CET.
"Sin azúcar no hay país", decía una muy popular frase en Cuba,
atribuida al hacendado cubano José Manuel Casanova. Siempre pensé que
era una exageración, un decir. Pero estaba equivocado, Fidel Castro
demostró que era verdad.
Hoy en la Isla no hay azúcar, y tampoco país, pues, ya en ruinas, suelta
los pedazos y es el fantasma de la otrora próspera nación que llevamos
en la memoria quienes vimos al barbudo comandante entrar en La Habana en
1959.
Pretender abarcar en un solo trabajo periodístico el devastador legado
económico del Führer cubano, ya definitivamente fuera del escenario
político, no es viable. Me limitaré a la industria azucarera, la espina
dorsal de la economía cubana desde fines del siglo XVIII.
De entrada, Castro convirtió a nuestro país en importador de azúcar,
luego de haber sido el mayor productor y exportador mundial durante más
de un siglo y medio. La producción azucarera cayó al mismo nivel de
1894, cuando la Isla era colonia de España.
En 2002 Fidel tuvo una "perreta" debido a la ineficiencia azucarera y,
sin convocar al Consejo de Ministros o al Buró Político del Partido,
ordenó desmantelar 95 de los 156 centrales azucareros del país y reducir
la superficie cañera de dos millones de hectáreas a 750.000. Luego se
desmantelaron otras cinco fábricas. Quedaron en pie 56.
Y él declaró por la televisión: "el azúcar es la ruina del país".
Calificó de "disparate" la actividad azucarera. Todo ello cuando el
precio mundial del azúcar comenzaba a repuntar por la escasez de oferta.
Desde el 2000, antes de la rabieta de Fidel, el precio aumentó en un
8,8% anual, y de seis centavos la libra llegó a 31 centavos en 2010,
récord en 32 años. Luego ha oscilado en torno a los 20 centavos. Hace
unos días, el 28 de noviembre, el azúcar se cotizó a 19,98 centavos en
el mercado de Nueva York.
Parte de la cultura nacional
El azúcar se enraizó en la cultura y el paisaje cubanos por casi 200
años. Recuerdo que de niño cuando yo dibujaba un bohío de guano, alguna
vaca pastando y palmeras, siempre incluía una espigada chimenea a lo
lejos echando humo. Los centrales azucareros eran una constante en la
imaginería infantil isleña.
El azúcar comenzó a obtenerse en forma sólida hace 2.500 años en la
India y en Persia. La caña de azúcar ya se conocía en Nueva Guinea hace
8.000 años. La palabra azúcar viene del vocablo árabe hispano
"assukkar", que se origina del árabe clásico "sukkar", a su vez tomada
del griego "sakjar", derivada de la palabra persa "sakar".
A España la caña la llevaron los árabes, Cristóbal Colón la introdujo en
La Española en su tercer viaje, en 1498, y Diego Velázquez la llevó a
Cuba en 1523. Haití, con mano de obra esclava era ya en 1750 el mayor
productor y exportador mundial de azúcar. Pero en 1791, aprovechando el
caos resultante de la Revolución Francesa, estalló la insurrección
liderada por Toussaint L'Ouverture y los esclavos haitianos destruyeron
los ingenios en los que eran explotados.
Ello propició una colosal expansión en Cuba, convertida en la azucarera
del planeta.
Este auge lo aceleró la llegada de la Revolución Industrial a la Isla.
En 1819 se introdujo en el ingenio Cambre, de Pedro Diago, en Güines, la
primera máquina de vapor en el mundo que sustituyó a los bueyes para
mover los molinos. En 1850 se instaló por primera vez a nivel mundial,
en el ingenio Amistad, de Joaquín Ayestarán, también en Güines, la
primera centrífuga, que sustituyó el sistema de purgar el azúcar con barro.
Ya con el más alto nivel tecnológico en materia azucarera, el 19 de
noviembre de 1837 Cuba se convirtió en el primer país de Latinoamérica
con ferrocarril, segundo del continente luego de EEUU (Albany, 1831), y
el séptimo en el mundo, 11 años antes que en España (aún hay quienes
dicen que el primer ferrocarril en territorio español fue el de
Barcelona a Mataró, en 1848), y sólo 12 años después de estrenarse el
primer tren de la historia entre Stockton y Darlington, Inglaterra.
Para que las carretas de caña tiradas por bueyes no se atascaran (muchas
no llegaban al ingenio) con las lluvias, se construyó un primer "camino
de hierro" de 50 kilómetros entre Güines y La Habana, cuando muchas
naciones europeas aún lo no tenían, y antes que los mayores países
latinoamericanos: México (en 1850), Brasil (1854) y Argentina (1857).
También los habaneros viajaban en cómodos coches "con ventanillas
corredizas, el techo cubierto con cuero muy fuerte, cojines de paño en
los asientos, molduras y manijas de bronce",segúnlas crónicas de la época.
Cuba fue la azucarera del mundo durante más de 160 años. En 1894 la Isla
alcanzó el millón de toneladas métricas (1,1 millones), un tercio de
toda el azúcar producida globalmente. Con la guerra de independencia la
producción cayó, pero en 1905 se produjeron 1,3 millones de toneladas
métricas en 174 ingenios. Y en 1925 la zafra llegó a 5,1 millones de
toneladas métricas. Una de cada cuatro libras de azúcar producidas en el
mundo era cubana.
En 1940 Cuba devino el productor de azúcar de caña más eficiente
mundialmente al registrar un 13,17% de rendimiento industrial: por cada
100 partes de peso verde de la caña se extrajo más de 13 partes de
azúcar. Algo nunca visto. En los años 50 la Isla exportaba la mitad de
toda el azúcar mundial, con una producción entre 5,3 y 7,1 millones de
toneladas métricas, en 161 fábricas y un rendimiento industrial promedio
de 12,7%, el mayor del planeta.
Desde 1934 hasta 1959 las exportaciones cubanas de azúcar hacia EEUU se
rigieron por un sistema de cuotas de importación fijadas por Washington,
que pagaba un precio superior al del mercado mundial. Era ese el Mercado
Preferencial Azucarero de EEUU para Cuba y otros países azucareros. Por
entonces la Isla exportaba a EEUU más de tres millones de toneladas
métricas anuales.
La plaga Castro-Guevara
Algo que la propaganda fidelista distorsionó es que si bien en la
primera mitad del siglo XX el grueso del capital invertido en la
industria azucarera era estadounidense, para mediados de la centuria eso
había cambiado con el avance de lo que Manuel Moreno Fraginals llamó la
"sacarocracia criolla".
En 1939 eran propiedad de hacendados cubanos 56 centrales, que producían
el 22% del azúcar. Pero en 1958, con 121 de los 161 centrales (36 eran
de capital norteamericano y otros cuatro de otras naciones), los
industriales cubanos producían el 67% del azúcar. Ese porcentaje habría
seguido subiendo en los años sucesivos.
Pero llegó Castro y, asesorado por el Che Guevara, a fines de 1960
estatizó toda la industria azucarera. En solo dos años la producción se
derrumbó de 6,8 millones de toneladas métricas a 3,8 millones en la
zafra 1962-1963.
El "genial" dueto Castro-Guevara consideró que Cuba no podía depender
más del azúcar y que había que industrializar el país. El 23 de febrero
de 1961 el dictador creó el Ministerio de Industrias y puso de ministro
al Che —hasta entonces presidente del Banco Nacional de Cuba—, a cargo
de las industrias del país nacionalizadas cuatro meses antes.
Mostrando su ignorancia olímpica en economía, Castro y el Che no
advirtieron que solo exportando azúcar podrían obtener las divisas para
instalar fábricas. El ministro argentino viajó por el mundo y gastó
cientos de millones de dólares en la compra de plantas completas , casi
todas obsoletas tecnológicamente. Y se desmantelaron 130.000 hectáreas
de caña.
La plaga Castro-Guevara se propuso realizar buena parte de la cosecha
cañera con trabajo voluntario para forjar la "conciencia
revolucionaria" y crear el "hombre nuevo" comunista.
Con la consigna "Que no quede una caña en pie", desde 1961 los
cañaverales fueron invadidos por oficinistas, médicos, ingenieros,
obreros, profesores, artistas, y otros profesionales que machete en
mano cortaban la gramínea cómo podían en jornadas extenuantes.
Fue implantada la "emulación socialista". Las brigadas de macheteros
—habituales o "voluntarios"—, compulsadas a ganar la banderita de la
emulación (los estímulos monetarios estaban prohibidos), arrojaban
resultados desastrosos. Al cortar las cañas dejaban unos tronquitos de
hasta tres pulgadas en la parte baja, que es la más rica en sacarosa.
Esa azúcar se perdía y obligaba a emplear equipos pesados para arrasar
los campos y sembrar caña nueva para la siguiente cosecha, lo cual
elevaba los costos.
También el corte inadecuado arriba dejaba caña en el cogollo (parte
verde de donde salen las hojas y que no contiene azúcar), o quedaba
cogollo en la caña que iba para el central. Eso bajaba el rendimiento
industrial.
Costaba más transportar, albergar, avituallar y alimentar a aquellos
improvisados macheteros citadinos —que seguían cobrando su salario
normal— que el dinero que generaban con su trabajo. Los costos por libra
de azúcar superaban el precio en el mercado mundial.
"Los diez millones van"
La zafra solo se recuperó a fines de los años 60 cuando la Unión
Soviética, interesada en tener en Cuba una "cabeza de playa"
político-ideológica para expandirse hacia Latinoamérica, comenzó a
subsidiar las zafras, incluyendo los camiones, equipos, fertilizantes,
pesticidas, etc.
La URSS enviaba el algodón que en Ariguanabo y otras textileras se
transformaba en tela dura para ropa de trabajo. Las camisas y pantalones
"de salir" casi desaparecieron y la industria del calzado casi solo
producía botas y zapatos "de trabajo". De paso, Castro prohibió celebrar
la Nochebuena, Navidad, Fin de Año, Año Nuevo y el Día de Reyes, porque
interferían con la zafra.
En el delirium tremens de su megalomanía, el caudillo quiso realizar en
1970 la mayor producción azucarera lograda jamás en la historia
universal: 10 millones de toneladas métricas. Fueron virtualmente
paralizadas las restantes industrias al compás de la febril consigna
"Los diez millones van". El músico Juan Formell se lo creyó y creó la
orquesta de Los Van Van.
Ni había caña suficiente, ni capacidad industrial para ello. El ministro
del ramo, Orlando Borrego, se lo dijo a Fidel y fue destituido al
instante. Además, una gran producción derrumbaría el precio del azúcar,
pues Moscú compraría solo 3,5 o cuatro millones de toneladas métricas y
el resto aumentaría la sobreoferta que ya había internacionalmente. Se
produjeron 8,5 millones de toneladas métricas a un costo tan alto que el
país entró en una recesión de varios años.
Durante 30 años, hasta su desintegración en 1991, la URSS gastó miles de
millones de dólares para mantener y ampliar la producción azucarera
cubana (que alcanzó nuevamente ocho millones en 1990), y construyó seis
grandes fábricas. Y pagaba a Castro 45 centavos por libra de azúcar
cubana, mientras en el mercado mundial estaba a cinco centavos o menos.
Un subsidio fabuloso que se multiplicaba con la reexportación de parte
del petróleo soviético gratis "asignado" por Moscú. Al desintegrarse la
URSS la zafra se hundió, hasta el día de hoy.
Logro fidelista: importar azúcar
Si a Julio Lobo, Pepe Gómez Mena, los Falla Gutiérrez o los Fanjul (los
productores cubanos de azúcar más poderosos en los años 50) les hubiesen
dicho que Cuba tendría que importar azúcar para cubrir el consumo y
cumplir sus compromisos de exportación (que ahora prácticamente se
reducen a 400.000 toneladas métricas destinadas a China), se habrían
desternillado de la risa.
Pero lo absurdo devino realidad. A fines de 2001 los cubanos vieron
sorprendidos que procedían de Brasil las cinco libras mensuales de
azúcar sin refinar que les entregaban mediante la "libreta". Según el
Gobierno brasileño, entre 2001 y 2006 esa nación exportó a Cuba 384.204
toneladas métricas de azúcar. Y Colombia le exportó 425.609 toneladas
métricas de azúcar refino entre 2002 y 2006. En 2005 Bielorrusia exportó
a Cuba 50.000 toneladas métricas de azúcar de remolacha. Y también de
República Dominicana y hasta de EEUU (el colmo) Cuba ha importado azúcar.
Por otra parte, desde 1967 los rendimientos cubanos de caña por hectárea
son los más bajos de las Américas y probablemente del mundo. Luego de
1960 nunca los cañaverales cubanos han llegado siquiera a las 69-72
toneladas de caña por hectárea del promedio mundial. Según la Oficina
Nacional de Estadísticas e Información (ONEI), desde 2002 el promedio
cubano ha oscilado entre 24 y 41 toneladas por hectárea.
En Perú, Guatemala y Colombia obtienen entre 93 y 120 toneladas; Brasil
entre 80 y 90; El Salvador, 82; Honduras, 70; México 75-85 toneladas.
Antes del castrismo ninguna nación latinoamericana superaba a Cuba en
rendimientos cañeros. Y en la industria, la dictadura admite que la
eficiencia hoy apenas supera el 10% de obtención de azúcar por cada 100
partes de caña verde.
Sin azúcar, ni etanol
En la última zafra, la de 2015-2016, la producción azucarera no llegó a
los 1,6 millones de toneladas métricas, de las cuales unas 700.000
corresponden al consumo nacional. O sea este año se produjo tres veces
menos que en 1925.
Y ello ocurre cuando el precio mundial del azúcar ha subido a su mayor
nivel en los últimos cuatro años. La Organización Internacional del
Azúcar (OIA) prevé un déficit de azúcar de 6,7 millones de toneladas
métricas y que no habrá azúcar suficiente para cubrir la demanda global
a corto plazo. Y cualquier precio superior a los 20 centavos la libra
supera los costos de producción y da ganancia, según los expertos.
Si Fidel no hubiese destruido la industria azucarera y Cuba en 2016
hubiese producido seis millones de toneladas, la Isla habría podido
exportar 5,3 millones de toneladas, por valor de 2.332 millones de
dólares, tres veces más que los ingresos netos por el turismo.
Además, Cuba podría ser un importante exportador de biocombustibles. Con
un millón de hectáreas de caña (la mitad de las que había en 2002)
destinadas a producir solamente etanol, con un rendimiento como el de
Brasil, de 7.500 litros por hectárea, la Isla podría producir 7.500
millones de litros de etanol, que a 1,60 dólares el litro habrían
significado probablemente unos 12.000 millones de dólares, seis veces el
ingreso por turismo.
Pero el comandante calificó de "monstruosidad" producir biocombustibles
con alimentos como la caña y el maíz.
