lunes, 21 de julio de 2014

Las quejas de los cubanos por restricciones aduaneras

Las quejas de los cubanos por restricciones aduaneras

Rompen la barrera del miedo y escriben al periódico estatal Granma para

señalar que las medidas son "incomprensibles.

domingo, julio 20, 2014 | CubaNet



Tanto la prensa escrita como los sitios digitales en Cuba han recibido

una avalancha de quejas de cubanos que no ven con agrado las nuevas

restricciones aduaneras a los bienes que llevan los viajeros a la isla,

como reporta la agencia de prensa AFP. Las medidas, que entrarán en

vigor el 1 de septiembre de 2014, restringen la cantidad de artículos

que un viajero puede ingresar al país, o a través de envíos postales.



En un repaso a las quejas, expresadas por lectores del periódico del

partido comunista se lee que para los cubanos las medidas son

"incomprensibles; alejadas de la realidad cubana; injustas, porque

abarcan a infractores y a quienes no lo son; demasiado administrativas,

por lo cual favorecerían al germen de la corrupción".



Un lector que se identificó como Manuel Frómeta Lores dijo que él piensa

"que en efecto, con estas restricciones vamos para atrás en lo que se

refiere a la apertura y a la actualización del modelo económico. Creo

que sería revolucionario si se aplicasen impuestos razonables (tampoco

excesivos) según el monto de artículos importados. La medida en cuestión

deja entrever más ánimo de impedir que de regular y ayudar".



Y agregó: "Las importaciones de artículos ayudan siempre a suplir

carencias nacionales, a atender a necesidades puntuales y preferencias

de ciertas poblaciones y personas -en lo que MINCEX ha demostrado total

ineptitud-, y, aunque solo un grano de arena, sería una forma de burlar

el bloqueo. De manera que la medida es otra forma de "autoembargo" que

tanto ha afectado a nuestro pueblo durante años".



Teru escribió en Granma: "No le den más vueltas. Todo el mundo sabe que

las altas instancias pueden derogar la ley si lo quisieran. Es infantil

poner a la Aduana de chivo expiatorio. Ellos solo ejecutan. Que no haya

importación independiente, que los salarios no alcancen, que los precios

estén por las nubes, no es culpa de la Aduana".



​​Otro lector que se identificó con sus iniciales, FG, manifestó que

"las medidas sí nos afectan también a los que viajamos y sólo llevamos

cosas para la familia. Yo por ejemplo llevo únicamente mis 30kg, y

algunas medicinas. Si quiero llevarle un televisor de 32″ a mi madre

anciana, ya no me cuesta 150 CUC, sino 250 CUC, la diferencia es de 100

CUC que es bastante dinero, no son moneditas. Ya en 150 CUC estaba

pagando el televisor casi al doble, ahora a 250 se me hace imposible

hacerlo pues los salarios en el extranjero no son altos y hay una crisis

económica global. En 150 CUC ya estaba muy bien pagado a la aduana, me

parece excesivo que lo hayan subido más".



Evaristo dijo que "todas esas medidas tienen como objetivo proteger al

monopolio de las TRD, que venden productos de bajísima calidad a precios

exorbitantes. Eso, que también se mencionó en el debate, ni siquiera se

menciona ahora. Eliminen la causa, para que vean que los viajeros solo

traerán dinero, como se hace en el resto del mundo. Los únicos que

viajan cargados como mulos, son los cubanos. Den licencia para importar

a otros, cobren los impuestos, y se acabó el problema. Otra cosa, que no

nos tomen por tontos, esas medidas se tomaron por imposición de los

mismos que mantienen el monopolio. La aduana por sí misma no tomaría

semejante medida. Así que, los abusos que continúen y las protestas les

entran por un oído y les sale por el otro. ¿Cuándo va a terminar esa

arrogancia?".



Una cubana apellidada Moncada dijo que ella ha "renunciado a volver

mientras sea ciudadana de segunda clase en el país en que nací, sin

dejar de amarlo, pero no puedo soportar la injusticia y el maltrato por

"mi gente" (deben pensar que tenemos estómago de hierro, pero no, sobre

todo los que nada traficamos ni trapicheamos, que somos la mayoría, sin

dudas)".



Manuel Barrueta, también lector de Granma, considera que "lo que ha

regulado la Aduana General de la República es un nuevo bandazo. Son

demasiados frecuentes las medidas. Evidentemente, en ningún otro país se

hacen tantas variaciones en contra de las importaciones. El propósito

evidente es que se compre y gaste en los mercados existentes en el país,

pero también es evidente que no se toma en cuenta la pésima calidad y

los altísimos precios (hasta cuadruplicados) de los productos en oferta.

