lunes, 29 de mayo de 2006

Un ALBA Muy Oscuro

Un ALBA Muy Oscuro
2006-05-28

El pasado 22 de mayo, el investigador y profesor de Historia de la
Universidad de La Habana, señor Carlos Oliva, brindó una conferencia en
la universidad de Estocolmo. El tema era el ALCA y el ALBA. La
intervención del catedrático cubano pude escucharla en la páigna Web de
Misceláneas de Cuba , así como también los comentarios y preguntas de
varios asistentes, entre ellos los de Alexis Gainza, director de la
revista homónima.

Confieso que no era de mucho interés para mi escuchar al ponente cubano,
pues conozco el arenal de palabrería hueca hecha para mentalidades de
izquierda tercermundista, que utilizan estos señores cuando abordan el
asunto; no obstante, me interesaban más las preguntas del público.
Realmente debo reconocer que el cinismo de estos personajes es algo a lo
que nunca me acostumbro. Pretender brindar como alternativa al ALCA, un
modelo socioeconómico cercano al que ha impuesto tanto dolor y
privaciones a los cubanos es no sentir respeto hacia los pueblos
latinoamericanos.

Un momento para mi interesante fue el comentario y la pregunta de Alexis
Gainza, quien provocó, en varios de los presentes —latinoamericanos de
izquierda la mayoría--- reacciones airadas, molestos ante las verdades
que sobre el régimen cubano expuso nuestro compatriota. La respuesta del
historiador cubano, no fueron otras que evasivas y apresuradamente
distanciarse de lo expuesto por Gainza. En otro momento de sus palabras,
el señor Carlos Oliva manifestó que “en la diversidad está la riqueza”.
Sin lugar a dudas, la desfachatez de los defensores del régimen que
tiene más presos de conciencia del mundo, no tiene límites.

Otro argumento del catedrático cubano, muy utilizado por otros
apologistas de la dictadura cubana, es que en la isla “hay dificultades
como en cualquier sociedad del mundo”, argumento inconsistente si se
tiene en cuenta que los principales voceros del Gobierno repiten que
Cuba es la sociedad más justa y humana del planeta, solo que
evidentemente la “dificultad” más incompatible con el totalitarismo
comunista es la libertad.

Por otro lado, al escuchar las intervenciones de la mayoría de los
asistentes, no queda menos que sentir pesar por el futuro de
Latinoamérica ante una izquierda que, lamentablemente tiene aún fuerza y
logra engañar a sectores populares agobiados por la pobreza. Es esa
pobreza precisamente la que se ayudaría a combatir con políticas
económicas como las que propone el ALCA, que ha demostrado ser eficaz en
otras partes del mundo. Pero esa es una realidad que se niegan a ver
esos antinorteamericanos viscerales.

Tanto en lo expuesto por el conferencista cubano, como en los
comentarios de los que le secundaron, no se escucharon propuestas
realmente de tipo económico para levantar e impulsar las deterioradas
economías del continente. En todo momento, se podía percibir la
intención de mostrar al sistema cubano como un modelo alternativo. Ahí
estaban los datos de los miles de estudiantes pobres de Latinoamérica
que estudian en la isla, sin aclarar que uno de los fines principales de
esa supuesta solidaridad es la propaganda para ser utilizada en
ocasiones como ésta, y para formar a esos jóvenes como defensores y
partidarios del modelo castrista que rechazan la mayoría de los propios
cubanos que sí lo conocen y lo padecen.

El sectarismo de la izquierda latinoamericana es proverbial; pero es
además perverso desde las comodidades de Europa seguir proponiendo
formulas ideológicas a sus compatriotas que viven en la miseria y lo que
nesecitan es progreso económico. Yo les propongo a todos que vayan a
vivir y conocer de primera mano en La Habana cuál es el modelo que ellos
defiende y promueven ante el ALCA, allí tendrán, viviendo como los
cubanos, una información más objetiva, y , al mismo tiempo, una actitud
más consecuente al defenderlo y promoverlo desde Estocolmo.

A un representante del mundo académico cubano se le pudieran hacer
muchas preguntas que no nesecitarían comentarios. He aquí algunas :
Cuándo permitirán que los universitarios cubanos escuchen en la colina
a, por ejemplo, Mario Vargas Llosa, exponer su visión de este tema y
hablarles de liberalismo? Cómo es posible que, si en la diversidad está
la riqueza, varios estudiantes de universidades de la isla recientemente
fueran expulsado por algo tan absurdo como “conectarse clandestina e
ilegalmente a la Internet”? Cómo puede haber diversidad y riqueza en una
universidad que es “solo para los revolucionarios”? Si usted es capaz,
como afirma, de tener buenas relaciones con académicos norteamericanos a
pesar de que no comparte sus puntos de vista, como no las puede tener
con los cubanos que tampoco opinan como usted y a los que se les niega
ejercer el magisterio por “problemas ideológicos”?

Lógicamente, la repuesta sería que el tema era otro, es decir, el ALCA
y el ALBA. Obviamente, para promover una propuesta como el AlBA, la Cuba
real no es el mejor ejemplo. Sin embargo, a pesar de los espacios que
aún tienen quienes se empeñan en confundir y engañar al mundo sobre la
realidad de la mayor de las antillas y enarbolan un empolvado discurso
antinorteamericano, la realidad se impondrá, y las victorias que estos
puedan tener, servirán de lecciones de lo que son las peores soluciones
para los males de nuestros pueblos.

http://www.miscelaneasdecuba.net/web/article.asp?artID=5626

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