Cuba podría también desarrollar una gran industria de derivados de la
caña para producir y exportar papel, madera de bagazo para la
construcción y muebles, electricidad, fertilizantes, medicamentos y
alimento animal. Una sólida industria de la caña podría generar hasta
13.000 millones de dólares anuales.
Hoy los cubanos que viven en la Isla no tienen idea de que los hermanos
Fanjul, industriales azucareros cubanos despojados de todos sus bienes
por Fidel Castro, producen actualmente más de siete millones de
toneladas de azúcar en sus fábricas de EEUU, México, República
Dominicana, Canadá, Gran Bretaña y Portugal.
La catástrofe azucarera es solo un capítulo dentro del cataclismo
causado a Cuba por el dictador que más tiempo ha gobernado en la
historia moderna. Pero solo por haber destrozado el ancestral "sueldo"
de Cuba, lejos de ser absuelto por la historia el dictador mayor fue ya
condenado y enviado por los cubanos al noveno círculo del infierno, ese
que Dante Alighieri reservó para los peores tiranos.
Para expresar el cataclismo económico causado por Fidel Castro le doy
la palabra, con tristeza, a Luis de Góngora: "ayer maravilla fui/ y hoy
sombra de mí no soy".
Source: Sin azúcar y sin país | Diario de Cuba -
http://www.diariodecuba.com/cuba/1480424560_27052.html
Trump, Cuba y el ejemplo de Vietnam
Trump, Cuba y el ejemplo de Vietnam
DIMAS CASTELLANOS | La Habana | 29 de Noviembre de 2016 - 11:02 CET.
La mayoría de los analistas, al referirse al giro que podrían sufrir las
relaciones entre Cuba y EEUU después de las elecciones del pasado 8 de
noviembre, se han ocupado unilateralmente de la política que seguirá el
nuevo inquilino de la Casa Blanca respecto a Cuba, ignorando el carácter
bilateral de dichas relaciones.
Los vaticinios emitidos conforman un abanico que se despliega desde los
que plantean el cumplimiento de la promesa electoral de retrotraer la
política empleada por Barack Obama, hasta un posible mayor entendimiento
con las autoridades cubanas. En casi todos el acento recae en lo que
hará el nuevo mandatario, tal como si la parte cubana fuera ajena a lo
que pueda ocurrir.
Un análisis retrospectivo de las relaciones entre ambas administraciones
indica otra cosa. Teniendo en cuenta que el pueblo cubano carece de
derechos civiles y políticos para influir en ese proceso, y que la
debilidad de la sociedad civil emergente le impide desempeñar el papel
de contraparte, el análisis tiene que ceñirse a las relaciones
intergubernamentales.
Una cosa es apelar al populismo electoral y otra muy diferente es
presidir la mayor potencia del mundo. Anular lo avanzado en las
relaciones restablecidas durante la presidencia de Barack Obama será
extremadamente difícil. La institucionalización de los poderes públicos,
la existencia de diversos sectores con intereses en la Isla y los
intereses en la región frente a la penetración de otras potencias, lo
impiden. En esas condiciones Trump podría limitar o eliminar algunas
cosas, pero no podría anularlo todo, porque afectaría los propios
intereses de su país.
El restablecimiento de relaciones diplomáticas entre Cuba y EEUU —el
hecho de mayor trascendencia política después de la revolución de 1959—
responde a los intereses de ambas naciones. La suposición de que Trump
constituya un peligro para las relaciones que la Administración Obama
logró adelantar es una cara de la moneda, en la otra cara está el freno
demostrado por el Gobierno cubano para que dichas relaciones avancen.
El aferramiento a la estatización, la planificación centralizada y la
ausencia de libertades de los cubanos, están entre las principales
causas de la crisis en que Cuba se encuentra. La política de la
Administración Obama brindó una oportunidad de cambio que no fue
desaprovechada por la parte cubana para remover los obstáculos al
interior del país. Por tanto, junto al peligro potencial que pudiera
representar la Administración Trump está la negativa real del Gobierno
cubano, carente de la voluntad política necesaria para enfrentar el
presente. Una contradicción insoluble que consiste en cambiar y al mismo
tiempo conservar el poder.
La tesis de Fidel Castro, de que "Cuba ya cambió en 1959" dio paso a la
visión más pragmática del general Raúl Castro, de "cambiar algunas cosas
para conservar el poder". Las medidas implementadas con ese objetivo en
ocho años no arrojaron el resultado esperado. En su lugar develaron la
inviabilidad del modelo y la profundidad de la crisis, ante lo cual la
única salida radica en la implementación de una reforma profunda.
Si los paquetes de medidas dictados por la Casa Blanca —incluyendo la
directiva presidencial del pasado mes de noviembre dirigida a hacer
irreversible los avances logrados— no han arrojado un mayor resultado es
porque no se acompañaron con las medidas necesarias de la parte cubana
para liberar las fuerzas productivas y restituir las libertades
ciudadanas. Por esa razón, más que lo que pudiera ocurrir durante la
administración de Trump, la solución de Cuba recae en sus autoridades.
De acometerse esos cambios ahora, aunque se implementen con gran atraso,
neutralizarían cualquier intención de retroceso por parte del nuevo
inquilino de la Casa Blanca.
Teniendo en cuenta que la suspensión del embargo es prerrogativa del
Congreso estadounidense, lo indicado ahora, después de la desaparición
física de Fidel Castro, es acometer una reforma estructural e integral
que debió de haberse iniciado mucho antes, al menos, en su comienzo como
lo hiciera Vietnam, limitada a la economía. En un país donde en diez
años de guerra se arrojaron tres veces más bombas que las empleadas
durante la Segunda Guerra Mundial, y donde el 15% de la población
pereció o resultó herida en la contienda, emprendieron esas reformas.
El diario Granma del pasado 4 de noviembre, en un reporte titulado "El
Vietnam del futuro", dice que la provincia de Binh Duong, antes
eminentemente agrícola, ahora predomina la actividad industrial. Esta
provincia cuenta con más de 2.700 proyectos de inversión extranjera; el
PIB desde el 2010 crece al 14% anual; cuenta con 28 parques industriales
con fábricas construidas por empresas de más de 30 países; en los
últimos dos años se han incorporado casi 370 nuevos proyectos de
inversión, y de 1996 a la fecha han generado más de 90.000 puestos de
trabajo.
El mismo diario publicó recienmente otro artículo, "El milagro de la
economía vietnamita", donde plantea que el Banco Mundial ha colocado a
Vietnam entre los países más exitosos, que en 30 años han triplicado la
renta per cápita; entre 2003 y la actualidad redujeron la pobreza de un
59% a cerca del 12%; y en menos de 20 años sacaron de la miseria a más
de 25 millones de personas. Agrega que en 1986 el ingreso promedio de
los vietnamitas estaba entre 15 y 20 dólares al mes, y ahora oscila
entre los 200 y los 300 dólares. Recuenta además ese artículo que en
1986 fue eliminado el mecanismo centralizado y se implementó una
"economía de mercado con orientación socialista".
EEUU le suspendió a Vietnam un embargo que duró 30 años; en 2008 el país
dedicó esfuerzos a salir de la lista de países subdesarrollados; en
2010 se trazó el objetivo de entrar en el grupo de países de ingreso
medio; en 2014 se ubicó como el vigésimo octavo exportador más grande
del mundo; y en 2016 fueron aprobadas medidas destinadas a convertirlo
en una nación industrializada.
En ese mismo lapso de tiempo, Cuba se ancló en el pasado con la política
conocida como "Rectificación de errores y tendencias negativas", y logró
que durante 25 años las Naciones Unidas condenaran el embargo. Hoy
Cuba tiene que gastar millones de dólares para adquirir en el exterior
alimentos que se podrían producir en el país y, después de enseñar a los
vietnamitas a cosechar café, tenemos que comprarle ese grano.
Source: Trump, Cuba y el ejemplo de Vietnam | Diario de Cuba -
http://www.diariodecuba.com/cuba/1480373673_27043.html
DIMAS CASTELLANOS | La Habana | 29 de Noviembre de 2016 - 11:02 CET.
La mayoría de los analistas, al referirse al giro que podrían sufrir las
relaciones entre Cuba y EEUU después de las elecciones del pasado 8 de
noviembre, se han ocupado unilateralmente de la política que seguirá el
nuevo inquilino de la Casa Blanca respecto a Cuba, ignorando el carácter
bilateral de dichas relaciones.
Los vaticinios emitidos conforman un abanico que se despliega desde los
que plantean el cumplimiento de la promesa electoral de retrotraer la
política empleada por Barack Obama, hasta un posible mayor entendimiento
con las autoridades cubanas. En casi todos el acento recae en lo que
hará el nuevo mandatario, tal como si la parte cubana fuera ajena a lo
que pueda ocurrir.
Un análisis retrospectivo de las relaciones entre ambas administraciones
indica otra cosa. Teniendo en cuenta que el pueblo cubano carece de
derechos civiles y políticos para influir en ese proceso, y que la
debilidad de la sociedad civil emergente le impide desempeñar el papel
de contraparte, el análisis tiene que ceñirse a las relaciones
intergubernamentales.
Una cosa es apelar al populismo electoral y otra muy diferente es
presidir la mayor potencia del mundo. Anular lo avanzado en las
relaciones restablecidas durante la presidencia de Barack Obama será
extremadamente difícil. La institucionalización de los poderes públicos,
la existencia de diversos sectores con intereses en la Isla y los
intereses en la región frente a la penetración de otras potencias, lo
impiden. En esas condiciones Trump podría limitar o eliminar algunas
cosas, pero no podría anularlo todo, porque afectaría los propios
intereses de su país.
El restablecimiento de relaciones diplomáticas entre Cuba y EEUU —el
hecho de mayor trascendencia política después de la revolución de 1959—
responde a los intereses de ambas naciones. La suposición de que Trump
constituya un peligro para las relaciones que la Administración Obama
logró adelantar es una cara de la moneda, en la otra cara está el freno
demostrado por el Gobierno cubano para que dichas relaciones avancen.
El aferramiento a la estatización, la planificación centralizada y la
ausencia de libertades de los cubanos, están entre las principales
causas de la crisis en que Cuba se encuentra. La política de la
Administración Obama brindó una oportunidad de cambio que no fue
desaprovechada por la parte cubana para remover los obstáculos al
interior del país. Por tanto, junto al peligro potencial que pudiera
representar la Administración Trump está la negativa real del Gobierno
cubano, carente de la voluntad política necesaria para enfrentar el
presente. Una contradicción insoluble que consiste en cambiar y al mismo
tiempo conservar el poder.
La tesis de Fidel Castro, de que "Cuba ya cambió en 1959" dio paso a la
visión más pragmática del general Raúl Castro, de "cambiar algunas cosas
para conservar el poder". Las medidas implementadas con ese objetivo en
ocho años no arrojaron el resultado esperado. En su lugar develaron la
inviabilidad del modelo y la profundidad de la crisis, ante lo cual la
única salida radica en la implementación de una reforma profunda.
Si los paquetes de medidas dictados por la Casa Blanca —incluyendo la
directiva presidencial del pasado mes de noviembre dirigida a hacer
irreversible los avances logrados— no han arrojado un mayor resultado es
porque no se acompañaron con las medidas necesarias de la parte cubana
para liberar las fuerzas productivas y restituir las libertades
ciudadanas. Por esa razón, más que lo que pudiera ocurrir durante la
administración de Trump, la solución de Cuba recae en sus autoridades.
De acometerse esos cambios ahora, aunque se implementen con gran atraso,
neutralizarían cualquier intención de retroceso por parte del nuevo
inquilino de la Casa Blanca.
Teniendo en cuenta que la suspensión del embargo es prerrogativa del
Congreso estadounidense, lo indicado ahora, después de la desaparición
física de Fidel Castro, es acometer una reforma estructural e integral
que debió de haberse iniciado mucho antes, al menos, en su comienzo como
lo hiciera Vietnam, limitada a la economía. En un país donde en diez
años de guerra se arrojaron tres veces más bombas que las empleadas
durante la Segunda Guerra Mundial, y donde el 15% de la población
pereció o resultó herida en la contienda, emprendieron esas reformas.
El diario Granma del pasado 4 de noviembre, en un reporte titulado "El
Vietnam del futuro", dice que la provincia de Binh Duong, antes
eminentemente agrícola, ahora predomina la actividad industrial. Esta
provincia cuenta con más de 2.700 proyectos de inversión extranjera; el
PIB desde el 2010 crece al 14% anual; cuenta con 28 parques industriales
con fábricas construidas por empresas de más de 30 países; en los
últimos dos años se han incorporado casi 370 nuevos proyectos de
inversión, y de 1996 a la fecha han generado más de 90.000 puestos de
trabajo.
El mismo diario publicó recienmente otro artículo, "El milagro de la
economía vietnamita", donde plantea que el Banco Mundial ha colocado a
Vietnam entre los países más exitosos, que en 30 años han triplicado la
renta per cápita; entre 2003 y la actualidad redujeron la pobreza de un
59% a cerca del 12%; y en menos de 20 años sacaron de la miseria a más
de 25 millones de personas. Agrega que en 1986 el ingreso promedio de
los vietnamitas estaba entre 15 y 20 dólares al mes, y ahora oscila
entre los 200 y los 300 dólares. Recuenta además ese artículo que en
1986 fue eliminado el mecanismo centralizado y se implementó una
"economía de mercado con orientación socialista".
EEUU le suspendió a Vietnam un embargo que duró 30 años; en 2008 el país
dedicó esfuerzos a salir de la lista de países subdesarrollados; en
2010 se trazó el objetivo de entrar en el grupo de países de ingreso
medio; en 2014 se ubicó como el vigésimo octavo exportador más grande
del mundo; y en 2016 fueron aprobadas medidas destinadas a convertirlo
en una nación industrializada.
En ese mismo lapso de tiempo, Cuba se ancló en el pasado con la política
conocida como "Rectificación de errores y tendencias negativas", y logró
que durante 25 años las Naciones Unidas condenaran el embargo. Hoy
Cuba tiene que gastar millones de dólares para adquirir en el exterior
alimentos que se podrían producir en el país y, después de enseñar a los
vietnamitas a cosechar café, tenemos que comprarle ese grano.
Source: Trump, Cuba y el ejemplo de Vietnam | Diario de Cuba -
http://www.diariodecuba.com/cuba/1480373673_27043.html
La Casa Blanca advierte a Trump que romper el acercamiento a La Habana 'no es tan fácil'
La Casa Blanca advierte a Trump que romper el acercamiento a La Habana
'no es tan fácil'
AGENCIAS | Washington | 28 de Noviembre de 2016 - 22:50 CET.