El sentido principal del proceso revolucionario cubano es favorecer el

bienestar del pueblo. No creo que con estas medidas se contribuya a ello".



​Irais Aldana dijo que para ella "es absurdo que se sigan implementando

estas medidas y que no acabe de aparecer el mecanismo de regulaciones y

cobro para la entrada al país de mercancías con fines comerciales. Estoy

casi segura que un porciento altísimo de los cubanos que tratan de

comerciar se ajustaría a estas medidas y se evitarían esas violaciones

que nadie acaba de encontrarle solución".



Víctor escribió: "Gracias a Granma por preocuparse y dar información a

sus lectores y a todo el pueblo, las medidas fueron tomadas y nadie las

va a cambiar, que pena perder credibilidad en nuestras instituciones,

gracias una vez más".



Los subjefes de la Aduana cubana, Idalmis Rosales Milanés y Miguel

Núñez, entrevistados por el periódico, afirmaron que parte de su misión

es vigilar las violaciones de las reglas de ingreso de productos, y que

esta oficina pública "no puede ser la vía para abastecer las actividades

de distintas formas de gestión no estatal como los cuentapropistas. Para

eso habría que pensar en una fórmula o norma que permita la importación

con carácter comercial".



La agencia de noticias AFP indicó que la medida de la Aduana cubana

intenta frenar "un mercado informal que floreció por el

desabastecimiento y altos precios en las tiendas estatales, donde

cualquier producto vale tres o cuatro veces más que en otros países. Las

empresas del Estado son las únicas autorizadas a importar productos con

fines comerciales".



Debemos destacar que las quejas de los cubanos llegaron también al

periódico estatal Juventud Rebelde. Alguien identificado como Alex

escribió: "Wuao!!! Todavía seguimos con mentalidad cerrada de la época

de la URSS, ninguna economía sobrevivió a esos métodos. ¿Qué queda hoy?

¿Cómo vamos a disminuir las importaciones en un país donde se consume

más de lo que se produce? ¿Cómo le vamos a decir a nuestros hijos en el

hogar que no pueden traer cosas para el mismo hogar? ¿Cómo nos vamos a

pelear con el dinero? Se lleva mucho tiempo utilizando pretextos para

tomar medidas que conducen a la insatisfacción de la población, por el

alza de los precios y la escases. ¿Queremos períodos de escases?"



Otra llamada Raquel estima que "esas leyes son muy injustas para todos,

tanto los que viven dentro como fuera. ¿Será posible que los que

viajamos una vez al año, no podamos llevarles presentes a los que

queremos ayudar? Y si es el envío postal ni que decir pues desde Suecia

se pagan muy alto los precios para una entrega rápida y la Aduana de

Cuba se demora hasta un mes para entregarlos; deberían analizar muy

bien, pues no pueden juzgar a los que viajan hasta 30 veces al año igual

que a los que viajan una sola vez. Además, afectan al Mayor por ciento

de la población".



Mariela Rosabal Gómez, quien presta servicio en el extranjero, mostró su

disgusto. "¿Por qué a los colaboradores cubanos nos incluyen en esas

regulaciones? Tenemos hijos, esposo, hermanos, sobrinos, y amistades;

queremos llevarles un presente y con estas regulaciones no nos dan

opciones, sufrimos el estar lejos de la familia y además el no poder

llevarles presentes, deberían tener otras concepciones con nosotros".



Raycel señala que no cree "que es una buena idea pues la importación de

artículos crea muchos negocios y genera trabajo y dinero a la población.

Las tarifas de entrada de artículos a Cuba es muy alta ya!! Debieran

concentrarse en cómo hacer competencia al Mercado, no eliminarlo. Al

final el afectado es el pueblo cubano, el dinero siempre se queda en casa".



Emilio plantea que "respetando el criterio de los demás y el propio del

autor del artículo, considero que el procedimiento de la Aduana en Cuba

dista mucho del funcionamiento de este tipo de organismo en el mundo

entero. Considero además que el origen de las denominadas "importaciones

con carácter comercial" se basa en la insuficiente, errática y anticuada

gestión por parte de las entidades estatales encargadas de abastecer la

red de comercio minorista, lo cual propicia que esta última no sea

competitiva. Finalmente decir que la solución del problema es ser más

eficientes, lo cual se logra con una correcta administración y no

llenando de letras papeles para convertirlos en resoluciones que

únicamente perjudican a la población".



Source: Las quejas de los cubanos por restricciones aduaneras | Cubanet

-

http://www.cubanet.org/noticias/las-quejas-de-los-cubanos-por-restricciones-aduaneras/

No hay comentarios:

Publicar un comentario