Seguridad vulnerable
noviembre 23, 2014 1:38 pm·
Cuba actualidad, Cidra, Matanzas, (PD) Por mucho que el régimen de los
hermanos Castro trabaja para cuidar los bienes del Estado son muchos los
recursos que van a parar a manos de particulares de forma ilegal.
El indetenible saqueo de las empresas que están bajo el control del
Estado demuestra lo vulnerable que son sus mecanismos de seguridad.
Unas de las principales causas del desvío de recursos estatales–como se
le llama ahora al robo- lo constituye la falta de sentido de pertenencia
de los empleados, y a las deplorables condiciones materiales en que viven.
Funcionarios y trabajadores con bajos salarios buscan obtener de las
empresas lo que el Estado no les asegura.
He ahí la verdadera razón por la que la economía cubana se desarrolla
(¿?) en medio de un reñido combate entre el Estado explotador y el
pueblo infortunado y rebelde. El primero defiende los intereses de una
mezquina oligarquía comunista y el segundo, batalla para, al menos,
sobrevivir.
Se libra en Cuba una verdadera lucha de contrarios, como diría el
filósofo alemán Carlos Marx.
Poco hacen los estatales cuerpos de seguridad y protección para
salvaguardar el patrimonio público. No son efectivos como los agentes de
la policía política que persiguen a los disidentes. Muchos de sus
integrantes, contagiados con la enfermedad de la corrupción, participan
en el saqueo de las empresas del Estado. Ellos también son víctimas de
la escasez y la falta de valores morales.
No es casual que con frecuencia observemos en las calles y barrios a no
pocos individuos que venden medicamentos, piezas de autos, combustible,
alimentos y otros artículos procedentes de las entidades estatales.
Dichas mercancías son sustraídas ante los ojos de los corrompidos custodios.
Cuando se les pregunta a muchos exprofesores –sobre todo jóvenes que
trabajaban en las instituciones del Ministerio de Educación- por qué
abandonaron las aulas, éstos, además de referirse a los bajos salarios,
argumentan que allí hay poco que robar. Por eso algunos maestros y
funcionarios del sector venden los exámenes a precios exorbitantes, como
lo reconoció recientemente el propio gobierno.
Aunque lo disimula, el gobierno sabe que existe un único remedio para
esta enfermedad crónica: el desmantelamiento del ineficiente sistema
político-económico imperante en el país, que asfixia a las fuerzas
productivas y coarta los derechos y las libertades básicas de la ciudadanía.
Lamentablemente, la realidad nos indica que las autoridades, aunque
afirman que promueven el crecimiento y fortalecimiento de los negocios
privados, hostigan con elevados impuestos, multas arbitrarias, nuevas
prohibiciones y negación de insumos al sector cuentapropista.
Eso ocurre ahora mismo, en la provincia de Matanzas, con los conductores
de taxis, a quienes les redujeron un pasajero por viaje.
Sólo si se apela al referido remedio podrán tener éxito los nuevos
sistemas de seguridad y protección que se instauren en una Cuba próspera
y democrática, donde para ganarse el sustento diario las personas no
tengan que delinquir, y en la que se garantice, con seriedad, el
reguardo de los bienes del pueblo.
Para Cuba actualidad: sanchesmadan61@yahoo.com
Source: Seguridad vulnerable | Primavera Digital -
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