La Casa Blanca advirtió este lunes que "no es tan fácil" poner fin al
acercamiento a La Habana iniciado por el mandatario estadounidense,
Barack Obama, porque tendría notables consecuencias "económicas y
diplomáticas", después de que el presidente electo, Donald Trump,
amenazara con hacerlo, reportó EFE.
"No es algo tan fácil como puede parecer en base a un solo tuit", dijo
el portavoz de la Casa Blanca, Josh Earnest, en su conferencia de prensa
diaria.
El portavoz se refería al mensaje publicado horas antes por Trump en su
cuenta oficial de Twitter, en el que afirmaba que "si (el Gobierno de)
Cuba no está dispuesto a hacer un acuerdo mejor para el pueblo cubano,
los cubanoamericanos y Estados Unidos en su conjunto", pondrán "fin al
acuerdo" que dio inicio a la normalización diplomática en 2014.
"Cancelar todo esto supondría un enorme golpe económico para los
ciudadanos cubanos", argumentó Earnest, al recordar que varias empresas
de turismo estadounidenses, como Airbnb, Marriott y Starwood han
recibido licencias para operar en la Isla y los contactos entre los
ciudadanos de ambos países han aumentado.
La política de normalización también ha deparado "notables beneficios" a
las empresas estadounidenses y al sector agrícola, recordó Earnest,
además de aumentar los viajes a Cuba de los estadounidenses, que
estimulan con su gasto la economía local.
"Hay 110 vuelos diarios programados entre Estados Unidos y Cuba en los
próximos meses", recordó el portavoz de Obama.
Earnest advirtió, además, de los efectos "diplomáticos" que tendría una
vuelta a la enemistad con La Habana en las relaciones de Washington con
el resto de Latinoamérica, que están "en su mejor momento" gracias a
haber eliminado el elemento "irritante" que suponía la tensión con el
Gobierno de Raúl Castro.
El portavoz también defendió la decisión de Obama de no criticar a Fidel
Castro en el comunicado que emitió el sábado con motivo del
fallecimiento del exgobernante, en el que dijo simplemente que la
historia "juzgará" al líder de la revolución cubana, mientras que Trump
lo tachó de "brutal dictador" que reprimió a su pueblo.
"No se puede negar el tipo de violencia que ocurrió en Cuba bajo el
régimen de Castro", indicó Earnest.
"Pero emitir un feroz comunicado e implicarnos en el tipo de
recriminaciones mutuas (con el Gobierno cubano) que están atadas al
pasado, nada de eso va a servir para mejorar las libertades en Cuba",
agregó el portavoz.
El senador republicano de origen cubano Marco Rubio y otros
anticastristas han criticado a Obama por no mencionar la represión de
Castro en su comunicado, pero Earnest destacó que el presidente prefiere
"mirar al futuro", sin olvidar el pasado.
Ni Obama ni el vicepresidente de Estados Unidos, Joseph Biden, tienen
previsto viajar a Cuba para el funeral de Fidel Castro, según informó
Earnest, que no llegó a confirmar que la Casa Blanca tenga previsto
enviar una delegación oficial a la cita pero dijo que, de ser así, se
anunciará "lo antes posible".
Source: La Casa Blanca advierte a Trump que romper el acercamiento a La
Habana 'no es tan fácil' | Diario de Cuba -
http://www.diariodecuba.com/cuba/1480369853_27039.html
'no es tan fácil'
AGENCIAS | Washington | 28 de Noviembre de 2016 - 22:50 CET.
La Casa Blanca advirtió este lunes que "no es tan fácil" poner fin al
acercamiento a La Habana iniciado por el mandatario estadounidense,
Barack Obama, porque tendría notables consecuencias "económicas y
diplomáticas", después de que el presidente electo, Donald Trump,
amenazara con hacerlo, reportó EFE.
"No es algo tan fácil como puede parecer en base a un solo tuit", dijo
el portavoz de la Casa Blanca, Josh Earnest, en su conferencia de prensa
diaria.
El portavoz se refería al mensaje publicado horas antes por Trump en su
cuenta oficial de Twitter, en el que afirmaba que "si (el Gobierno de)
Cuba no está dispuesto a hacer un acuerdo mejor para el pueblo cubano,
los cubanoamericanos y Estados Unidos en su conjunto", pondrán "fin al
acuerdo" que dio inicio a la normalización diplomática en 2014.
"Cancelar todo esto supondría un enorme golpe económico para los
ciudadanos cubanos", argumentó Earnest, al recordar que varias empresas
de turismo estadounidenses, como Airbnb, Marriott y Starwood han
recibido licencias para operar en la Isla y los contactos entre los
ciudadanos de ambos países han aumentado.
La política de normalización también ha deparado "notables beneficios" a
las empresas estadounidenses y al sector agrícola, recordó Earnest,
además de aumentar los viajes a Cuba de los estadounidenses, que
estimulan con su gasto la economía local.
"Hay 110 vuelos diarios programados entre Estados Unidos y Cuba en los
próximos meses", recordó el portavoz de Obama.
Earnest advirtió, además, de los efectos "diplomáticos" que tendría una
vuelta a la enemistad con La Habana en las relaciones de Washington con
el resto de Latinoamérica, que están "en su mejor momento" gracias a
haber eliminado el elemento "irritante" que suponía la tensión con el
Gobierno de Raúl Castro.
El portavoz también defendió la decisión de Obama de no criticar a Fidel
Castro en el comunicado que emitió el sábado con motivo del
fallecimiento del exgobernante, en el que dijo simplemente que la
historia "juzgará" al líder de la revolución cubana, mientras que Trump
lo tachó de "brutal dictador" que reprimió a su pueblo.
"No se puede negar el tipo de violencia que ocurrió en Cuba bajo el
régimen de Castro", indicó Earnest.
"Pero emitir un feroz comunicado e implicarnos en el tipo de
recriminaciones mutuas (con el Gobierno cubano) que están atadas al
pasado, nada de eso va a servir para mejorar las libertades en Cuba",
agregó el portavoz.
El senador republicano de origen cubano Marco Rubio y otros
anticastristas han criticado a Obama por no mencionar la represión de
Castro en su comunicado, pero Earnest destacó que el presidente prefiere
"mirar al futuro", sin olvidar el pasado.
Ni Obama ni el vicepresidente de Estados Unidos, Joseph Biden, tienen
previsto viajar a Cuba para el funeral de Fidel Castro, según informó
Earnest, que no llegó a confirmar que la Casa Blanca tenga previsto
enviar una delegación oficial a la cita pero dijo que, de ser así, se
anunciará "lo antes posible".
Source: La Casa Blanca advierte a Trump que romper el acercamiento a La
Habana 'no es tan fácil' | Diario de Cuba -
http://www.diariodecuba.com/cuba/1480369853_27039.html
No pasará nada
No pasará nada
Los regímenes comunistas, sin necesidad de que sus autoridades anden en
las calles con fusiles y ametralladoras, mantienen a toda la sociedad
bajo su dominio
Félix Luis Viera, Miami | 29/11/2016 9:34 am
El reciente fallecimiento del exgobernante de Cuba, Fidel Castro, no
tendrá un efecto notable en la situación del país.
Sí logrará cierto impacto psicológico en el presidente heredero, Raúl
Castro, quien como se sabe, de algún modo o en cierta medida durante
toda su vida se cobijó bajo la sombra de Fidel. Así tenemos que este,
con el propósito de que su hermano menor continuase su legado, le puso
los grados de general y le pasó la estafeta presidencial.
Por estos días no pocos analistas, presentadores de televisión,
comentaristas de la radio —contrarios al castrismo—, han mostrado una
especie de júbilo sin mucho asidero —o con ningún asidero— al dar a
conocer vaticinios sobre la desaparición a corto plazo del régimen
existente en la Isla.
Pero no pasará nada.
Los mecanismos de represión están bien engrasados, amén de que son todo
lo perfecto que se puede ser en este propósito. Lo sabe cualquier hijo
de vecino: en Cuba, como en todos los otrora países socialistas de
Europa oriental, el control va de abajo arriba y de arriba abajo. Los
regímenes comunistas, sin necesidad de que sus autoridades anden en las
calles con fusiles y ametralladoras, mantienen a toda la sociedad bajo
su dominio.
El arma fundamental de estos gobiernos es la extorsión, el chantaje, la
amenaza en abstracto, digamos. Que tienen su basamento en un Gobierno
que es el dueño de todo o al menos de todo lo fundamental.
Ejemplos: ¿Qué madre o padre se atreverán a manifestarse de una u otra
forma contra el régimen cuando su hijo o hija se halla en el umbral de
acceder a la universidad, mas podría quedar fuera puesto que "La
Universidad es de los revolucionarios"?
¿Quién, que esté "clasificando" para la obtención del derecho a comprar
una vivienda, se atrevería a no asistir a una reunión nocturna del
Comité de Defensa de la Revolución de la cuadra, si bien esta le resulte
aborrecible y más cuando se siente sumamente agotado por la actividad de
todo el día? Y lo mismo ocurre con quien esté optando por una licencia
para trabajador por cuenta propia o por un viaje al extranjero o un
ascenso en su escalara laboral.
Creo que sería raro encontrar a un cubano de cierta edad que no haya
sido objeto, al menos una vez, de los chantajes expuestos en los
párrafos anteriores o de alguno parecido; los cuales, en ocasiones el
interesado asume sin que resulte necesario que le sean aplicados.
No pasará nada.
Las honras fúnebres para Fidel Castro serán multitudinarias y en toda la
república. Y luego de que estas concluyan todo volverá a la normalidad.
O sería correcto aclarar: a esa "normalidad" existente en Cuba y que en
otros sitios sería calificada, sin pensarlo dos veces, de "absurdo".
Como pueden ser el absurdo de la unanimidad en las ideas en general, o
la de una Mesa Redonda donde todo el mundo piensa igual o la de un
ejército y una policía "constitucionalmente" bajo la égida del Gobierno
o la de 1.302 periodistas que están de acuerdo en publicar lo mismo o de
una Asamblea Nacional (Congreso) donde los 600 miembros votan
exactamente igual.
El comunismo es el más fiel exponente del absurdo.
Y es por eso una mueca en la historia.
Y reza en cierta novela: "el comunismo es la llave más perfecta que se
haya concebido, pero no abre ninguna puerta".
Es decir, no pasará nada. Los regímenes comunistas, por los detalles
antes narrados y los tantos del mismo estilo que podrían faltar, no
sucumbe de abajo hacia arriba. Sino de la manera contraria.
La extinta Unión Soviética y la actuación de Mijaíl Gorbachov así lo
demuestran.
De manera que... ¿esperar por un Gorbachov tropical? Pues bueno, debe ser...
Pero, ¿quién sabe cuándo?
Source: No pasará nada - Artículos - Cuba - Cuba Encuentro -
http://www.cubaencuentro.com/cuba/articulos/no-pasara-nada-327835
Los regímenes comunistas, sin necesidad de que sus autoridades anden en
las calles con fusiles y ametralladoras, mantienen a toda la sociedad
bajo su dominio
Félix Luis Viera, Miami | 29/11/2016 9:34 am
El reciente fallecimiento del exgobernante de Cuba, Fidel Castro, no
tendrá un efecto notable en la situación del país.
Sí logrará cierto impacto psicológico en el presidente heredero, Raúl
Castro, quien como se sabe, de algún modo o en cierta medida durante
toda su vida se cobijó bajo la sombra de Fidel. Así tenemos que este,
con el propósito de que su hermano menor continuase su legado, le puso
los grados de general y le pasó la estafeta presidencial.
Por estos días no pocos analistas, presentadores de televisión,
comentaristas de la radio —contrarios al castrismo—, han mostrado una
especie de júbilo sin mucho asidero —o con ningún asidero— al dar a
conocer vaticinios sobre la desaparición a corto plazo del régimen
existente en la Isla.
Pero no pasará nada.
Los mecanismos de represión están bien engrasados, amén de que son todo
lo perfecto que se puede ser en este propósito. Lo sabe cualquier hijo
de vecino: en Cuba, como en todos los otrora países socialistas de
Europa oriental, el control va de abajo arriba y de arriba abajo. Los
regímenes comunistas, sin necesidad de que sus autoridades anden en las
calles con fusiles y ametralladoras, mantienen a toda la sociedad bajo
su dominio.
El arma fundamental de estos gobiernos es la extorsión, el chantaje, la
amenaza en abstracto, digamos. Que tienen su basamento en un Gobierno
que es el dueño de todo o al menos de todo lo fundamental.
Ejemplos: ¿Qué madre o padre se atreverán a manifestarse de una u otra
forma contra el régimen cuando su hijo o hija se halla en el umbral de
acceder a la universidad, mas podría quedar fuera puesto que "La
Universidad es de los revolucionarios"?
¿Quién, que esté "clasificando" para la obtención del derecho a comprar
una vivienda, se atrevería a no asistir a una reunión nocturna del
Comité de Defensa de la Revolución de la cuadra, si bien esta le resulte
aborrecible y más cuando se siente sumamente agotado por la actividad de
todo el día? Y lo mismo ocurre con quien esté optando por una licencia
para trabajador por cuenta propia o por un viaje al extranjero o un
ascenso en su escalara laboral.
Creo que sería raro encontrar a un cubano de cierta edad que no haya
sido objeto, al menos una vez, de los chantajes expuestos en los
párrafos anteriores o de alguno parecido; los cuales, en ocasiones el
interesado asume sin que resulte necesario que le sean aplicados.
No pasará nada.
Las honras fúnebres para Fidel Castro serán multitudinarias y en toda la
república. Y luego de que estas concluyan todo volverá a la normalidad.
O sería correcto aclarar: a esa "normalidad" existente en Cuba y que en
otros sitios sería calificada, sin pensarlo dos veces, de "absurdo".
Como pueden ser el absurdo de la unanimidad en las ideas en general, o
la de una Mesa Redonda donde todo el mundo piensa igual o la de un
ejército y una policía "constitucionalmente" bajo la égida del Gobierno
o la de 1.302 periodistas que están de acuerdo en publicar lo mismo o de
una Asamblea Nacional (Congreso) donde los 600 miembros votan
exactamente igual.
El comunismo es el más fiel exponente del absurdo.
Y es por eso una mueca en la historia.
Y reza en cierta novela: "el comunismo es la llave más perfecta que se
haya concebido, pero no abre ninguna puerta".
Es decir, no pasará nada. Los regímenes comunistas, por los detalles
antes narrados y los tantos del mismo estilo que podrían faltar, no
sucumbe de abajo hacia arriba. Sino de la manera contraria.
La extinta Unión Soviética y la actuación de Mijaíl Gorbachov así lo
demuestran.
De manera que... ¿esperar por un Gorbachov tropical? Pues bueno, debe ser...
Pero, ¿quién sabe cuándo?
