Ladrones, ineptos y vagos. ¿Es tan malo el socialismo?
PABLO PASCUAL MÉNDEZ PIÑA | La Habana | 25 de Agosto de 2016 - 08:54 CEST.
Cuando en 1955 llegó a La Habana la constructora francesa Societé des
Grands Travaux de Marseille para construir el túnel de la bahía, un
joven ingeniero cubano llamado Gerardo Peres-Puelles, junto a un hermano
y un amigo, ya había fundado la Compañía Perforadora Panamericana, una
empresa que prestó servicios al Ministerio de Obras Públicas.
Peres-Puelles —según un relato publicado en Juventud Rebelde— contó que,
al enterarse de que la constructora francesa subastaría el trabajo de
impermeabilización del dique seco, presentó un proyecto para competir
con otras corporaciones, entre ellas la norteamericana Pree Pack, que ya
había trabajado en la construcción del túnel de la calle Línea.
Asombrosamente, la compañía cubana ganó la licitación y un contratista
galo apellidado Besson acordó con Peres-Puelles el precio y cronograma
de trabajo. Convinieron además que, de finalizar los trabajos en la
fecha señalada, también recibirían el pago de una prima en metálico, a
la que añadirían una cuantiosa suma por cada día de adelanto. Ante la
inquietud del joven gerente de no cumplir con el plazo acordado, Besson
esclareció de buena leche: "que ellos no castigaban, simplemente
estimulaban a sus fuerzas".
Tras comprar parte de equipamiento en Estados Unidos, Peres-Puelles
seleccionó a sus operarios y pactó el pago por metro de perforación. "Y
aquella gente se comía la tierra, ¡qué manera de perforar!", recordaba
en sus comentarios.
Terminaron el trabajo cinco días antes del plazo fijado. Los directivos
de la Sociedad Marsellesa homenajearon a los trabajadores con un
almuerzo y después entregaron un jugoso cheque que cubría el valor del
trabajo (un millón de pesos), más la prima y el remate. El túnel de la
bahía costó 300 millones de dólares referidos al valor actual y fue
construido en el lapso acordado (30 meses).
Sesenta años después, los constructores cubanos son tildados de
ladrones, ineptos y vagos y, otra compañía francesa, la Bouygues
Batiment International, se vio obligada a contratar mano de obra india
para acelerar la terminación del Hotel Manzana de Gómez, a consecuencia
de los evidentes atrasos constructivos, que comprometen la entrega en el
plazo acordado (31 meses) con la Kempiski hotel, el consorcio suizo que
adquirió los derechos de comercialización.
Ante la paradoja, del antes y el después, vale preguntar: ¿Es tan malo
el socialismo que ni siquiera puede encontrar entre los 11 millones de
pobladores que tiene la Isla un centenar de albañiles, plomeros y
electricistas que sean honrados y buenos trabajadores?
Operación quirúrgica
La triple alianza de la Asociación Económica Internacional (AEI), la
Bouyges Batiment International (BBI) y la Unión de Construcciones
Militares (UCM), desde el año 2001 ofrece un bagaje constructivo de 12
hoteles localizados en Varadero, Holguín y el cayerío norte de Ciego de
Ávila.
La UCM, una cadena empresarial subordinada al consorcio militar GAESA,
tiene su cuartel general en la barriada del Calvario, al extremo sur de
la capital, y su presidente es el general de brigada Julio Ernesto Lanza
Rodríguez, un ingeniero y académico especialista en fortificaciones.
La Empresa Constructora de Obras para el Turismo (ECOT) Cayo Santa María
es la mayor entidad subordinada a la UCM. Cuenta con más de 4.000
empleados y 10 unidades estratégicas —dos constructivas y ocho de
aseguramiento— de las cuales cuatro se dedican al alquiler de mano de
obra especializada para las construcciones hoteleras, en calidad de
"subcontratistas" de los socios AEI y Bouygues.
El Servicio Militar General (SMG) es la fuente que suministra mano de
obra no calificada (soldados) a la Bouygues. Los especialistas
contratados tienen que pasar por el filtro de la Contrainteligencia
Militar (CIM) que verifica la integración política y conducta social de
los aspirantes. Según sondeos, el 80% de los empleados del sector de la
construcción (SECONS) tienen antecedentes penales.
