Viernes, 20 Agosto 2010
La Habana.- Cuba ha entregado 57 por ciento de sus tierras ociosas en
usufructo, pero al menos 46 por ciento de la superficie concesionada
sigue sin producir y un funcionario reconoció que el gobierno carecía de
preparación para un proyecto de esa magnitud.
"El sistema de control que tenemos no estaba preparado para enfrentarse
a ese volumen tan grande de nuevas entregas", dijo Pedro Olivera,
director del Centro Nacional de Control de la Tierra, al diario Juventud
Rebelde.
De acuerdo con Olivera, desde 2008 cuando el presidente Raúl Castro
autorizó por ley este proceso, hasta la fecha se concedieron un millón
siete mil 112 hectáreas de tierras ociosas a unos 100 mil agricultores.
La cifra representa el 57 por ciento del fondo inicial de terrenos
cultivables existentes y hasta entonces inutilizados, y más de 50 por
ciento de los beneficiados son jóvenes con menos de 35 años de edad.
Olivera dijo que de los terrenos en barbecho otorgados, más de la mitad
se han destinado a la ganadería, 26.8 por ciento son para el cultivo de
tubérculos y hortalizas, y 7.7 por ciento para el arroz.
Explicó que los usufructuarios de casi la mitad de las tierras enfrentan
problemas para ponerlas en producción, como carencia de recursos, la
sequía y la infestación con marabú, un arbusto espinoso difícil de eliminar.
El gobierno de Raúl Castro, que inició el proceso con la mitad de las
áreas cultivables del país sin producir, aplicó otras medidas como
mejores precios a labriegos para elevar la producción de alimentos, lo
que calificó de asunto de "seguridad nacional".
Cuba importa 80 por ciento de los víveres que consumen sus 11.2 millones
de habitantes, y en abril pasado el primer vicepresidente, José Ramón
Machado, afirmó que sigue gastando más de mil 500 millones de dólares
anuales en la compra de alimentos.
Olivera explicó al diario que se han recibido 133 mil 900 solicitudes de
tierras, de las cuales se ha aprobado el 83 por ciento, en un proceso
caracterizado por la falta de agilidad en la conclusión de los
expedientes por la impericia del personal.
Para buscar solución al problema, dijo, se acordó reorganizar y
fortalecer las comisiones agrarias municipales, integradas por los
ministerios de la Agricultura y de Justicia, el Instituto de
Planificación Física y la Asociación Nacional de Agricultores Pequeños.
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