Última actualización Wednesday, 14 December 2011 0
Por EMILIO MORALES*
- El anuncio de la firma CEIBA Investments Ltd de hacer públicos sus
activos en la bolsa de Toronto (TSX) pudiera dar comienzo a una escalada
de otras compañías por crear fondos para las inversiones en varios
sectores de la economía cubana.
El fondo Ceiba Investments tiene el 49 % de las acciones de Monte
Barreto SA, la firma propietaria del Centro de Negocios de Miramar.
La estratégica movida hacia la mayor bolsa canadiense en la primera
mitad del 2012 permitirá a CEIBA tener acceso a un mercado internacional
con una alta liquidez, según el reporte anual de la firma. La operación
tiene como propósito financiar nuevos proyectos de inversión y al mismo
tiempo aliviar la dependencia de flujos de efectivo de las operaciones
de la empresa en la isla.
Se espera que el valor de las acciones que se pondrán en venta en la
bolsa comenzarán con un valor de $1.20 dólares estadounidenses. Al
cierre de noviembre sus acciones privadas del fondo alcanzaban los
$11.13 dólares.
CEIBA Investments Ltd, constituida única y exclusivamente para hacer
inversiones en Cuba, es una de las empresas extranjeras radicadas en la
isla con mayores activos de inversiones en bienes raíces y el turismo,
además de ser unos de los principales soportes del financiamiento
estructurado que tiene la industria turística cubana.
Se calcula que sus fondos relacionados sólo con inversiones en hoteles
en Cuba ascienden a $170 millones de dólares. Entre ellos se incluyen el
holding español Homasi, S.A.; y la Corporación Interinsular Hispana
S.A., que administra tres hoteles Sol Melía en Varadero.
Un proyecto para construir 400 habitaciones en la playa María Aguilar,
cerca de Trinidad, debe comenzar en el 2013, gracias a la inversión de
CEIBA. No debe olvidarse tampoco que la firma tiene el 49 por ciento de
las acciones de la inmobiliaria Monte Barreto S.A., que es propietaria
del Centro de Negocios de Miramar en La Habana.
Ganancias de $13 millones
El pasado marzo, CEIBA declaró ganancias netas de $13 millones de
dólares, un salto espectacular comparado con los $528,000 dólares del 2010.
El salto que pretende dar la firma, es una muestra de madurez y la
confianza de sus directivos en 16 años de operación en la isla,
sorteando los embates de lo que significa invertir en la economía
cubana. Para CEIBA se trata de un paso hacia una etapa superior que se
inscribe en el contexto de las recientes medidas aperturistas del
gobierno de Raúl Castro, y del movimiento que las bolsas internacionales
comienzan a reflejar a partir de una reevaluación de las posibilidades
inversionistas en la isla.
El anuncio realizado meses atrás sobre la ejecución de unos 16 proyectos
de inversiones inmobiliarias con campos de golf y marinas incluidas a lo
largo del país, son algunos de los planes que han comenzado a mover el
interés de los inversionistas extranjeros para crear y buscar fondos con
el propósito de invertir en la isla.
Sin embargo, CEIBA no es la primera compañía de inversiones en la isla
que cotiza en la bolsa de Toronto. Sherrit International, el mayor
inversionista en la industria del níquel en Cuba, fue la que rompió el
hielo en la década de los 90. Sherrit tiene el 50 por ciento de la
mayor empresa procesadora de níquel más cobalto y otros metales en la isla.
En la década del 2000, Sherrit International creó Sherrit Power
Corporation con el objetivo de financiar y operar las plantas
procesadoras del gas acompañante del crudo de los yacimientos de
petróleo de Varadero y Boca de Jaruco, así como las plantas de
generación eléctrica alimentadas con el gas procesado.
Sherrit Corporation la empresa madre de ambas compañías cotiza en el
mercado de valores de Toronto y en la Bolsa de Montreal bajo el símbolo
"S", y los títulos de deudas de la corporación se comercializan en ambas
plazas bajo el símbolo "SDV".
De economía cerrada a mercado emergente
Los cambios económicos que tienen lugar en Cuba comienzan a convertir la
cerrada economía de la isla en un mercado emergente muy atractivo.
Después de medio siglo de fracaso de una economía totalmente
centralizada, sin acceso a líneas de créditos internacionales y con la
mayoría de los sectores necesitados de grandes inversiones, el gobierno
ha comenzado a implementar los cambios estructurales aprobados en el VI
Congreso del Partido Comunista, finalizado en abril. El nuevo paradigma
generado por las últimas acciones gubernamentales para transformar el
modelo económico impulsa un naciente mercado que, poco a poco, se
transformará en una alfombra con gran potencial de nuevas oportunidades,
tanto para los inversores nacionales como para los extranjeros.