Los haberes máximos pagados por la UCM son: 500 pesos cubanos (20 CUC),
más 80 CUC de prima mensual, lo que totaliza un equivalente a 100 CUC
mensuales. Pero los constructores contratados por la UCM se quejaban de
impagos y centenares de ellos abandonaban las obras del Hotel Manzana de
Gómez o fueron despedidos por indisciplinas. A la lista de
inconvenientes se añade que los electricistas, plomeros y albañiles
reclutados por la UCM no cumplen con los estándares internacionales; sin
embargo, cumplen los socio-políticos.
Aunque no se publicó un plan maestro del Hotel Manzana de Gómez, a
criterio de especialistas consultados la inversión no debe sobrepasar el
monto de 60 millones de dólares. La UCM monopoliza el alquiler y venta a
la Boygues de equipamiento constructivo, transportación, hormigón
premezclado y estructuras prefabricadas. También una de sus unidades se
encarga del servicio de protección y vigilancia.
Existen buenos criterios sobre la Bouygues. Según comentarios hallados
en la internet, la constructora francesa ofrece un pago generoso a los
reclutados (más de 2.000 USD mensuales con tendencia al aumento).
La Bouygues Batiment es subsidiaria de la Bouygues Construcción, una
transnacional que opera en 80 países y provee empleos a más 53.500
trabajadores de todo el mundo. En los sitios donde opera, la política de
contratación establece como proporción un 43% de contratados franceses y
un 57% de contratados nacionales. El 23% de los jefes son mujeres.
Los indios contratados para trabajar en el hotel Manzana fueron
albergados en la sede de UCM en el Calvario, en habitaciones
confortables con aire acondicionado, buena comida y transporte seguro.
La prensa asevera que cada contratado recibe el monto de 1.500 dólares
mensuales, un valor por debajo de los más de 2.000 dólares que suele
pagar la constructora. Aunque Bouygues y UCM no responden al teléfono
para verificarlo, resulta obvio que los militares descuentan a cada
usufructuario los costos de albergue y logística, estimados en 800
dólares mensuales.
El reclutamiento directo en Asia es sumamente complejo, pues existen
redes de intermediarios que controlan la mano de obra. También las
organizaciones sindicales y de derechos humanos, en especial la Foreig
Employment Promoción Board, monitorean la actividad a causa de las
irregularidades. Es altamente probable que Bouygues haya contratado a
los indios vía Trinidad y Tobago, nación con fuertes lazos étnicos y
culturales con la India, donde la constructora acomete innumerables
inversiones y la mano de obra india es reclutada frecuentemente a causa
del déficit de operarios y profesionales.
Lo real y maravilloso de esta historia es que Armando un electricista de
57 años, que gana el equivalente de 30 CUC mensuales y trabaja en una de
las principales industrias del país, homologó su oficio y ostenta el
título de journeyman, que le habilita para ejercer dicha labor en la
provincia canadiense de Alberta. O sea, cumple con los estándares
internacionales.
Reside en el municipio Cerro y cohabita con hijos, nueras y nietos. Por
este reportero, Armando se enteró que la Bouygues contrató más de un
centenar de trabajadores indios, entre ellos, electricistas a quienes
paga un monto de 1.500 USD mensuales (50 veces el salario que él devenga).
"Si la Bouygues hubiera hecho una convocatoria me hubiera presentado",
dice. "Como electricista, esos indios me la tienen que mamar", añade con
rabia.
Pero con resignación y apatía comprende que es sumamente difícil que le
paguen a un obrero cubano un sueldo de 1.500 USD mensuales, sin que los
médicos y profesionales pongan el grito en el cielo, lo cual conduciría
a un problema político. "La gente de este país está anestesiada con el
trapicheo, solo le importa sobrevivir y eso le conviene a los de
arriba", apunta.
"Antes de morir, el viejo me decía que el socialismo era una fábrica de
delincuentes, porque precisaba a la gente a vivir del robo y no de su
trabajo", señala. "No descarto que de ahora en adelante sigan
contratando extranjeros para cubrir el déficit de obreros calificados.
Un absurdo más para la colección", sentencia.
Para concluir, Armando torna la mirada hacia sus hijos y nietos, para
aconsejarles: "Escapen, muchachos, que este país es una mierda".
Source: Ladrones, ineptos y vagos. ¿Es tan malo el socialismo? | Diario
de Cuba - http://www.diariodecuba.com/cuba/1472108054_24809.html
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