Source: No pasará nada - Artículos - Cuba - Cuba Encuentro -
http://www.cubaencuentro.com/cuba/articulos/no-pasara-nada-327835
Fear, Dry Law and Funerals
Fear, Dry Law and Funerals / 14ymedio, Zunilda Mata
14ymedio/EFE, Havana, 28 November 2016 — The always busy corner of
Infanta and Carlos III was a desolate wasteland Sunday. Since the death
of Fidel Castro was announced, Havanans have gathered at home. The
official media say that it is from pain, but fear is the protagonist of
days in which the sale of alcoholic beverages has been prohibited and
the biggest funerals in contemporary Cuba are arranged.
Foreign journalists are arriving in the country by the hundreds and are
seen in the streets trying to interview every passerby. Many pedestrians
look down and refuse to give interviews. When the reporters finally
manage to get some statements, they are only from those who agree with
the official discourse. Inside people's homes everything is different.
"Luckily we had a bottle of rum left over from a party," says Chicho, a
retired teacher who has waited decades for this moment. "It is not that
we're celebrating the death of a human being, because this man made us
all believe that he was not one… that he was above life and death," he
tells 14ymedio.
Chicho has a nine-year-old granddaughter who will go to school early
this Monday, although there are doubts about how the week will go in
schools and workplaces, in the midst of the national mourning that has
been decreed for nine days. "I'm sure that they aren't going to teach
classes, there is going to be one event and another until the day the
ashes reach the Santa Ifigenia Cemetery," says the grandfather.
For Mileidis, a resident of Havana's Regla neighborhood, there is
another concern. "My brother is a son of Changó," (an orisha of the
Afro-Cuban religion who is the equivalent of Saint Barbara). The
celebration of the saint is held every December 4, the same day the
national mourning concludes. "I don't know how we are going to get the
brandy and rum," the young woman worries.
The festivities on the eve of Saint Barbara are very popular on the
island, fueled by drumbeats, Yoruba songs and a great deal of alcohol.
With the sale of alcohol prohibited, many Santería rights are in danger
of collapse. Distilled alcohol has doubled in price in barely three days
of the "dry law."
A well-known bar on Reina Street is deserted and the drinks list has
been put away. Nearby, in El Curita park, three regulars of the place
get together on a corner and pass a plastic container that looks like it
contains cola. In reality it is distilled alcohol, better known as
"train sparks" for the effects it occasions in the stomach when ingested.
Police patrol cars and uniformed officers approach, and the three men
hide the bottle. "This is my thing, I can't live without it," says one
of the men, justifying his transgression. "What fault is it of mine that
He can no longer take a drink?" he reflects, slurring his words.
Posters with the face of Fidel Castro are everywhere. Since the
celebration of his 90th birthday in August, the tone of the personality
cult has noticeably risen, such that Cubans seem to be used to Fidelmania.
"Will they change the bust of José Martí in the schools for one of
Fidel?" a seven-year-old girl asks her mother. In the street, Havana
residents speculate about the anticipated tributes to Castro and expect
the establishment of an official order in his honor, his face on a
banknote, a multi-story iron relief with his silhouette in the Plaza of
the Revolution — like the ones for Che Guevara and Camilo Cienfuegos –
some street with his name, and a museum in his memory in the heart of
the city.
The most daring even predict a change in the only political organization
allowed in the country. "It's a good moment to shake off the communist
label," an official academic who asked for anonymity told this
newspaper. "It's possible that at the next plenary session of the Cuban
Communist Party or at an extraordinary congress they will re-baptize it
the Fidelista Party.
In tune with popular predictions, the illegal lottery, known as la
bolita, has seen an increase in bets on the numbers that mean 'police,'
'great death,' and 'horse,' the later for Fidel Castro's nickname, "El
Caballo."
Source: Fear, Dry Law and Funerals / 14ymedio, Zunilda Mata –
Translating Cuba -
http://translatingcuba.com/fear-dry-law-and-funerals-14ymedio-zunilda-mata/
14ymedio/EFE, Havana, 28 November 2016 — The always busy corner of
Infanta and Carlos III was a desolate wasteland Sunday. Since the death
of Fidel Castro was announced, Havanans have gathered at home. The
official media say that it is from pain, but fear is the protagonist of
days in which the sale of alcoholic beverages has been prohibited and
the biggest funerals in contemporary Cuba are arranged.
Foreign journalists are arriving in the country by the hundreds and are
seen in the streets trying to interview every passerby. Many pedestrians
look down and refuse to give interviews. When the reporters finally
manage to get some statements, they are only from those who agree with
the official discourse. Inside people's homes everything is different.
"Luckily we had a bottle of rum left over from a party," says Chicho, a
retired teacher who has waited decades for this moment. "It is not that
we're celebrating the death of a human being, because this man made us
all believe that he was not one… that he was above life and death," he
tells 14ymedio.
Chicho has a nine-year-old granddaughter who will go to school early
this Monday, although there are doubts about how the week will go in
schools and workplaces, in the midst of the national mourning that has
been decreed for nine days. "I'm sure that they aren't going to teach
classes, there is going to be one event and another until the day the
ashes reach the Santa Ifigenia Cemetery," says the grandfather.
For Mileidis, a resident of Havana's Regla neighborhood, there is
another concern. "My brother is a son of Changó," (an orisha of the
Afro-Cuban religion who is the equivalent of Saint Barbara). The
celebration of the saint is held every December 4, the same day the
national mourning concludes. "I don't know how we are going to get the
brandy and rum," the young woman worries.
The festivities on the eve of Saint Barbara are very popular on the
island, fueled by drumbeats, Yoruba songs and a great deal of alcohol.
With the sale of alcohol prohibited, many Santería rights are in danger
of collapse. Distilled alcohol has doubled in price in barely three days
of the "dry law."
A well-known bar on Reina Street is deserted and the drinks list has
been put away. Nearby, in El Curita park, three regulars of the place
get together on a corner and pass a plastic container that looks like it
contains cola. In reality it is distilled alcohol, better known as
"train sparks" for the effects it occasions in the stomach when ingested.
Police patrol cars and uniformed officers approach, and the three men
hide the bottle. "This is my thing, I can't live without it," says one
of the men, justifying his transgression. "What fault is it of mine that
He can no longer take a drink?" he reflects, slurring his words.
Posters with the face of Fidel Castro are everywhere. Since the
celebration of his 90th birthday in August, the tone of the personality
cult has noticeably risen, such that Cubans seem to be used to Fidelmania.
"Will they change the bust of José Martí in the schools for one of
Fidel?" a seven-year-old girl asks her mother. In the street, Havana
residents speculate about the anticipated tributes to Castro and expect
the establishment of an official order in his honor, his face on a
banknote, a multi-story iron relief with his silhouette in the Plaza of
the Revolution — like the ones for Che Guevara and Camilo Cienfuegos –
some street with his name, and a museum in his memory in the heart of
the city.
The most daring even predict a change in the only political organization
allowed in the country. "It's a good moment to shake off the communist
label," an official academic who asked for anonymity told this
newspaper. "It's possible that at the next plenary session of the Cuban
Communist Party or at an extraordinary congress they will re-baptize it
the Fidelista Party.
In tune with popular predictions, the illegal lottery, known as la
bolita, has seen an increase in bets on the numbers that mean 'police,'
'great death,' and 'horse,' the later for Fidel Castro's nickname, "El
Caballo."
Source: Fear, Dry Law and Funerals / 14ymedio, Zunilda Mata –
Translating Cuba -
http://translatingcuba.com/fear-dry-law-and-funerals-14ymedio-zunilda-mata/
The Myth Died, Cuba Must Change
The Myth Died, Cuba Must Change / 14ymedio, Pedro Campos
14ymedio, Pedro Campos, Havana, 27 November 2016 — Fidel Castro has
died. The mythic figure has died. The event will be discussed for a long
time and from many points of view. Nine days of mourning has been
decreed in Havana, the flag is at half mast; in Miami they are partying,
the same Cuban flag held high.
The Fidelistas mourn, the anti-Fidelistas party. The vast majority of
the island's population, eager for changes, are waiting. It could not be
any other way. Since the attack on the Moncada Barracks in 1953, Fidel
Castro's imprint on Cuba shapes our days. The government is ready to
maintain total control over the streets. Its mass organizations are
mobilized to prevent and counteract any demonstrations against him.
But like the myth, his charisma and his influence are not inherited. We
can affirm that a political cycle in Cuba has ended: the eclectic sum of
conceptions that make up Fidelism, populism, authoritarianism,
neo-Stalinism, statism and bureaucratism, just received a mortal blow. A
stage of inevitable changes opens.
Raul Castro, since he assumed power in 2006, promised to undertake
important reforms, replaced many officials, and began dictatorially
implementing a set of measures that he consolidated and expanded in both
Cuban Communist Party Congresses held since then, but without
establishing a legal framework that guarantees them.
During these years, the bureaucracy, laws, regulations and customs of
Fidelism, established over almost 60 years, have prevented such reforms
from being fully deployed.
Raul Castro now has the opportunity to demonstrate whether his reformist
proposals are real or were just a deliberate attempt to counter the
resistance within the system and seek international recognition and funding.
Cuba's economic situation requires that the changes set forth by Raul be
deepened and expanded, that all state monopolistic barriers to domestic
and foreign markets for capital investment, enterprise development and
productive initiatives of all kinds be broken.
However, it does imply that the Fidelistas abandon their positions in
the government and the Party and that many regulations and customs of
traditional statism be removed. This will be very difficult if, in
parallel, there is no democratization process that permits deep
criticism of the Fidel regime, the adoption of new forms of organization
in the economy and politics, and the emergence and development of new
entrepreneurs and unprejudiced leaders at all levels the society.
Cuba is facing inevitable changes. The death of the mythic figure favors
them. The Cuban people also demand them. Everyone, those inside and
those outside, regardless of their political ideas, must have the right
to participate in the reconstruction of the nation. Achieving it more or
less peacefully will depend on those who still hold power in Cuba.
It is time to assume, with decency, José Martí's homeland: With all and
for the good of all.
Source: The Myth Died, Cuba Must Change / 14ymedio, Pedro Campos –
Translating Cuba -
http://translatingcuba.com/the-myth-died-cuba-must-change-14ymedio-pedro-campos/
14ymedio, Pedro Campos, Havana, 27 November 2016 — Fidel Castro has
died. The mythic figure has died. The event will be discussed for a long
time and from many points of view. Nine days of mourning has been
decreed in Havana, the flag is at half mast; in Miami they are partying,
the same Cuban flag held high.
The Fidelistas mourn, the anti-Fidelistas party. The vast majority of
the island's population, eager for changes, are waiting. It could not be
any other way. Since the attack on the Moncada Barracks in 1953, Fidel
Castro's imprint on Cuba shapes our days. The government is ready to
maintain total control over the streets. Its mass organizations are
mobilized to prevent and counteract any demonstrations against him.
But like the myth, his charisma and his influence are not inherited. We
can affirm that a political cycle in Cuba has ended: the eclectic sum of
conceptions that make up Fidelism, populism, authoritarianism,
neo-Stalinism, statism and bureaucratism, just received a mortal blow. A
stage of inevitable changes opens.
Raul Castro, since he assumed power in 2006, promised to undertake
important reforms, replaced many officials, and began dictatorially
implementing a set of measures that he consolidated and expanded in both
Cuban Communist Party Congresses held since then, but without
establishing a legal framework that guarantees them.
During these years, the bureaucracy, laws, regulations and customs of
Fidelism, established over almost 60 years, have prevented such reforms
from being fully deployed.
Raul Castro now has the opportunity to demonstrate whether his reformist
proposals are real or were just a deliberate attempt to counter the
resistance within the system and seek international recognition and funding.
Cuba's economic situation requires that the changes set forth by Raul be
deepened and expanded, that all state monopolistic barriers to domestic
and foreign markets for capital investment, enterprise development and
productive initiatives of all kinds be broken.
However, it does imply that the Fidelistas abandon their positions in
the government and the Party and that many regulations and customs of
traditional statism be removed. This will be very difficult if, in
parallel, there is no democratization process that permits deep
criticism of the Fidel regime, the adoption of new forms of organization
in the economy and politics, and the emergence and development of new
entrepreneurs and unprejudiced leaders at all levels the society.
Cuba is facing inevitable changes. The death of the mythic figure favors
them. The Cuban people also demand them. Everyone, those inside and
those outside, regardless of their political ideas, must have the right
to participate in the reconstruction of the nation. Achieving it more or
less peacefully will depend on those who still hold power in Cuba.
It is time to assume, with decency, José Martí's homeland: With all and
for the good of all.
Source: The Myth Died, Cuba Must Change / 14ymedio, Pedro Campos –
Translating Cuba -
http://translatingcuba.com/the-myth-died-cuba-must-change-14ymedio-pedro-campos/
Miedo, ley seca y funerales
Miedo, ley seca y funerales
ZUNILDA MATA, La Habana | Noviembre 28, 2016
La siempre concurrida esquina de Infanta y Carlos III era este domingo
un desolado páramo. Desde que se anunció la muerte de Fidel Castro, los
habaneros se han recogido en casa. Los medios oficiales dicen que por
dolor, pero el miedo es el protagonista de unos días en que se ha
prohibido la venta de bebidas alcohólicas y se organizan los funerales
más grandes de la Cuba contemporánea.
Los periodistas extranjeros llegan por cientos al país y se les ve en
las calles tratando de entrevistar a todo el que pasa. Muchos
transeúntes bajan la mirada y rechazan dar entrevistas. Cuando
finalmente los reporteros logran algunas declaraciones, solo son
aquellas que coinciden con el discurso oficial. En el interior de los
hogares todo es diferente.
"Por suerte teníamos una botella de ron que nos había quedado de una
fiesta", cuenta Chicho, un maestro retirado que había esperado durante
décadas este momento. "No es que estemos celebrando el fallecimiento de
un ser humano, porque este hombre nos hizo creer a todos que no lo
era... que estaba por encima de la vida y de la muerte", asegura a 14ymedio.
Chicho tiene una nieta de nueve años que este lunes irá temprano a la
escuela, aunque hay dudas de cómo funcionará la semana docente y laboral
en medio del duelo nacional que ha sido decretado por nueve días. "Estoy
seguro de que no van a dar clases, esto va a ser de un acto en otro
hasta el día que las cenizas lleguen al cementerio de Santa Ifigenia",
apunta el abuelo.
Para Mileidis, vecina del municipio habanero de Regla, la preocupación
es otra. "Mi hermano es hijo de Changó" (un orisha de la religión
afrocubana que se sincretiza con Santa Bárbara). La celebración de la
santa se hace cada 4 de diciembre, justo el día en que concluye el duelo
nacional. "No sé cómo vamos a conseguir el aguardiente y el ron", se
preocupa la joven.