En realidad, las oportunidades se comienzan a perfilar en la micro como
en la macroeconomía del país. En esta última, las opciones no sólo se
perfilan en el turismo y el níquel, como hace 15 años cuando el gobierno
ensayó su primera y tímida apertura a la inversión extranjera. Hoy,
otras áreas como el petróleo, la agricultura, la industria azucarera y
el sector inmobiliario están en el blanco posible de los inversionistas.
El giro en la esfera inversionista es de 180 grados, quizás no a la
velocidad y al ritmo que las necesidades del país y la sociedad
requieren ni tampoco con la profundidad que urge. Pero la ventana que
estuvo herméticamente cerrada por medio siglo comienza a abrirse, sin
que nadie pueda calcular todavía el impacto que las acciones de hoy van
a tener en los próximos años.
Las recientes medidas en relación con los trabajos por cuenta propia, la
venta y compra de automóviles privados, la apertura al sector
inmobiliario residencial y la liberalización de la agricultura, con el
otorgamiento de créditos para los inversores privados nacionales, son
elementos que desde el punto de vista económico ofrecen una mayor
confianza a los potenciales inversionistas extranjeros que se interesan
en la isla.
Para los empresarios y hombres de negocios extranjeros que no son
norteamericanos las oportunidades se multiplican. De cierta manera, el
embargo da ventaja a los empresarios europeos y canadienses que son los
que más presencia tienen actualmente en la isla.
La vieja restricción legal de 1962 pudiera tener un efecto acelerador en
el volumen y el alcance de las inversiones a realizar en Cuba: llegar
primero es la meta, y un mercado prácticamente virgen como el cubano,
comienza a ser un manjar demasiado apetitoso, a pesar de los obstáculos
inamovibles del socialismo criollo.
La bolsa y la vida futura en Cuba
De ahí que abrir las acciones de una compañía en el mercado bursátil
-como lo acaba de hacer CEIBA Investments en la bolsa de Toronto- es una
jugada estratégica que pudiera ser imitada por otras empresas
interesadas en el mercado de la isla.
Cualquier medida del gobierno cubano en función de profundizar la
reestructuración económica socialista va a provocar que el valor de las
acciones de CEIBA aumenten; cualquier otro factor que pondere o
incremente el clima de confianza para las inversiones en el mercado
cubano también derivará en una subida de estos valores.
Meses atrás a raíz del cumpleaños 85 de Fidel Castro, los rumores sobre
una recaída de su estado de salud dispararon las acciones de Herzfeld
Caribbean Basin Fund, una sociedad de fondos mutuos de capital limitado
que quiere sacar provecho en una eventual apertura del comercio de
Estados Unidos con Cuba. El valor de las acciones del fondo de $25
millones de dólares, dieron un salto 3.7 por ciento para colocar la
acción a $6.65 dólares.
Ese fue el mayor avance de Herzfeld Caribbean Basin Fund desde que el 11
de agosto otra compañía nombrada Fuego Enterprises -que se propone
brindar servicios de comunicaciones en Cuba- encabezara las ganancias de
sus acciones, aumentando un 25 por ciento ($ 0.3 dólares) en las
operaciones fuera de la Bolsa.
Pero cabría unas cuantas preguntas fundamentales sobre este tema: ¿Puede
un ciudadano norteamericano comprar acciones a CEIBA en la bolsa de
Toronto? Cómo reaccionarán los cubanoamericanos y los cubanos
residentes en otros países ante la posibilidad de invertir en la isla,
no ya a través de sus familiares con pequeños negocios, sino en grandes
empresas a través del mercado bursátil? ¿Sería esta una nueva fuente de
financiamiento que el gobierno de Cuba está potenciando para suplir la
falta de créditos internacionales? ¿Abriría el gobierno de Cuba en los
mercados bursátiles las inversiones en la industria azucarera y el
petrolera?
Mientras ocupamos tiempo en responderlas y debatirlas, CEIBA ha dado un
paso de incalculable alcance para el futuro cubano.
* Economista cubano. Ex jefe de mercadotectnia en la corporación CIMEX y
autor de Cuba: ¿tránsito silencioso al capitalismo? Es presidente de
Havana Consulting Group, en Miami.
http://cafefuerte.com/2011/12/13/fondo-para-inversiones-en-cuba-se-hara-publico-en-el-2012/
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