05 de Junio de 2006
Cuba: el interés es estratégico, pero también político
Aunque el gobierno colombiano ha querido darle un enfoque muy comercial
y de negocios a la iniciativa de celebrar un tratado comercial con Cuba,
muchos empresarios creen que este tiene más bien un transfondo político.
El comercio con Cuba es bastante pequeño, aunque importante en algunos
sectores específicos, como medicamentos y de agroindustria.
El año pasado, las exportaciones colombianas a esta isla sumaron 65,53
millones de dólares, duplicando prácticamente el resultado del 2004,
cuando se vendieron mercancías por 32,45 millones de dólares.
Sólo 13 productos representaron casi el 80 por ciento de las ventas a la
isla. Entre otros, se destacan las ventas de azúcar, transformadores de
dieléctrico líquido, ollas de presión de aluminio, hullas térmicas,
sacarosa, coques y semicoques, galletas dulces, artículos higiénicos,
cápsulas de gelatina, tubos rígidos y ladrillos, entre otros.
A su vez, Colombia importó de esta isla bienes por 5,5 millones de
dólares en el año 2005, cifra que resultó incluso inferior a la del
2004, cuando se realizaron compras por 6,5 millones de dólares.
Sólo 12 productos adquiridos por Colombia en Cuba, representaron el 96
por ciento del total de las compras.
Los productos adquiridos en Cuba fueron principalmente ron y demás
aguardientes de caña, mármol y travertinos en bruto, vacunas para la
medicina humana, medicamentos de uso humano, langostas, sangre de animal
para usos terapéuticos, medicamentos con hormonas corticosteroides y
plasma humano, entre otros.
Aunque hasta el momento se ha planteado que con Cuba habrá un acuerdo
comercial, este se enfoca más bien a la ampliación del acuerdo de
alcance parcial de complementación económica que existe desde hace
varios años entre los dos países.
Actualmente, Colombia le concede a Cuba un trato preferencial para 633
subpartidas arancelarias.
Esto implica una reducción de aranceles que va entre el 30 y el 100 por
ciento. Cuba, a su vez, le otorgó a Colombia acceso preferencial también
con reducción arancelaria de entre 30 y 100 por ciento para un total de
1.020 subpartidas.
La negociación, que se hará en dos rondas, se concentrará en ampliar el
volumen de preferencias con el fin de profundizar y hacer más activa la
relación comercial entre los dos países.
Si bien las negociaciones con Cuba no de grandes volúmenes como se
podrían generar con otros países, resultan estratégicas según lo ha
confirmado el Gobierno.
De hecho, el anuncio de esta negociación se dio justamente en los días
en que Colombia y Venezuela registraban un nuevo episodio de
enfrentamiento político.
Algunos sectores interpretaron este hecho como una búsqueda de
acercamientos con Fidel Castro, el mejor amigo político que tiene el
presidente venezolano Hugo Chávez, para lograr una mediación.
Esto, sin embargo, no le ha restado interés a empresarios y Gobierno
para continuar con los preparativos de una negociación más amplia de
Colombia con Cuba.
La inquietud entre los empresarios, sin embargo, sigue siendo el
cumplimiento de los acuerdos de pago de importaciones por parte de Cuba.
Hace unos años se registró un episodio en el que las ventas a la isla
por parte de empresarios colombianos, no fueron pagadas y esto originó
incluso la intervención de los gobiernos para solucionar la situación.
Hay quienes hablan de que todavía están pendientes de pago algunas
mercancías que fueron despachadas y que todavía no han sido reconocidas.
Algunos empresarios colombianos ya han advertido que si bien es
interesante profundizar el comercio con la isla, también será necesario
garantizar que se obtendrá el pago respectivo.
http://www.portafolio.com.co/port_secc_online/porta_econ_online/2006-06-05/ARTICULO-WEB-NOTA_INTERIOR_PORTA-2929614.html
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