El problema del azúcar

El problema del azúcar
Jueves, 09 de Junio de 2011 15:00
Paulino Alfonso Estévez

Lawton, La Habana, 9 de junio de 2011, (PD) No tema, respetado Modesto,
no me referiré a su salud, es otro tipo de azúcar el motivo de esta misiva.

En el VI Congreso se dijo muy someramente que aunque insuficiente, se
había hecho avances en la producción azucarera. Aunque esta no pasó las
1'600.000 tm y el pronóstico para la zafra siguiente es de 2 millones de
tm, lo dieron como una noticia esperanzadora. Es decir, que para Uds.,
el 30% de la capacidad promedio que Cuba mantuvo en vida es motivo de
esperanza.
Para que otros comprendan lo ilógico de esta presunción, es bueno
refrescarles la memoria.

Hace 10 años, el régimen anunciaba la liquidación del 50% de la
industria azucarera de la Isla, asi como el despido de más de 100.000
trabajadores, por entonces el 3,5% de la población activa. En la
actualidad solo muele el 19% y hay cerca de 200,000 desempleados del
sector, hoy el 7 % de la población activa.

Con esto, también se abandonaba el 60% de la superficie cultivable del
país. La gran potencia azucarera mundial tiraba la toalla. La baja
rentabilidad del sector, los precios internacionales y la falta de
productividad eran las justificaciones de su hermano para tomar tamaña
decisión.

También quedaban atrás el glorioso recuerdo de la Zafra de los 10
Millones, los megaproyectos, los institutos que no sirvieron para nada
más que para mandar "científicos" a fiestar y que nunca cumplieron con
su principal tarea que no era otro que mejorar la eficacia de la industria.

Así, de un plumazo, se fueron por el inodoro 300 años de cultura
azucarera en la Isla,

La producción de azúcar había sido el motor de la economía desde la
colonia, de modo que la decisión del Máximo Líder creó incertidumbre en
amplios sectores de la población y en los mercados.

¿Cómo empezó esto? Las cosas no habían ido bien desde el derrumbe del
bloque comunista. Hacia los países socialistas se destinaba el 80% del
azúcar producido en Castrolandia. Este volumen de producción, altamente
subvencionada, era la moneda de cambio por el enorme subsidio soviético,
por tanto, carente de impacto en la economía mundial.

No es extraño.que al desaparecer esta entelequia, ya no fuera posible
alcanzar ni siquiera 2 millones de toneladas. A ello se añadieron, en
esas fechas, el descenso de los precios en los mercados mundiales, de
modo tal que aumentar la producción suponía incosteabilidad.

Han transcurrido 10 años de aquellos cambios El paisaje de los ingenios
convertidos en chatarra y el marabú adueñado de grandes extensiones que
antes se destinaban al cultivo de la caña son la nada cotidiana del
otrora productivo campo cubano

Los trabajadores azucareros emigraron, se volvieron policías o yerberos,
la agricultura se resintió absolutamente, su parte en el PIB de
Castrolandia ha descendido a cifras insignificantes.

En economía, las decisiones equivocadas se pagan caras. En los últimos
años, la cotización del azúcar en los mercados mundiales ha roto la
tendencia a la baja. Los precios del azúcar han empezado a aumentar de
forma espectacular. Los futuros del producto en bolsa se valorizan a
28,55 cts /dólar la libra, el dato más elevado en 25 años. La escalada
de la cotización ya acumula un aumento del 72% en el caso del refino, y
de un 81% en el azúcar sin refinar.

El interés de Brasil en producir etanol más que azúcar ha llevado a
anticipar nuevos aumentos de precios, en respuesta a los descensos de
producción que se prevén.

Los grandes consumidores de azúcar están realizando compras superiores a
los niveles medios de aprovisionamiento, para afrontar escenarios al
alza y asegurarse el suministro. Estos precios no tardarán en llegar a
los 30 cts la libra.

Ahora, la pregunta de rigor se impone: ¿Cómo podría Ud incorporarse a
esta bonanza y de paso resolver unos cuantos millones que tanta falta le
hacen, Sr.Modesto?

Me permito, aunque extemporáneamente, darle un consejo, para que no diga
que lo llevo recio. Si en vez de cerrar centrales en el año 2002, su
hermano hubiera hecho los que hicieron los dominicanos, que apostaron
por el sector azucarero, innovaron, crearon nuevos productos, estudiaron
el mercado internacional, renovaron y potenciaron sus capacidades
productivas, para mejorar su eficacia, ahora Ud. estaría en condiciones
de ventaja para afrontar el escenario de "vacas gordas" que siempre
favoreció a la primera economía azucarera del mundo.

Desgraciadamente, sin ingenios para moler, ni tierras para cultivar
caña, ni trabajadores para destinar al sector, ya esto es imposible, no
sólo en el tiempo biológico que le queda a Ud., sino que tampoco creo
que sus herederos tengan ni el interés ni los conocimientos para hacerlo
realidad.

Además, esta vez Marino Murillo no va resolver nada con otra resolución:
aquí es necesario trabajar de verdad.

paulino.alfonso @yahoo.com

http://www.primaveradigital.org/primavera/economia/51-economia/1560-el-problema-del-azucar