Las festividades durante la víspera de Santa Bárbara son muy populares
en la Isla. Toques de tambor, cantos yorubas y mucho alcohol
protagonizan las actividades. Con la venta de bebidas prohibida, muchos
ritos de la santería están a punto de naufragar. El alcohol destilado ha
duplicado su precio en apenas tres días de "ley seca".
Un conocido bar de la calle Reina muestra su barra desierta y la
tablilla de ofertas ha sido retirada. Cerca de ahí, en el parque El
Curita, tres habituales del local se reúnen en una esquina y se pasan un
envase de plástico que simula ser un refresco de cola. En realidad es
alcohol destilado, más conocido como "chispa de tren" por los efectos
que ocasiona en el estómago cuando se ingiere.
Las patrullas policiales y los uniformados rondan el lugar y los tres
hombres esconden la botella. "Esto es lo mío, yo no puedo vivir sin
esto", afirma uno de los hombres para justificar su transgresión. "¿Qué
culpa tengo yo de que Él ya no se pueda dar un trago?", reflexiona con
la lengua enredada.
Los carteles con el rostro de Fidel Castro están por todos lados. Desde
la celebración por su 90 cumpleaños, en agosto pasado, había subido
mucho el tono del culto a la personalidad, de manera que los cubanos
parecen estar acostumbrados a la fidelmanía.
"¿En la escuela van a cambiar el busto de Martí por uno de Fidel?",
pregunta una niña de siete años a su madre. En la calle, los habaneros
especulan sobre los previsibles homenajes a Castro y apuestan por la
instauración de una orden oficial en su honor, la impresión de su rostro
en algún billete, un relieve con su silueta en la Plaza de la
Revolución, alguna calle con su nombre y un museo en su memoria en el
corazón de la ciudad.
Los más osados vaticinan incluso un cambio en la única organización
política permitida en el país. "Es un buen momento para sacudirse eso de
comunista", comenta a este diario un académico oficial que pide el
anonimato. "Es posible que en el próximo pleno del PCC o en un congreso
extraordinario lo rebauticen como Partido Fidelista".
A tono con los vaticinios populares, la lotería ilegal, conocida como la
bolita, ha visto un aumento de las apuestas alrededor de los números que
significan policía, muerto grande y caballo.
Source: Miedo, ley seca y funerales -
http://www.14ymedio.com/nacional/Miedo-ley-seca-funerales_0_2117188267.html
ZUNILDA MATA, La Habana | Noviembre 28, 2016
La siempre concurrida esquina de Infanta y Carlos III era este domingo
un desolado páramo. Desde que se anunció la muerte de Fidel Castro, los
habaneros se han recogido en casa. Los medios oficiales dicen que por
dolor, pero el miedo es el protagonista de unos días en que se ha
prohibido la venta de bebidas alcohólicas y se organizan los funerales
más grandes de la Cuba contemporánea.
Los periodistas extranjeros llegan por cientos al país y se les ve en
las calles tratando de entrevistar a todo el que pasa. Muchos
transeúntes bajan la mirada y rechazan dar entrevistas. Cuando
finalmente los reporteros logran algunas declaraciones, solo son
aquellas que coinciden con el discurso oficial. En el interior de los
hogares todo es diferente.
"Por suerte teníamos una botella de ron que nos había quedado de una
fiesta", cuenta Chicho, un maestro retirado que había esperado durante
décadas este momento. "No es que estemos celebrando el fallecimiento de
un ser humano, porque este hombre nos hizo creer a todos que no lo
era... que estaba por encima de la vida y de la muerte", asegura a 14ymedio.
Chicho tiene una nieta de nueve años que este lunes irá temprano a la
escuela, aunque hay dudas de cómo funcionará la semana docente y laboral
en medio del duelo nacional que ha sido decretado por nueve días. "Estoy
seguro de que no van a dar clases, esto va a ser de un acto en otro
hasta el día que las cenizas lleguen al cementerio de Santa Ifigenia",
apunta el abuelo.
Para Mileidis, vecina del municipio habanero de Regla, la preocupación
es otra. "Mi hermano es hijo de Changó" (un orisha de la religión
afrocubana que se sincretiza con Santa Bárbara). La celebración de la
santa se hace cada 4 de diciembre, justo el día en que concluye el duelo
nacional. "No sé cómo vamos a conseguir el aguardiente y el ron", se
preocupa la joven.
Las festividades durante la víspera de Santa Bárbara son muy populares
en la Isla. Toques de tambor, cantos yorubas y mucho alcohol
protagonizan las actividades. Con la venta de bebidas prohibida, muchos
ritos de la santería están a punto de naufragar. El alcohol destilado ha
duplicado su precio en apenas tres días de "ley seca".
Un conocido bar de la calle Reina muestra su barra desierta y la
tablilla de ofertas ha sido retirada. Cerca de ahí, en el parque El
Curita, tres habituales del local se reúnen en una esquina y se pasan un
envase de plástico que simula ser un refresco de cola. En realidad es
alcohol destilado, más conocido como "chispa de tren" por los efectos
que ocasiona en el estómago cuando se ingiere.
Las patrullas policiales y los uniformados rondan el lugar y los tres
hombres esconden la botella. "Esto es lo mío, yo no puedo vivir sin
esto", afirma uno de los hombres para justificar su transgresión. "¿Qué
culpa tengo yo de que Él ya no se pueda dar un trago?", reflexiona con
la lengua enredada.
Los carteles con el rostro de Fidel Castro están por todos lados. Desde
la celebración por su 90 cumpleaños, en agosto pasado, había subido
mucho el tono del culto a la personalidad, de manera que los cubanos
parecen estar acostumbrados a la fidelmanía.
"¿En la escuela van a cambiar el busto de Martí por uno de Fidel?",
pregunta una niña de siete años a su madre. En la calle, los habaneros
especulan sobre los previsibles homenajes a Castro y apuestan por la
instauración de una orden oficial en su honor, la impresión de su rostro
en algún billete, un relieve con su silueta en la Plaza de la
Revolución, alguna calle con su nombre y un museo en su memoria en el
corazón de la ciudad.
Los más osados vaticinan incluso un cambio en la única organización
política permitida en el país. "Es un buen momento para sacudirse eso de
comunista", comenta a este diario un académico oficial que pide el
anonimato. "Es posible que en el próximo pleno del PCC o en un congreso
extraordinario lo rebauticen como Partido Fidelista".
A tono con los vaticinios populares, la lotería ilegal, conocida como la
bolita, ha visto un aumento de las apuestas alrededor de los números que
significan policía, muerto grande y caballo.
Source: Miedo, ley seca y funerales -
http://www.14ymedio.com/nacional/Miedo-ley-seca-funerales_0_2117188267.html
martes, 29 de noviembre de 2016
Murió Fidel, pero el fidelismo sigue vivo
Murió Fidel, pero el fidelismo sigue vivo
PEDRO CAMPOS | La Habana | 29 de Noviembre de 2016 - 11:37 CET.
Fidel Castro ha muerto, pero su impronta, estampada con saña sobre la
sociedad cubana durante 63 años, cuatro meses y 25 días, desde el asalto
al cuartel Moncada el 26 de julio de 1953, "cuando todo comenzó",
continúa vigente, perjudicando el presente y amenazando el futuro de la
nación cubana.
El fidelismo, esa mezcla ecléctica de populismo, voluntarismo,
corrupto-estatalismo asalariado, neoestalinismo y autoritarismo, está
enraizado en la sociedad cubana, en los cerebros de muchos de los
"dirigentes comunistas" designados y en no pocos cubanos de a pie a los
que se mal acostumbró a la filosofía enfermiza y destructora de depender
de las dádivas de "Papá Estado".
No se trata de hacer "leña del árbol caído"; quienes lo criticamos en
vida, de frente y a todo riesgo, compartimos el derecho de todos a
expresar nuestros sentimientos, puntos de vista y preocupaciones en
estos momentos, sobre Cuba, su sociedad y el proceso político-económico
y social desarrollado en Cuba en nombre de un socialismo que nunca
existió y de una revolución que fue secuestrada, burlada y violada en la
inocencia y la buena voluntad de su pueblo.
Por eso, ahora que todo el mundo habla de Fidel Castro y su legado, no
puede faltar el análisis crítico del nefasto papel jugado por el
fidelismo en Cuba y en el seno del movimiento revolucionario y
socialista internacional. No será posible hacerlo en unos breves
escritos a propósito de su muerte. Serán necesarios varios gruesos
volúmenes escritos desde todos los ángulos y visiones, pero la tarea es
impostergable, aunque mucho ya se ha avanzado durante su propia existencia.
En estas breves notas y en estos momentos, quiero dejar expresada la
esencia de lo que vengo publicando hace ya más de diez años: el
fidelismo nada tiene que ver con el socialismo auténtico, ni con las
esencias políticas económicas y sociales del pensamiento marxista, y se
demuestra simplemente porque toda la obra del fidelismo solo ha servido
en Cuba para tratar de consolidar un capitalismo monopolista de Estado,
y porque nacional e internacionalmente solo consiguió el repudio de las
clases trabajadoras y productivas contra las ideas socialistas.
Si un pensamiento político desquiciado sirvió para fracturar, destruir,
inmovilizar y neutralizar el avance del socialismo auténtico en el mundo
y especialmente en América Latina, ese ha sido el fidelismo, a tal punto
que grandes movimientos políticos y de masas de los mismos trabajadores
rechazan la ideas de luchar por el socialismo, por el cambio hacia
relaciones de producción libres —privadas y asociadas—, y defienden
medidas para preservar las formas de producción asalariadas que
tipifican el capitalismo y constituyen la base sobre la cual se sustenta
todo su sistema.
Pero como el pensamiento retrógrado y contrarrevolucionario del
estatalismo asalariado, base socio-económica del fidelismo, está en
crisis y en caída libre desde la caída de la URSS y el llamado campo
socialista, nada ha podido evitar su desastre en Cuba y en la región
latinoamericana. Nada ha podido evitar tampoco que, en el propio seno
del capitalismo, las formas de producción libres, independientes,
privadas o asociadas, crezcan y se desarrollen, que un socialismo
natural fluya y progrese.
Y por mucho que haya pretendido ocultar el enfrentamiento con su
hermano, Raúl Castro mismo se vio obligado a realizar una serie de
transformaciones que llevaron a liberar a la sociedad cubana de varias
de las absurdas regulaciones impuestas en estos largos años de
fidelismo. Raúl avanzó, aunque nunca pudo completar, una serie de
medidas económicas que, de aplicarse consecuentemente, ya hubieran
provocado un significativo cambio en la realidad cubana, en todos los
órdenes.
Poco tiempo queda ya a Raúl Castro para activar esos cambios. Ahora
veremos en Cuba, en el mundo oficial, una lucha por preservar el legado
fidelista contra los intentos de acelerar y profundizar los cambios
aprobados en el VI Congreso y VII Congreso del PCC, especialmente en lo
relacionado con la extensión del trabajo por cuenta propia, el
cooperativismo libre, la participación de los trabajadores en las
ganancias de las empresas estatales, concretar la inversión extranjera y
liberar la economía de todas las trabas y monopolios estatales en el
mercado y la propiedad.
Que tales cambios fructifiquen y posibiliten una consolidación del ala
pragmática en la que se encuentran muchos militares y elementos
vinculados a las empresas estatales relacionadas con el capital
extranjero fundamentalmente y la esfera del turismo internacional,
dependerá de la permanencia de los fidelistas en las posiciones
fundamentales del Partido y el Gobierno.
El ala pragmática está preñada de la contradicción que significa
mantener la unidad del oficialismo en torno a la figura histórica de
Fidel y al mismo tiempo dejar atrás su legado socio-económico. El parto
de una criatura nueva y progresista se producirá si se acompaña de un
proceso de democratización política que rescate la libertad de
expresión, crítica, asociación y elección, que permita la participación
pacífica y democrática de todos los sectores de la sociedad cubana,
especialmente el opositor, la disidencia socialista y el pensamiento
diferente.
Los grandes errores de Gorbachov fueron no sacar de la dirección del
PCUS a los conservadores, no ganarse el apoyo de la disidencia
socialista, los demócratas y los liberales y no desestatizar la economía.
Cuba tiene ahora, como nunca, la posibilidad de cambiar y de hacer
realidad los grandes enunciados democráticos originales que provocaron
la revolución de 1959. La gran mayoría del pueblo cubano así lo demanda.
Es la hora de la sociedad en que quepamos todos los cubanos, los de
dentro y los de fuera y, en la armonía de las diferencias, levantar la
gran nación que soñaron nuestros padres fundadores del siglo XIX.
¿Podremos? Sí, se puede, si todos asumimos responsable y sabiamente el
momento histórico.
Source: Murió Fidel, pero el fidelismo sigue vivo | Diario de Cuba -
http://www.diariodecuba.com/cuba/1480370292_27040.html
PEDRO CAMPOS | La Habana | 29 de Noviembre de 2016 - 11:37 CET.
Fidel Castro ha muerto, pero su impronta, estampada con saña sobre la
sociedad cubana durante 63 años, cuatro meses y 25 días, desde el asalto
al cuartel Moncada el 26 de julio de 1953, "cuando todo comenzó",
continúa vigente, perjudicando el presente y amenazando el futuro de la
nación cubana.
El fidelismo, esa mezcla ecléctica de populismo, voluntarismo,
corrupto-estatalismo asalariado, neoestalinismo y autoritarismo, está
enraizado en la sociedad cubana, en los cerebros de muchos de los
"dirigentes comunistas" designados y en no pocos cubanos de a pie a los
que se mal acostumbró a la filosofía enfermiza y destructora de depender
de las dádivas de "Papá Estado".
No se trata de hacer "leña del árbol caído"; quienes lo criticamos en
vida, de frente y a todo riesgo, compartimos el derecho de todos a
expresar nuestros sentimientos, puntos de vista y preocupaciones en
estos momentos, sobre Cuba, su sociedad y el proceso político-económico
y social desarrollado en Cuba en nombre de un socialismo que nunca
existió y de una revolución que fue secuestrada, burlada y violada en la
inocencia y la buena voluntad de su pueblo.
Por eso, ahora que todo el mundo habla de Fidel Castro y su legado, no
puede faltar el análisis crítico del nefasto papel jugado por el
fidelismo en Cuba y en el seno del movimiento revolucionario y
socialista internacional. No será posible hacerlo en unos breves
escritos a propósito de su muerte. Serán necesarios varios gruesos
volúmenes escritos desde todos los ángulos y visiones, pero la tarea es
impostergable, aunque mucho ya se ha avanzado durante su propia existencia.
