El gobierno prevé una producción similar a la de la zafra anterior
Tras el paso de Ike y Gustav, las autoridades dijeron que casi la
totalidad de las hectáreas de caña sufrieron algún daño.
Agencias | 13/10/2008
El ministro del Azúcar, Ulises Rosales del Toro, afirmó este domingo que
la cosecha azucarera 2008-2009 comenzará en diciembre próximo y que el
gobierno prevé una producción similar a la del año anterior, pese a los
daños ocasionados al sector por los huracanes Ike y Gustav, reportó EFE.
Rosales del Toro dijo que la Isla cuenta con la cantidad de caña
"suficiente" para la próxima zafra, según declaraciones citadas por la
agencia estatal Prensa Latina.
El ministro aseguró que la recuperación del sector azucarero "garantiza
lograr en la próxima cosecha, por lo menos, una producción similar a la
anterior" y que el país dispone de todos los recursos materiales y
humanos para su arrancada.
La zafra 2007-2008 fue un 28% más elevada que la del periodo anterior,
lo que, según estimaciones del sector, supone unos 1,5 millones de
toneladas de azúcar.
De acuerdo con Rosales del Toro, solamente los centrales Antonio
Guiteras de la provincia de Las Tunas, el mayor productor de azúcar
crudo (sin refinar) del país, y el 30 de Noviembre, de Pinar del Río,
fueron muy perjudicados por los huracanes y comenzarán a moler con retraso.
El sector azucarero fue uno de los más afectados por el paso devastador
de los huracanes Ike y Gustav, entre el 30 de agosto y el 9 de septiembre.
El gobierno calcula que casi la totalidad de las alrededor de 700.000
hectáreas que se dedican a la siembra de caña sufrieron algún tipo de
afectación.
Las autoridades informaron que los huracanes dejaron 156.600 hectáreas
de caña encamadas (tumbadas), 518.879 inundadas y 3.895 hectáreas nuevas
perdidas, además de mojar en almacenes 40.000 toneladas de azúcar que
deben ser reprocesadas para salvarlas.
La mayor parte de la siembra de la caña de azúcar se realiza en la Isla
entre los meses de mayo y octubre.
El gobierno reestructuró el sector azucarero en dos fases, en 2002 y en
2004, lo que supuso la reducción de centrales de 156 a 61, la
eliminación de más de 100.000 puestos de trabajo y la disminución de la
superficie de cultivo de dos millones de hectáreas a unas 750.000, de
acuerdo con datos oficiales.
No hay comentarios:
Publicar un comentario