2009-05-12.
Elías Amor, Economista ULC
(www.miscelaneasdecuba.net).- Diversos medios de comunicación en la
Isla, el semanario Trabajadores de la Central de Trabajadores de Cuba,
CTC, y la revista Bohemia, se han hecho eco de que la reforma salarial
impulsada por Raúl Castro, sigue paralizada nueve meses después de su
fecha oficial de entrada en vigor.
No me extraña. Ya tuve ocasión de exponer las dificultades técnicas que
puede tener un régimen comunista, sin propiedad privada ni mercado, ni
tampoco estímulos a la iniciativa empresarial, ni voluntad política,
para vincular el salario de los trabajadores a la eficiencia y calidad
de su tarea.
En una economía de mercado, la producción se rige por los costes, pero
también por las condiciones del mercado. Si no se presta atención a los
dos grandes ejes que fijan el comportamiento de los agentes económicos,
difícilmente se puede alcanzar un equilibrio.
Los asesores económicos de Raúl Castro han impulsado una iniciativa para
establecer las retribuciones del trabajo en función de la
"productividad", entendiendo ésta como más y mejor trabajo. Un "pago por
resultado" que se asemeja en buena medida al concepto de "destajo" que
ha sido prácticamente abolido en la mayoría de países de economía de
mercado.
La idea de la reforma es poner fin al absurdo mecanismo de igualación de
salarios y retribuciones vigente en el país desde los inicios de la
revolución y que está en el origen de la mayor parte de los problemas
económicos.
La idea es acertada, como ya tuve ocasión de exponer, pero el modelo que
se ha utilizado no lo es. Y el perfeccionamiento empresarial como
técnica dentro del modelo comunista puede servir para un determinado
número de unidades productivas, pero no para la economía en su conjunto,
ya que un estímulo salarial a la producción si no va acompañado de
reformas integrales en el comportamiento de los mercados y del
intercambio, puede producir justamente los efectos contrarios a los
perseguidos.
También es un motivo de satisfacción observar cómo han recogido los
medios en la Isla este parón en la iniciativa económica salarial del
régimen.
Así, por ejemplo, Trabajadores, medio informativo de la CTC, informó
sobre el malestar de los trabajadores de la Unidad Básica 904 de
Guáimaro, en la provincia oriental de Camagüey por la falta de respuesta
relativa a la entrada en funcionamiento del nuevo modelo de retribuciones.
En lo que parece una glasnost "tropical", los obreros remitieron al
semanario "una queja por la no aplicación del pago por resultados en esa
entidad', señala el rotativo de la central sindical única de la isla.
Por otra parte, la revista Bohemia afirma en su último número que "a
pesar del tiempo extra conferido para moldear mejor su entrada, el
cambio está tropezando con resistencias, obstáculos e incomprensiones
que revelan, cuando menos, insuficiente preparación, debate y estudio'.
Y continúa señalando, "hoy, la aplicación de fórmulas salariales más
acordes con los resultados del trabajo aún está en pañales', y señala
entre las razones la "debilidad técnica' de muchas empresas para hacer
un estudio serio de organización.
También apunta a los "desequilibrios de la escala salarial vigente en el
país, las contradicciones con legislaciones anteriores y la confusión en
torno a los objetivos reales' que persigue la nueva norma.
Bohemia subraya además que "varias empresas comenzaron el actual año
fuera de la ley a la hora de pagar a sus trabajadores', y añade que en
los dos primeros meses del 2009 "algunas entidades usaron la anterior
legislación salarial, que ya estaba revocada'.
Para arrojar más confusión al asunto de la reforma salarial, la
subdirectora provincial de Trabajo de la provincia de Sancti Spíritus
(centro del país), Mileydis Peláez García, indicó a la revista que hubo
organismos nacionales que "aplicaron en enero los sistemas de pago del
año 2008, teniendo aprobados los del 2009'.
Peláez indicó que la aplicación del nuevo sistema "no ha contado con el
nivel de preparación que reclamaba por su alta complejidad y la extrema
sensibilidad económica y social del asunto'.
Por lo que se desprende de estas informaciones, la burocracia comunista
no tiene ni idea, ni tampoco voluntad política, de transformar el modelo
de ineficiencia e incapacidad que ha venido dirigiendo el país en el
último medio siglo.
Este es el principal problema de Cuba para afrontar con éxito su futuro.
Si no consigue desprenderse de las ataduras que bloquean internamente su
capacidad productiva, nada podrá servir para mejorar las condiciones de
vida y bienestar de los cubanos.
Las reivindicaciones salariales, la necesidad de reformar en profundidad
el sistema productivo y distributivo no pasa por la demagogia, ni por
las actuaciones parciales del perfeccionamiento empresarial, sino por la
perspectiva de un modelo económico de análisis general en el que los
mercados entren en funcionamiento de forma automática, transparente y
con abundante información.
Mercado, propiedad privada y empresa competitiva son los instrumentos
que necesita la economía cubana para superar la etapa más penosa de su
historia. Cuanto antes hay que actuar, pero en la dirección correcta.
LA REFORMA SALARIAL EN CUBA PARALIZADA NUEVE MESES - Misceláneas de Cuba
(12 May 2009)
http://www.miscelaneasdecuba.net/web/article.asp?artID=20694
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