En estas breves notas y en estos momentos, quiero dejar expresada la
esencia de lo que vengo publicando hace ya más de diez años: el
fidelismo nada tiene que ver con el socialismo auténtico, ni con las
esencias políticas económicas y sociales del pensamiento marxista, y se
demuestra simplemente porque toda la obra del fidelismo solo ha servido
en Cuba para tratar de consolidar un capitalismo monopolista de Estado,
y porque nacional e internacionalmente solo consiguió el repudio de las
clases trabajadoras y productivas contra las ideas socialistas.
Si un pensamiento político desquiciado sirvió para fracturar, destruir,
inmovilizar y neutralizar el avance del socialismo auténtico en el mundo
y especialmente en América Latina, ese ha sido el fidelismo, a tal punto
que grandes movimientos políticos y de masas de los mismos trabajadores
rechazan la ideas de luchar por el socialismo, por el cambio hacia
relaciones de producción libres —privadas y asociadas—, y defienden
medidas para preservar las formas de producción asalariadas que
tipifican el capitalismo y constituyen la base sobre la cual se sustenta
todo su sistema.
Pero como el pensamiento retrógrado y contrarrevolucionario del
estatalismo asalariado, base socio-económica del fidelismo, está en
crisis y en caída libre desde la caída de la URSS y el llamado campo
socialista, nada ha podido evitar su desastre en Cuba y en la región
latinoamericana. Nada ha podido evitar tampoco que, en el propio seno
del capitalismo, las formas de producción libres, independientes,
privadas o asociadas, crezcan y se desarrollen, que un socialismo
natural fluya y progrese.
Y por mucho que haya pretendido ocultar el enfrentamiento con su
hermano, Raúl Castro mismo se vio obligado a realizar una serie de
transformaciones que llevaron a liberar a la sociedad cubana de varias
de las absurdas regulaciones impuestas en estos largos años de
fidelismo. Raúl avanzó, aunque nunca pudo completar, una serie de
medidas económicas que, de aplicarse consecuentemente, ya hubieran
provocado un significativo cambio en la realidad cubana, en todos los
órdenes.
Poco tiempo queda ya a Raúl Castro para activar esos cambios. Ahora
veremos en Cuba, en el mundo oficial, una lucha por preservar el legado
fidelista contra los intentos de acelerar y profundizar los cambios
aprobados en el VI Congreso y VII Congreso del PCC, especialmente en lo
relacionado con la extensión del trabajo por cuenta propia, el
cooperativismo libre, la participación de los trabajadores en las
ganancias de las empresas estatales, concretar la inversión extranjera y
liberar la economía de todas las trabas y monopolios estatales en el
mercado y la propiedad.
Que tales cambios fructifiquen y posibiliten una consolidación del ala
pragmática en la que se encuentran muchos militares y elementos
vinculados a las empresas estatales relacionadas con el capital
extranjero fundamentalmente y la esfera del turismo internacional,
dependerá de la permanencia de los fidelistas en las posiciones
fundamentales del Partido y el Gobierno.
El ala pragmática está preñada de la contradicción que significa
mantener la unidad del oficialismo en torno a la figura histórica de
Fidel y al mismo tiempo dejar atrás su legado socio-económico. El parto
de una criatura nueva y progresista se producirá si se acompaña de un
proceso de democratización política que rescate la libertad de
expresión, crítica, asociación y elección, que permita la participación
pacífica y democrática de todos los sectores de la sociedad cubana,
especialmente el opositor, la disidencia socialista y el pensamiento
diferente.
Los grandes errores de Gorbachov fueron no sacar de la dirección del
PCUS a los conservadores, no ganarse el apoyo de la disidencia
socialista, los demócratas y los liberales y no desestatizar la economía.
Cuba tiene ahora, como nunca, la posibilidad de cambiar y de hacer
realidad los grandes enunciados democráticos originales que provocaron
la revolución de 1959. La gran mayoría del pueblo cubano así lo demanda.
Es la hora de la sociedad en que quepamos todos los cubanos, los de
dentro y los de fuera y, en la armonía de las diferencias, levantar la
gran nación que soñaron nuestros padres fundadores del siglo XIX.
¿Podremos? Sí, se puede, si todos asumimos responsable y sabiamente el
momento histórico.
Source: Murió Fidel, pero el fidelismo sigue vivo | Diario de Cuba -
http://www.diariodecuba.com/cuba/1480370292_27040.html
lunes, 28 de noviembre de 2016
Exilio cubano alienta aviso de Trump de romper acuerdo si no hay cambios
Exilio cubano alienta aviso de Trump de romper acuerdo si no hay cambios
Emilio J López
Jorge Más Santos, de la Fundación Nacional Cubano Americana; Ángel De
Fana, director de Plantados; Antonio Díaz Sánchez, secretario general
del Movimiento Cristiano de Liberación y José Basulto, fundador de
Hermanos al Rescate, manifestaron su respaldo a las palabras del
presidente electo.
Cuatro grupos del exilio cubano mostraron su respaldo unánime al aviso
hecho este lunes por el presidente electo de EEUU, Donald Trump, de que
romperá el "acuerdo" con Cuba si el Gobierno de la isla no accede a
mejorarlo en beneficio del pueblo cubano.
Jorge Más Santos, presidente de la influyente Fundación Nacional Cubano
Americana (FNCA), se mostró partidario de que Estados Unidos "renegocie
o tome medidas unilaterales" para "empoderar" al "empobrecido" pueblo
cubano, si el régimen cubano "no responde a los "pasos" dados por el
Gobierno estadounidense.
Se abre un nuevo contexto y marco de relaciones bilaterales que exigirá
a La Habana "establecer profundas reformas económicas y políticas
necesarias para el beneficio de los cubanos", dijo a la agencia de
noticias EFE Más Santos, hijo del activista cubano fallecido Jorge Mas
Canosa, fundador de la FNCA.
Trump escribió este lunes en su cuenta de Twitter que "si Cuba no está
dispuesta a hacer un acuerdo mejor para el pueblo cubano y los
cubanoestadounidenses en su conjunto", pondrá fin al acuerdo.
"Estamos seguros de que el mensaje de Trump es positivo. Nos alegra que
tenga esa posición" y diga que pondrá fin al "acuerdo" y "concesiones" a
Cuba de no producirse un "cambio para mejor del pueblo cubano", señaló a
EFE Ángel De Fana, director de Plantados, uno de los grupos que integran
la Asamblea de la Resistencia Cubana en Miami.
Si bien entiende De Fana que son los cubanos dentro de la isla los que
deben decidir sobre su destino, se mostró feliz de que el republicano
Trump asuma un papel activo en la promoción de la "libertad, democracia
y mejora de las condiciones de vida" de la población en la isla.
En coincidencia con Mas Santos, De Fana expresó su confianza en que la
nueva Administración estadounidense "contribuya" a impulsar avances en
el terreno de los derechos políticos y civiles de la población cubana y
no acepte "concesiones sin cambios".
Este posible crucial viraje de EEUU en relación con la isla fue también
aplaudido por Antonio Díaz Sánchez, secretario general del Movimiento
Cristiano de Liberación (MCL), fundado por el fallecido opositor cubano
Oswaldo Payá.
"Creemos que el Gobierno estadounidense tiene que ser pública, abierta y
claramente solidario con el derecho de los cubanos a pronunciarse
mediante elecciones libres", reclamó Díaz.
A la vez, el activista cubano apeló a la "solidaridad internacional" de
los países democráticos en la consideración de que los cubanos "también
tienen derecho a la libertad y la responsabilidad de lograrla".
Por ello, prosiguió, tanto las relaciones diplomáticas como el
intercambio económico con la isla caribeña deben, en primer lugar,
"partir de que Cuba no es un país democrático y sin derechos".
Durante las primarias y en la carrera por la Presidencia del país, Trump
hizo frecuentes alusiones a que "revocaría" las medidas ejecutivas del
presidente Barack Obama "a no ser que el régimen de los Castro"
restaurara "las libertades en la isla".
Una "solidaridad con las libertad del pueblo de Cuba", por parte de
Trump, que debe exigir, reiteró Díaz, "elecciones libres", aunque
todavía está por determinar, precisó, cuáles son esos aspectos concretos
del "acuerdo" con Cuba que tiene en su punto de mira el magnate neoyorquino.
De momento, el futuro jefe de gabinete de Trump, Reince Priebus, dijo el
domingo que el presidente electo aguardará a ver "algunos movimientos"
de La Habana en relación con las libertades en la isla caribeña para
decidir cómo será su relación y, de no haberlos, revertirá el
acercamiento entre ambas naciones iniciado en diciembre de 2014.
José Basulto, fundador de Hermanos al Rescate, no ocultó a EFE su
satisfacción por la muerte del líder histórico de la revolución, Fidel
Castro, a quien tachó de "padre del miedo", al tiempo que manifestó su
esperanza en que, a partir de ahora, "quizá se abran un poco las puertas
para que el pueblo cubano pueda buscar un cambio efectivo".
Pero "si el Gobierno cubano no se abre al pueblo, estoy más que de
acuerdo con Trump en que se ponga fin a la relación y acuerdos con
Cuba", aunque ese es un terreno de la exclusividad del Gobierno
estadounidense, precisó Basulto.
Mientras, numerosas organizaciones del exilio cubano convocaron a una
concentración masiva por la "libertad y democracia en Cuba" el próximo
miércoles en el barrio de la Pequeña Habana de Miami.
La concentración consistirá en un "acto conciso y poderoso" que pretende
llevar un mensaje de unidad y "un llamado a la acción de la resistencia
cubana", según un manifiesto que leyó en una rueda de prensa el
presidente de la Asociación de Veteranos de la Brigada 2506, Humberto
Argüelles.
Source: Exilio cubano alienta aviso de Trump de romper acuerdo si no hay
cambios -
http://www.martinoticias.com/a/cuba-fidel-castro-exilio-alienta-romper-acuerdo-eeuu/134368.html
Emilio J López
Jorge Más Santos, de la Fundación Nacional Cubano Americana; Ángel De
Fana, director de Plantados; Antonio Díaz Sánchez, secretario general
del Movimiento Cristiano de Liberación y José Basulto, fundador de
Hermanos al Rescate, manifestaron su respaldo a las palabras del
presidente electo.
Cuatro grupos del exilio cubano mostraron su respaldo unánime al aviso
hecho este lunes por el presidente electo de EEUU, Donald Trump, de que
romperá el "acuerdo" con Cuba si el Gobierno de la isla no accede a
mejorarlo en beneficio del pueblo cubano.
Jorge Más Santos, presidente de la influyente Fundación Nacional Cubano
Americana (FNCA), se mostró partidario de que Estados Unidos "renegocie
o tome medidas unilaterales" para "empoderar" al "empobrecido" pueblo
cubano, si el régimen cubano "no responde a los "pasos" dados por el
Gobierno estadounidense.
Se abre un nuevo contexto y marco de relaciones bilaterales que exigirá
a La Habana "establecer profundas reformas económicas y políticas
necesarias para el beneficio de los cubanos", dijo a la agencia de
noticias EFE Más Santos, hijo del activista cubano fallecido Jorge Mas
Canosa, fundador de la FNCA.
Trump escribió este lunes en su cuenta de Twitter que "si Cuba no está
dispuesta a hacer un acuerdo mejor para el pueblo cubano y los
cubanoestadounidenses en su conjunto", pondrá fin al acuerdo.
"Estamos seguros de que el mensaje de Trump es positivo. Nos alegra que
tenga esa posición" y diga que pondrá fin al "acuerdo" y "concesiones" a
Cuba de no producirse un "cambio para mejor del pueblo cubano", señaló a
EFE Ángel De Fana, director de Plantados, uno de los grupos que integran
la Asamblea de la Resistencia Cubana en Miami.
Si bien entiende De Fana que son los cubanos dentro de la isla los que
deben decidir sobre su destino, se mostró feliz de que el republicano
Trump asuma un papel activo en la promoción de la "libertad, democracia
y mejora de las condiciones de vida" de la población en la isla.
En coincidencia con Mas Santos, De Fana expresó su confianza en que la
nueva Administración estadounidense "contribuya" a impulsar avances en
el terreno de los derechos políticos y civiles de la población cubana y
no acepte "concesiones sin cambios".
Este posible crucial viraje de EEUU en relación con la isla fue también
aplaudido por Antonio Díaz Sánchez, secretario general del Movimiento
Cristiano de Liberación (MCL), fundado por el fallecido opositor cubano
Oswaldo Payá.
"Creemos que el Gobierno estadounidense tiene que ser pública, abierta y
claramente solidario con el derecho de los cubanos a pronunciarse
mediante elecciones libres", reclamó Díaz.
A la vez, el activista cubano apeló a la "solidaridad internacional" de
los países democráticos en la consideración de que los cubanos "también
tienen derecho a la libertad y la responsabilidad de lograrla".
Por ello, prosiguió, tanto las relaciones diplomáticas como el
intercambio económico con la isla caribeña deben, en primer lugar,
"partir de que Cuba no es un país democrático y sin derechos".
Durante las primarias y en la carrera por la Presidencia del país, Trump
hizo frecuentes alusiones a que "revocaría" las medidas ejecutivas del
presidente Barack Obama "a no ser que el régimen de los Castro"
restaurara "las libertades en la isla".
Una "solidaridad con las libertad del pueblo de Cuba", por parte de
Trump, que debe exigir, reiteró Díaz, "elecciones libres", aunque
todavía está por determinar, precisó, cuáles son esos aspectos concretos
del "acuerdo" con Cuba que tiene en su punto de mira el magnate neoyorquino.
De momento, el futuro jefe de gabinete de Trump, Reince Priebus, dijo el
domingo que el presidente electo aguardará a ver "algunos movimientos"
de La Habana en relación con las libertades en la isla caribeña para
decidir cómo será su relación y, de no haberlos, revertirá el
acercamiento entre ambas naciones iniciado en diciembre de 2014.
José Basulto, fundador de Hermanos al Rescate, no ocultó a EFE su
satisfacción por la muerte del líder histórico de la revolución, Fidel
Castro, a quien tachó de "padre del miedo", al tiempo que manifestó su
esperanza en que, a partir de ahora, "quizá se abran un poco las puertas
para que el pueblo cubano pueda buscar un cambio efectivo".
Pero "si el Gobierno cubano no se abre al pueblo, estoy más que de
acuerdo con Trump en que se ponga fin a la relación y acuerdos con
Cuba", aunque ese es un terreno de la exclusividad del Gobierno
estadounidense, precisó Basulto.
Mientras, numerosas organizaciones del exilio cubano convocaron a una
concentración masiva por la "libertad y democracia en Cuba" el próximo
miércoles en el barrio de la Pequeña Habana de Miami.
La concentración consistirá en un "acto conciso y poderoso" que pretende
llevar un mensaje de unidad y "un llamado a la acción de la resistencia
cubana", según un manifiesto que leyó en una rueda de prensa el
presidente de la Asociación de Veteranos de la Brigada 2506, Humberto
Argüelles.
