¿Qué posibilidades tienen los españoles expropiados por el régimen de
Castro?
AGENCIAS | Madrid | 4 de Diciembre de 2016 - 16:41 CET.
Cuando el padre de Arturo González huyó de Cuba en 1964 solo pudo
llevarse en el avión a Madrid una maleta con su ropa y sus gafas. Unos
milicianos lo registraron en el aeropuerto y le confiscaron su reloj y
un anillo, además de otros objetos de valor.
"Era la humillación total, lo que era de valor se lo quedaba la
Revolución", cuenta González, reporta la AFP.
Por entonces, el Gobierno de Fidel Castro ya había confiscado todas las
propiedades de la familia, entre ellas una granja en Las Tunas y varios
depósitos en La Habana.
El padre de Arturo González falleció en 1981. Ahora, este profesor de
Economía de 58 años, que abandonó Cuba cuando era un bebé, intenta junto
con su hermana recuperar los bienes confiscados, o al menos recibir una
indemnización.
La suya es una de las 260 familias españolas representadas por el fondo
de inversión 1898 Compañía de Recuperaciones Patrimoniales. La sociedad,
fundada en 2001, está tratando de persuadir a otras 400 familias para
que se unan al esfuerzo.
Cuba se independizó de España en 1898, pero cuando triunfó la Revolución
de 1959, los españoles seguían formando el grueso de los terratenientes
más ricos y la mayoría de los pequeños comerciantes.
"Eran una comunidad próspera. Monopolizaban el sector minorista",
explica Consuelo Naranjo Orovio, historiadora del Centro de Ciencias
Humanas y Sociales (CCHS).
Los denunciantes no tienen ninguna esperanza mientras Cuba siga
gobernada por el régimen de Raúl Castro. Pero confían en que ese
Gobierno será reemplazado algún día por otro democrático que quiera
resolver el problema de las expropiaciones, para así atraer a inversores
extranjeros.
Raúl Castro ha anunciado que se retirará en 2018, pero el régimen hace
ajustes para garantizar su sobrevivencia.
"Cuándo acaba, uno no sabe, pero ha empezado el proceso" de cambio de
régimen, cree Jordi Cabarrocas, fundador de 1898 Compañía de
Recuperaciones Patrimoniales.
"El sistema nuevo que viene después de una dictadura necesita crear un
escenario nuevo, en el cual pueda aterrizar la inversión" exterior, razona.
En ese sentido, "devolver bienes confiscados tranquilizará a cualquier
persona que invierta en Cuba de que su propiedad será respetada", asegura.
El fondo estudió 40 casos similares en otros países, en particular en
Europa del Este, en el último siglo, y el 90% de las veces se pudo
recuperar bienes confiscados, afirma Cabarrocas.
Las familias que contratan los servicios de la sociedad no tienen que
pagar ninguna comisión en el momento de firmar. Pero la compañía se
queda con el 30% del valor recobrado por cuenta de sus clientes.
De momento, les está ayudando a demostrar que poseían propiedades en
Cuba, para que estén listos cuando se presente la ocasión de reclamar.
Oficialmente no hay ninguna estimación del valor total de los bienes
confiscados a las familias españolas.
Cabarrocas estima en 2.500 millones de dólares actuales (2.340 millones
de euros) el valor de las propiedades de sus clientes.
Según los términos de un acuerdo cerrado en 1986 entre Madrid y La
Habana, el Gobierno cubano pagó 40 millones de dólares por algunos
bienes confiscados, un tercio en efectivo y el resto en especie,
mediante entregas de tabaco, por ejemplo.
Richard Feinberg, un experto en Cuba de Brookings Institution, en
Washington, dice que "un acuerdo así por lo general cierra el camino a
los demandantes".
"Haría falta una serie extraordinaria de acontecimientos para que los
españoles que reclaman bienes consigan más", dijo a la AFP.
Jordi Cabarrocas sostiene, por su parte, que el acuerdo bilateral no
pone fin al litigio.
El Tribunal Supremo español dictaminó además que, en virtud del derecho
internacional, incluso quienes fueron parcialmente compensados en 1986
no habían renunciado a una mayor indemnización más adelante, añade.
Muchos demandantes dicen que su principal motivación es que se haga
justicia a sus familias, y no tanto sacar un beneficio financiero, ya
que los activos confiscados están ahora en mal estado u ocupados por otros.
José Manuel Presol, de 63 años, que reclama el apartamento de La Habana
donde creció hasta que su familia fue expulsada cuando él tenía 15, dice
que no tiene interés alguno en expulsar a quienes vivan allí ahora.
"Les voy a decir: 'mira, nada más pido una cosa, lo tengo claro. Que de
vez en cuando me dejes venir a coger el fresco en la terraza para
acordarme de cuando era niño. Es lo único que pido. La casa es
vuestra'", dice con lágrimas en los ojos.
Source: ¿Qué posibilidades tienen los españoles expropiados por el
régimen de Castro? | Diario de Cuba -
http://www.diariodecuba.com/cuba/1480866062_27177.html
No hay comentarios:
Publicar un comentario