Posted on Thu, Mar. 30, 2006
Bancos suizos no convencen sobre lavado en Cuba
GERARDO REYES
El Nuevo Herald
Algunos representantes a la Cámara de EEUU quedaron ayer descontentos
por lo que consideraron una actitud evasiva de un alto directivo de la
Unión de Bancos Suizos (UBS) quien se negó a ofrecer detalles sobre una
operación que le permitió al gobierno de Cuba ''lavar'' $3,900 millones.
Bajo una fuerte artillería de preguntas de los miembros de la Comisión
de Relaciones Internacionales de la Cámara, Michael Herde, gerente
general y jefe de la unidad de cumplimiento de la ley de UBS, se limitó
a admitir que fue un error, pero evadió explicaciones sobre cómo se
llevó a cabo la operación.
''Quedó claro para mí y mis colegas que todo lo que le importa a UBS es
hacer dinero lo que más pueda y que venderían su alma por hacerlo'',
dijo la congresista Ileana Ros-Lehtinen. Ros-Lehtinen agregó que UBS ha
ignorado en los últimos años los requerimientos congresionales con
excusas y 'usando eufemismos como `fallas' y 'deficiencias' para
justificar sus acciones.
''Una vez más hoy ellos se han negado a admitir que sus transacciones
con Castro... fueron ilegales'', agregó.
Entre los testigos que intervinieron durante la audiencia se encontraban
el ex fiscal de Manhattan, John Moscow, quien dirigió la investigación
que resultó en la condena de Dennis Kozlowski, presidente de la
corporación TYCO y Arthur Middlemiss, fiscal y jefe de la división de
investigaciones de la División Central de las Oficinas del Fiscal
Federal para el Condado de Nueva York.
''Yo diría que algunos de los miembros de la comisión no quedaron muy
complacidos con las respuestas dadas por el señor Herde'', dijo un
asistente de otro congresista que participó en el debate y que pidió no
se identificado. ``Fue muy evasivo''
En mayo de 2004, UBS admitió una multa de $100 millones impuesta por el
gobierno de Estados Unidos por permitir que países como Cuba, Irak,
Libia y Yugoslavia, utilizaran un programa internacional de la Reserva
Federal de Estados para la sustitución de billetes de dólares en mal estado.
Valiéndose del programa y con la ayuda de empleados de UBS, el gobierno
de la isla logró introducir al sistema bancario internacional un total
de $3,900 millones, una operación que la congresista Ros-Lehtinen ha
caracterizado como ''lavado'' de activos.
Además de permitir la operación, UBS ofreció un privilegio adicional a
Cuba, esto es, que en lugar de billetes nuevos, el gobierno de la isla
recibiera transferencias cablegráficas en bancos de varias partes del mundo.
Al contar con la aprobación de la máxima autoridad monetaria de Estados
Unidos, las divisas de Cuba quedaron así libres de las leyes del embargo.
''UBS actuó en forma inaceptable'', afirmó Herde ``Algunos de nuestros
empleados se involucraron en transacciones de dinero que estaban sujetas
a las sanciones de Estados Unidos. Nosotros lamentamos esas fallas''.
http://www.miami.com/mld/elnuevo/news/world/cuba/14217725.htm
No hay comentarios:
Publicar un comentario