Source: Exilio cubano alienta aviso de Trump de romper acuerdo si no hay
cambios -
http://www.martinoticias.com/a/cuba-fidel-castro-exilio-alienta-romper-acuerdo-eeuu/134368.html
Consenso en el Congreso para revertir política de Obama hacia Cuba
Consenso en el Congreso para revertir política de Obama hacia Cuba
noviembre 27, 2016
Líderes del Senado y de la Cámara de Representantes coinciden en que se
debe revertir la política de Obama hacia Cuba.
Dos senadores republicanos y ex candidatos presidenciales que ahora
apoyan al presidente electo Donald Trump, Marco Rubio y Ted Cruz, se
manifestaron a favor de que la Casa Blanca pise el freno en la relación
con el régimen de Cuba.
Rubio, quien en la interna republicana tuvo ásperos cruces con Trump,
expresó que el mandatario electo "ha dejado claro que él siente que los
pasos del presidente (Barack) Obama hacia Cuba fueron equivocados".
Trump adelantó que "examinaría esos pasos y cambiará lo que sea
necesario cambiar. Yo pienso que esa visión es promisoria", dijo Rubio.
A su vez, Cruz se pronunció en favor de mantener el embargo económico y
comercial al régimen de Cuba, medida que a la luz de la aproximación
iniciada entre Washington y La Habana esperaban en ambos lados del
estrecho de Florida que fuera eliminada por el Congreso estadounidense.
"La presión económica estaba teniendo efecto real", dijo Cruz este domingo.
Con los republicanos en control de las dos cámaras del Congreso, las
posibilidades de que el Poder Legislativo inicie el desmonte del
enmarañado legal del embargo se tornan más remotas.
En el último año, Obama introdujo algunas flexibilizaciones al embargo
mediante decretos presidenciales, pero ya en la campaña electoral Trump
sugirió que, una vez en la Casa Blanca, podría cancelarlos para retornar
a la situación previa.
El legislador conservador Michael McCaul, líder de la Comisión de
Seguridad Interna de la Cámara de Representantes, apuntó en una nota que
se sentía "confiado en que la nueva administración repensará esta
política de aproximación" a Cuba.
Source: Consenso en el Congreso para revertir política de Obama hacia
Cuba -
http://www.martinoticias.com/a/piden-revertir-politica-de-ee-uu-con-cuba-/134314.html
noviembre 27, 2016
Líderes del Senado y de la Cámara de Representantes coinciden en que se
debe revertir la política de Obama hacia Cuba.
Dos senadores republicanos y ex candidatos presidenciales que ahora
apoyan al presidente electo Donald Trump, Marco Rubio y Ted Cruz, se
manifestaron a favor de que la Casa Blanca pise el freno en la relación
con el régimen de Cuba.
Rubio, quien en la interna republicana tuvo ásperos cruces con Trump,
expresó que el mandatario electo "ha dejado claro que él siente que los
pasos del presidente (Barack) Obama hacia Cuba fueron equivocados".
Trump adelantó que "examinaría esos pasos y cambiará lo que sea
necesario cambiar. Yo pienso que esa visión es promisoria", dijo Rubio.
A su vez, Cruz se pronunció en favor de mantener el embargo económico y
comercial al régimen de Cuba, medida que a la luz de la aproximación
iniciada entre Washington y La Habana esperaban en ambos lados del
estrecho de Florida que fuera eliminada por el Congreso estadounidense.
"La presión económica estaba teniendo efecto real", dijo Cruz este domingo.
Con los republicanos en control de las dos cámaras del Congreso, las
posibilidades de que el Poder Legislativo inicie el desmonte del
enmarañado legal del embargo se tornan más remotas.
En el último año, Obama introdujo algunas flexibilizaciones al embargo
mediante decretos presidenciales, pero ya en la campaña electoral Trump
sugirió que, una vez en la Casa Blanca, podría cancelarlos para retornar
a la situación previa.
El legislador conservador Michael McCaul, líder de la Comisión de
Seguridad Interna de la Cámara de Representantes, apuntó en una nota que
se sentía "confiado en que la nueva administración repensará esta
política de aproximación" a Cuba.
Source: Consenso en el Congreso para revertir política de Obama hacia
Cuba -
http://www.martinoticias.com/a/piden-revertir-politica-de-ee-uu-con-cuba-/134314.html
La insuficiente muerte de Fidel
La insuficiente muerte de Fidel
GUILLERMO DESCALZI
En La Isla del Resolver, Cuba, hay quienes nacieron antes del muerto
pero son los menos. La mayoría –de 57 años para abajo– no conoce más que
el castrismo y todos tienen que recurrir a 'resolver', resolver la
situación inmediata cualquiera que sea. Sería heroico si no fuese
patético. La muerte de Fidel es insuficiente, hay que clavarle la estaca.
To be or not to be, la duda hamlética en Cuba la resolvió el estado.
Vivir, 'ser' en la isla, incluye enormes cantidades de 'no ser' y la
mayoría sigue 'no siendo' porque Castro no termina de morir, vive en el
fidelismo que chupa la existencia de los cubanos, muchos sin tan
siquiera darse cuenta de ello.
El son, al contrario de lo que dice la canción, nunca se fue de Cuba
porque el cubano lo lleva en la sangre. Lo que se fue es una gran parte
de lo que podría haber sido.
Pienso, luego existo, en eso está la razón más clara del carácter
criminal del Fidel castrismo: Chupó la existencia del cubano promedio
encadenando su pensamiento en paisajes de semividas que añoran lo que
muchos ni saben que añoran. Ese es el más siniestro de los crímenes de
Fidel, haberles succionado la existencia a millones.
Fidel el semimuerto continúa robando la vida de los cubanos, una
'robo-lución' más que cualquier otra cosa que sus herederos pretendan
que es. Sus simpatizantes extranjeros piensan, cuando van a la isla
"¡Qué heroicos son, miren como aguantan!". No, no es heroísmo, es
miseria impuesta a la inocencia de vidas robadas y eso, nuevamente, no
es heroico, es patético.
Lo que se ve, lo que yo vi en La Habana en mis tiempos de corresponsal,
es una tragedia existencial tan cotidiana que tiene hasta momentos color
de rosa, y así siguen los habaneros en semividas tras la insuficiente
muerte de Fidel.
El cadáver sigue chupándoles la existencia a los cubanos que siguen en
la sordidez de vidas refugiadas en la oscuridad para resolver la miseria
que les dejó… Al fidelismo le falta la estaca.
El deterioro de La Habana nunca fue casual. El desastre urbano de la
ciudad fue impuesto, abandono como política de estado para rebajar a la
burguesía, un ardid para mermarle dignidad.
El fidelismo avanza ahora con el modelo chino y la cooperación de
Estados Unidos en una clara instancia de comu-talismo, comunismo
capitalista. El comutalismo chino está siendo trasplantado a 90 millas
de Key West. ¿Y la estaca?
El entonces cardenal primado de La Habana, Jaime Lucas Ortega y Alamino,
dijo en los dolores de parto del comutalismo cubano que "la cesación
laboral de muchos será un proceso de readaptación". Siguió con que
"diría que hay un poquito de expectativa". ¿Readaptación, un poquito de
expectativa? Eso, señores, es lo que esperan los herederos de Fidel.
El sector empresarial y laboral privado en la isla es una ilusión, un
espejismo, un montaje para alimentar al estado. ¿Se le dará la
oportunidad al comutalismo en Cuba? Es un misterio… misterioso.
El castrismo sigue vivo tras la defunción de Castro por muerte
insuficiente. Allí está Venezuela como ejemplo de pataleo del cadáver
tras la ida de Chávez. Los muertos, señores, no se van solos, hay que
sacarlos.
¿Tendrá glorias el comandante? Sí, las de un megalómano que se vio como
fuerza del destino, de una oratoria brillante que yo escuché en el
teatro Karl Marx de La Habana, un encantador de serpientes que mesmerizó
a la Unión Soviética y paralizó múltiples gobiernos americanos, que
ahora se va con órdenes de quemar su cadáver para que no lo vejen. ¿Les
recuerda a alguien?
La hora ha llegado… ¿o será una hora que tan solo parezca haber llegado
una vez más? El cambio es inevitable pero necesita esfuerzo. ¿La estaca?
Periodista, escritor y filósofo peruano.
Source: La insuficiente muerte de Fidel | El Nuevo Herald -
http://www.elnuevoherald.com/opinion-es/opin-col-blogs/guillermo-descalzi/article117508363.html
GUILLERMO DESCALZI
En La Isla del Resolver, Cuba, hay quienes nacieron antes del muerto
pero son los menos. La mayoría –de 57 años para abajo– no conoce más que
el castrismo y todos tienen que recurrir a 'resolver', resolver la
situación inmediata cualquiera que sea. Sería heroico si no fuese
patético. La muerte de Fidel es insuficiente, hay que clavarle la estaca.
To be or not to be, la duda hamlética en Cuba la resolvió el estado.
Vivir, 'ser' en la isla, incluye enormes cantidades de 'no ser' y la
mayoría sigue 'no siendo' porque Castro no termina de morir, vive en el
fidelismo que chupa la existencia de los cubanos, muchos sin tan
siquiera darse cuenta de ello.
El son, al contrario de lo que dice la canción, nunca se fue de Cuba
porque el cubano lo lleva en la sangre. Lo que se fue es una gran parte
de lo que podría haber sido.
Pienso, luego existo, en eso está la razón más clara del carácter
criminal del Fidel castrismo: Chupó la existencia del cubano promedio
encadenando su pensamiento en paisajes de semividas que añoran lo que
muchos ni saben que añoran. Ese es el más siniestro de los crímenes de
Fidel, haberles succionado la existencia a millones.
Fidel el semimuerto continúa robando la vida de los cubanos, una
'robo-lución' más que cualquier otra cosa que sus herederos pretendan
que es. Sus simpatizantes extranjeros piensan, cuando van a la isla
"¡Qué heroicos son, miren como aguantan!". No, no es heroísmo, es
miseria impuesta a la inocencia de vidas robadas y eso, nuevamente, no
es heroico, es patético.
Lo que se ve, lo que yo vi en La Habana en mis tiempos de corresponsal,
es una tragedia existencial tan cotidiana que tiene hasta momentos color
de rosa, y así siguen los habaneros en semividas tras la insuficiente
muerte de Fidel.
El cadáver sigue chupándoles la existencia a los cubanos que siguen en
la sordidez de vidas refugiadas en la oscuridad para resolver la miseria
que les dejó… Al fidelismo le falta la estaca.
El deterioro de La Habana nunca fue casual. El desastre urbano de la
ciudad fue impuesto, abandono como política de estado para rebajar a la
burguesía, un ardid para mermarle dignidad.
El fidelismo avanza ahora con el modelo chino y la cooperación de
Estados Unidos en una clara instancia de comu-talismo, comunismo
capitalista. El comutalismo chino está siendo trasplantado a 90 millas
de Key West. ¿Y la estaca?
El entonces cardenal primado de La Habana, Jaime Lucas Ortega y Alamino,
dijo en los dolores de parto del comutalismo cubano que "la cesación
laboral de muchos será un proceso de readaptación". Siguió con que
"diría que hay un poquito de expectativa". ¿Readaptación, un poquito de
expectativa? Eso, señores, es lo que esperan los herederos de Fidel.
El sector empresarial y laboral privado en la isla es una ilusión, un
espejismo, un montaje para alimentar al estado. ¿Se le dará la
oportunidad al comutalismo en Cuba? Es un misterio… misterioso.
El castrismo sigue vivo tras la defunción de Castro por muerte
insuficiente. Allí está Venezuela como ejemplo de pataleo del cadáver
tras la ida de Chávez. Los muertos, señores, no se van solos, hay que
sacarlos.
¿Tendrá glorias el comandante? Sí, las de un megalómano que se vio como
fuerza del destino, de una oratoria brillante que yo escuché en el
teatro Karl Marx de La Habana, un encantador de serpientes que mesmerizó
a la Unión Soviética y paralizó múltiples gobiernos americanos, que
ahora se va con órdenes de quemar su cadáver para que no lo vejen. ¿Les
recuerda a alguien?
La hora ha llegado… ¿o será una hora que tan solo parezca haber llegado
una vez más? El cambio es inevitable pero necesita esfuerzo. ¿La estaca?
Periodista, escritor y filósofo peruano.
Source: La insuficiente muerte de Fidel | El Nuevo Herald -
http://www.elnuevoherald.com/opinion-es/opin-col-blogs/guillermo-descalzi/article117508363.html
Presidente electo, no abandone a los cubanos ahora
Presidente electo, no abandone a los cubanos ahora
BENJAMÍN F. DEYURRE
Casi 58 años de férrea dictadura comunista están terminando en Cuba. Al
menos esa parece ser la señal que se transmite con la desaparición del
tirano mayor. Y precisamente, es en esta etapa de transición cuando el
pueblo de Cuba necesita más ayuda.
¿Qué se puede esperar en el corto plazo? El gobierno cubano está
temeroso de una reacción vigorosa interna y externa, a raíz de la muerte
de su líder. Eso se dejó entrever con los recientes ejercicios
militares, previos o no, al fallecimiento de Castro. El mensaje es
"estamos preparados para defender la revolución".
¿Cuál revolución? La verdadera fue en 1959. Después se han revolucionado
muchas cosas; la inexistencia de industrias básicas, la expropiación de
bienes privados, la ausencia de partidos políticos, el abarrotamiento de
las cárceles, la negación de libertad de expresión y la exportación de
ideas subversivas a Latinoamérica y el mundo.
Se puede esperar que el régimen intensifique la opresión como medida
cautelar. Más acciones de brigadas callejeras contra cualquier intento
de motín. Más represalias contra las Damas de Blanco. Más vigilancia de
las viviendas de opositores. En fin, toda una serie de operaciones de
inteligencia propias de una dictadura cuando su jefe desaparece.
¿Cuál debe ser la función de EEUU ahora? ¿Acaso romper con el régimen
como respuesta a este momento coyuntural? Geopolíticamente hablando, no
parece ser una reacción inteligente.
Muchos opinan que las relaciones con Cuba han oxigenado al régimen y
prolongado su vida. Sin embargo, tenemos que reconocer que ese sistema
ha estado en un "período especial" por más de 50 años, es decir, si la
normalización de relaciones no existiera, ese eterno "período especial"
simplemente hubiera continuado. La represión y falta de libertades
existían antes y continúan ahora.
Si EEUU rompe con Cuba todo queda igual, menos algo muy importante; la
apertura económica que paulatinamente beneficia al sufrido pueblo cubano.
