¿Por qué los americanos pagarán de más por los carros antiguos de Cuba?
Posted on 25 diciembre, 2014
Por Belinda Lanks*
Cuando Fidel Castro llegó al poder en 1959, para cualquier persona se
hizo ilegal la importación de automóviles sin permiso del gobierno. El
mandato congeló la historia del automóvil en la isla, y Chevys,
Studebaker, y Buick de mediados de siglo todavía retumban Malecón abajo
en La Habana, tanto como lo hicieron hace más de medio siglo. Ahora, con
la flexibilización de las relaciones entre Estados Unidos y Cuba,
algunos de los casi 60.000 autos antiguos que ruedan en Cuba podrían
finalmente hacer su camino en manos de coleccionistas en Estados Unidos.
Cuba suavizó algunas restricciones al comercio de automóviles a
principios de este año, permitiendo que vehículos nuevos puedan venderse
y comprarse en la isla. El levantamiento del embargo comercial de
Estados Unidos, una decisión que debe ser hecha por el Congreso, no por
el presidente Barack Obama, permitiría que automóviles clásicos en Cuba
regresen a Estados Unidos después de tanto tiempo.
Piezas de la historia
Si eso sucede, los compradores no serán coleccionistas tradicionales,
que buscan bajo kilometraje y automóviles en condiciones prístinas. Por
un lado, la restricción de Castro sobre las importaciones de automóviles
detuvo el flujo de piezas de repuesto al país, así que mientras un
Cadillac convertible en Cuba puede parecer auténtico a primera vista,
una mirada más cercana revela cientos de miles de kilómetros en el
odómetro y un grupo de arreglos improvisados, quizás incluso (¡oh!) un
motor diesel Peugeot bajo el capó. Dicho esto, los expertos anticipan un
nicho de mercado de compradores dispuestos a pagar una prima alta para
poseer una pieza de la historia de Cuba.
"La mayoría de la gente los quiere como una especie de obra de arte",
dice McKeel Hagerty, presidente de la aseguradora automovilística
Hagerty. Incluso autos americanos impecablemente restaurados de la época
de 1950 los coches americanos no son muy valiosos -asegura Hagerty-,
pero los compradores interesados deben estar dispuestos a pagar dos o
tres veces más por las antigüedades automovísticas cubanas, crudamente
restauradas. Su compañía estima que un Chevrolet 1954 Delray club coupe
210, se vendería por $20,000 dólares, mientras que la versión cubana
podría oscilar entre $40,000 a $60,000 dólares. Del mismo modo, se
podrían pagar más de $60,000 dólares por un sedán Buick Century 1955
reimportado de Cuba, un auto que normalmente sería valorado en $20,600
dólares.
Intriga y rareza
Mientras que para algunos propietarios de automóviles cubanos salta
indudablemente la oportunidad de hacer dinero rápido mediante la venta
de sus mastodontes americanos, Hagerty no espera una avalancha de autos
saliendo de la isla. "Estos carros son parte de su cultura", dice.
"Ellos son parte integral de la imagen de lo que son, por lo que sería
difícil imaginar que todos [los autos] desaparecieran".
Para los coleccionistas de carros acérrimos, la perspectiva de una Cuba
abierta mantiene la intriga de la rareza, el hallazgo de una joya
averiada o abandonada por un dueño, que no contaba con los medios
económicos o el ingenio para arreglarla. "Soy de la creencia de que hay
algo por descubrir allí", dice Rick Drewry, especialista en reclamos de
autos de colección de American Modern Insurance Group. "Algunas personas
van a estar a la caza de los diamantes en bruto".
Esos míticos diamantes en bruto no serán viejos Ford -o ninguno otro de
fabricación estadounidense- sino Mercedes, Ferraris y Maseratis que
compitieron en el Grand Prix de Cuba en los años 50. Un fotógrafo que
recorría recientemente la isla, descubrió un Mercedes-Benz 300 SL, Ala
de Gaviota -piezas que alcanzan más de $1 millón de dólares en subastas-
oxidado debajo de una mata de plátano. Hagerty descarta que el
descubrimiento como un hecho aislado. "Confía en mí", dice, "eso es nada
más que buscar. Pero lo mejor que puedo decir, es que la mayoría de los
autos que corrieron allí salieron del país en el momento de la revolución".
* Editora de Diseño de Businessweek.com, donde apareció este artículo.
Traducción: CaféFuerte
Source: ¿Por qué los americanos pagarán de más por los carros antiguos
de Cuba? | Café Fuerte -
http://cafefuerte.com/cuba/20594-por-que-los-americanos-pagaran-de-mas-por-los-carros-antiguos-en-cuba/
No hay comentarios:
Publicar un comentario