Los numerosos viajes de cubanos y norteamericanos a Cuba, por mar y
aire, son masivos ahora, al punto que la demanda supera a la oferta y
las reservaciones se agotan. ¿Quién puede negar que esto beneficia al
cubano de a pie? Los servicios al turismo son extensivos. Muchos cubanos
rentan espacios económicos al mejor estilo bed and breakfast
norteamericano. Otros ofrecen métodos de transporte mediante automóviles
reconstruidos durante 50 años por los geniales mecánicos de la isla.
Algunos deleitan a los más exigentes comensales en los diversos
restaurantes caseros conocidos como paladares. Una multitud vende
artesanía y productos variados a los turistas en las playas y parques.
Algunos políticos locales se han dado a la tarea de promocionar un
endurecimiento o finiquito de las relaciones diplomáticas. Si fuera así,
ya vimos que los más perjudicados serían los cubanos "cuentapropistas"
que ganan su sustento día a día. Nos preguntamos: si los cubanos han
logrado establecer negocios propios con una total falta de suministros,
¿qué pasaría si el dólar llegara a circular profusamente en Cuba? El
auge económico aceleraría el derrumbe de la dictadura.
Siempre que hay perjudicados es porque existen beneficiados. ¿Quiénes se
benefician, o sea, quiénes son los interesados en romper relaciones?
Cuba actualmente es un centro turístico multitudinario. Sus playas y
paisajes naturales están clasificados entre los mejores del mundo. La
simpatía y la amabilidad innata del cubano es un imán para el turista.
La hermosura y candidez de la mujer cubana es reconocida mundialmente.
Todo esto hace de Cuba un lugar ideal para establecer un polo de
desarrollo turístico mundial. Ello requiere de inversiones múltiples,
capaces de reconstruir la isla por completo. Un capital de unos $100.000
millones pudiera levantar hoteles y remozar ciudades enteras. Esto
significa empleos y negocios.
Por supuesto, existen sectores interesados en que el turismo no se
escape a Cuba. A ellos no les importa las necesidades del pueblo cubano.
Se dice que cuando el cerebro deja de funcionar, el cuerpo cae solo.
Donald Trump no debe abandonar a los cubanos en este momento. Por el
contrario, como brillante negociante debería pensar en la forma de
llegar a un acuerdo para invertir masivamente en Cuba. El futuro es
promisorio.
Economista y periodista.
Siga a Benjamín F. DeYurre en Twitter: @DeYURRE
Source: Presidente electo, no abandone a los cubanos ahora | El Nuevo
Herald -
http://www.elnuevoherald.com/opinion-es/opin-col-blogs/opinion-sobre-cuba/article117507463.html
BENJAMÍN F. DEYURRE
Casi 58 años de férrea dictadura comunista están terminando en Cuba. Al
menos esa parece ser la señal que se transmite con la desaparición del
tirano mayor. Y precisamente, es en esta etapa de transición cuando el
pueblo de Cuba necesita más ayuda.
¿Qué se puede esperar en el corto plazo? El gobierno cubano está
temeroso de una reacción vigorosa interna y externa, a raíz de la muerte
de su líder. Eso se dejó entrever con los recientes ejercicios
militares, previos o no, al fallecimiento de Castro. El mensaje es
"estamos preparados para defender la revolución".
¿Cuál revolución? La verdadera fue en 1959. Después se han revolucionado
muchas cosas; la inexistencia de industrias básicas, la expropiación de
bienes privados, la ausencia de partidos políticos, el abarrotamiento de
las cárceles, la negación de libertad de expresión y la exportación de
ideas subversivas a Latinoamérica y el mundo.
Se puede esperar que el régimen intensifique la opresión como medida
cautelar. Más acciones de brigadas callejeras contra cualquier intento
de motín. Más represalias contra las Damas de Blanco. Más vigilancia de
las viviendas de opositores. En fin, toda una serie de operaciones de
inteligencia propias de una dictadura cuando su jefe desaparece.
¿Cuál debe ser la función de EEUU ahora? ¿Acaso romper con el régimen
como respuesta a este momento coyuntural? Geopolíticamente hablando, no
parece ser una reacción inteligente.
Muchos opinan que las relaciones con Cuba han oxigenado al régimen y
prolongado su vida. Sin embargo, tenemos que reconocer que ese sistema
ha estado en un "período especial" por más de 50 años, es decir, si la
normalización de relaciones no existiera, ese eterno "período especial"
simplemente hubiera continuado. La represión y falta de libertades
existían antes y continúan ahora.
Si EEUU rompe con Cuba todo queda igual, menos algo muy importante; la
apertura económica que paulatinamente beneficia al sufrido pueblo cubano.
Los numerosos viajes de cubanos y norteamericanos a Cuba, por mar y
aire, son masivos ahora, al punto que la demanda supera a la oferta y
las reservaciones se agotan. ¿Quién puede negar que esto beneficia al
cubano de a pie? Los servicios al turismo son extensivos. Muchos cubanos
rentan espacios económicos al mejor estilo bed and breakfast
norteamericano. Otros ofrecen métodos de transporte mediante automóviles
reconstruidos durante 50 años por los geniales mecánicos de la isla.
Algunos deleitan a los más exigentes comensales en los diversos
restaurantes caseros conocidos como paladares. Una multitud vende
artesanía y productos variados a los turistas en las playas y parques.
Algunos políticos locales se han dado a la tarea de promocionar un
endurecimiento o finiquito de las relaciones diplomáticas. Si fuera así,
ya vimos que los más perjudicados serían los cubanos "cuentapropistas"
que ganan su sustento día a día. Nos preguntamos: si los cubanos han
logrado establecer negocios propios con una total falta de suministros,
¿qué pasaría si el dólar llegara a circular profusamente en Cuba? El
auge económico aceleraría el derrumbe de la dictadura.
Siempre que hay perjudicados es porque existen beneficiados. ¿Quiénes se
benefician, o sea, quiénes son los interesados en romper relaciones?
Cuba actualmente es un centro turístico multitudinario. Sus playas y
paisajes naturales están clasificados entre los mejores del mundo. La
simpatía y la amabilidad innata del cubano es un imán para el turista.
La hermosura y candidez de la mujer cubana es reconocida mundialmente.
Todo esto hace de Cuba un lugar ideal para establecer un polo de
desarrollo turístico mundial. Ello requiere de inversiones múltiples,
capaces de reconstruir la isla por completo. Un capital de unos $100.000
millones pudiera levantar hoteles y remozar ciudades enteras. Esto
significa empleos y negocios.
Por supuesto, existen sectores interesados en que el turismo no se
escape a Cuba. A ellos no les importa las necesidades del pueblo cubano.
Se dice que cuando el cerebro deja de funcionar, el cuerpo cae solo.
Donald Trump no debe abandonar a los cubanos en este momento. Por el
contrario, como brillante negociante debería pensar en la forma de
llegar a un acuerdo para invertir masivamente en Cuba. El futuro es
promisorio.
Economista y periodista.
Siga a Benjamín F. DeYurre en Twitter: @DeYURRE
Source: Presidente electo, no abandone a los cubanos ahora | El Nuevo
Herald -
http://www.elnuevoherald.com/opinion-es/opin-col-blogs/opinion-sobre-cuba/article117507463.html
El principio del fin de la revolución cubana
El principio del fin de la revolución cubana
GUILLERMO I. MARTÍNEZ
Pocas veces desde que Fidel Castro asumió el poder las estrellas se han
alineado con tanta precisión para uno poder pensar que el fin de la
Revolución comunista de Cuba puede estar en un futuro no muy lejano.
Es cierto que los milicianos de Castro pudieron derrotar a los miembros
de la
Brigada 2506 en abril de 1961. Y eso fue porque el gobierno americano no
cumplió su promesa de apoyar a los invasores.
Pasaron tres décadas y cayeron la Unión Soviética y sus países
satélites. Cuba se vio en aprietos. Tuvieron que vivir un periodo
especial. Pero los Castros tuvieron suerte y Hugo Chávez ordenó que se
le vendiera a Cuba petróleo venezolano a precios especiales. Precios que
permitieron a Cuba suplir sus necesidades y vender el resto para obtener
las divisas necesarias.
Varias veces pensamos que el final de la Revolución Cubana estaba al
borde del abismo. Pero todos nos equivocamos. Siempre nos falló algo.
Creo que esta vez las cosas son diferentes.
La muerte de Fidel a los 90 años es un golpe muy duro para Cuba. Fidel
era el caudillo y el líder de la Revolución. No importa que hace más de
ocho años pasara la presidencia a Raúl, su hermano menor. Raúl no tiene
el temperamento ni el carisma de su hermano.
Hay que dejar a los historiadores que estudien precisamente cuando fue
que Fidel –aun enfermo– dejara de aconsejar o hasta vetar ideas de Raúl.
Se sabe que en diciembre del 2014 Raúl acordara la proposición del
presidente de Estados Unidos Barack Obama para reanudar las relaciones
diplomáticas con Cuba. En ese entonces se dijo que Fidel no estaba de
acuerdo.
Pero Raúl no pudo de decir que no. Obama daba, daba y volvía a dar
prebendas a Cuba. Y Raúl a cambio siempre repetía que nada haría cambiar
la revolución. Cuba era y sería siempre socialista. A Obama no le
importaba y seguía dándole prebendas a Cuba.
Obama le daba todo lo que no prohibía explícitamente el embargo aprobado
por el Congreso de Estados Unidos. Obama daba regalos a Raúl por medio
de acciones ejecutivas, directrices que no llegaban nunca a violar el
embargo, aunque muchas de ellas le picaron bien cerca.
Pero ahora las cosas y la política han cambiado y Cuba está nuevamente
al borde del abismo. Pocos días antes de que falleciera Fidel Castro, el
pueblo americano eligió presidente a Donald Trump, un magnate y
candidato del Partido Republicano, que dijo que eliminaría todas las
dádivas a Cuba. Lo dijo en Miami, y en frente de la Brigada 2506 que
todo lo que Obama había dado por órdenes ejecutivas a Cuba, él las
eliminaría de la misma forma.
Ahora sin Fidel, Raúl va a tener que hilar muy fino. O empieza a darle
cosas a los Estados Unidos o va a tener problemas económicos y políticos
superiores a muchos de los que tuvo que sobrellevar con la caída de la
Unión Soviética. El precio del petróleo se ha desplomado y Venezuela ya
no puede ayudar tanto.
Nicolás Maduro tiene primero que preocuparse por darle de comer y
proporcionarle cuidado médico y medicinas al pueblo venezolano. Va a
poder darle muy poco a Cuba.
La muerte de Fidel no es el fin de la revolución; pero sí es el
principio del fin de la misma. Cuba será libre y muy pronto. Eso es
porque Fidel acaba de morir días después que Trump fuese electo
presidente de los Estados Unidos.
Periodista cubanoamericano, residente en el sur de la Florida.
Guimar123@gmail.com
Source: El principio del fin de la revolución cubana | El Nuevo Herald -
http://www.elnuevoherald.com/opinion-es/opin-col-blogs/opinion-sobre-cuba/article117507103.html
GUILLERMO I. MARTÍNEZ
Pocas veces desde que Fidel Castro asumió el poder las estrellas se han
alineado con tanta precisión para uno poder pensar que el fin de la
Revolución comunista de Cuba puede estar en un futuro no muy lejano.
Es cierto que los milicianos de Castro pudieron derrotar a los miembros
de la
Brigada 2506 en abril de 1961. Y eso fue porque el gobierno americano no
cumplió su promesa de apoyar a los invasores.
Pasaron tres décadas y cayeron la Unión Soviética y sus países
satélites. Cuba se vio en aprietos. Tuvieron que vivir un periodo
especial. Pero los Castros tuvieron suerte y Hugo Chávez ordenó que se
le vendiera a Cuba petróleo venezolano a precios especiales. Precios que
permitieron a Cuba suplir sus necesidades y vender el resto para obtener
las divisas necesarias.
Varias veces pensamos que el final de la Revolución Cubana estaba al
borde del abismo. Pero todos nos equivocamos. Siempre nos falló algo.
Creo que esta vez las cosas son diferentes.
La muerte de Fidel a los 90 años es un golpe muy duro para Cuba. Fidel
era el caudillo y el líder de la Revolución. No importa que hace más de
ocho años pasara la presidencia a Raúl, su hermano menor. Raúl no tiene
el temperamento ni el carisma de su hermano.
Hay que dejar a los historiadores que estudien precisamente cuando fue
que Fidel –aun enfermo– dejara de aconsejar o hasta vetar ideas de Raúl.
Se sabe que en diciembre del 2014 Raúl acordara la proposición del
presidente de Estados Unidos Barack Obama para reanudar las relaciones
diplomáticas con Cuba. En ese entonces se dijo que Fidel no estaba de
acuerdo.
Pero Raúl no pudo de decir que no. Obama daba, daba y volvía a dar
prebendas a Cuba. Y Raúl a cambio siempre repetía que nada haría cambiar
la revolución. Cuba era y sería siempre socialista. A Obama no le
importaba y seguía dándole prebendas a Cuba.
Obama le daba todo lo que no prohibía explícitamente el embargo aprobado
por el Congreso de Estados Unidos. Obama daba regalos a Raúl por medio
de acciones ejecutivas, directrices que no llegaban nunca a violar el
embargo, aunque muchas de ellas le picaron bien cerca.
Pero ahora las cosas y la política han cambiado y Cuba está nuevamente
al borde del abismo. Pocos días antes de que falleciera Fidel Castro, el
pueblo americano eligió presidente a Donald Trump, un magnate y
candidato del Partido Republicano, que dijo que eliminaría todas las
dádivas a Cuba. Lo dijo en Miami, y en frente de la Brigada 2506 que
todo lo que Obama había dado por órdenes ejecutivas a Cuba, él las
eliminaría de la misma forma.
Ahora sin Fidel, Raúl va a tener que hilar muy fino. O empieza a darle
cosas a los Estados Unidos o va a tener problemas económicos y políticos
superiores a muchos de los que tuvo que sobrellevar con la caída de la
Unión Soviética. El precio del petróleo se ha desplomado y Venezuela ya
no puede ayudar tanto.
Nicolás Maduro tiene primero que preocuparse por darle de comer y
proporcionarle cuidado médico y medicinas al pueblo venezolano. Va a
poder darle muy poco a Cuba.
La muerte de Fidel no es el fin de la revolución; pero sí es el
principio del fin de la misma. Cuba será libre y muy pronto. Eso es
porque Fidel acaba de morir días después que Trump fuese electo
presidente de los Estados Unidos.
Periodista cubanoamericano, residente en el sur de la Florida.
Guimar123@gmail.com
Source: El principio del fin de la revolución cubana | El Nuevo Herald -
http://www.elnuevoherald.com/opinion-es/opin-col-blogs/opinion-sobre-cuba/article117507103.html