Wednesday, 28 September 2011
Por WILFREDO CANCIO ISLA
- En otra vuelta de tuerca de su política de ajustes económicos, el
gobernante Raúl Castro ordenó el reordenamiento y control centralizado
del programa de trabajadores sociales, una iniciativa gubernamental que
gozó de plena autonomía y amplios recursos financieros desde su
instauración en el país.
Mediante el Decreto-Ley 286, publicado este miércoles en la edición
online de la Gaceta Oficial, Castro dispuso la subordinación de las
funciones del Programa de Trabajadores Sociales al Ministerio de Trabajo
y Seguridad Social (MTSS), con la consiguiente eliminación de la unidad
presupuestada que administraba sus operaciones.
La disposición pone también bajo el control del MTSS al llamado Sistema
de Prevención y Atención Social.
El documento, emitido el 20 de septiembre, considera que se hace
necesario "implementar nuevas medidas" en torno a la seguridad social y
"ajustar sus regulaciones a los requerimientos actuales".
A tales efectos, el gobernante cubano dio un plazo de 60 días para que
el Ministerio de Trabajo y Seguridad Social presente "una propuesta de
organización de la actividad y del destino de los recursos humanos,
materiales y financieros" asignados al programa de trabajadores sociales.
Al mismo tiempo, otorgó 180 días -a partir de la puesta en vigor de la
legislación- para extinguir la unidad presupuestada del programa de
trabajadores sociales.
Entre las disposiciones especiales, se solicita mantener, por su nivel
de especialización, las funciones que realizan los trabajadores sociales
subordinados a los ministerio de Educación y Salud Pública.
Aunque el decreto no implica la desparición del programa, sí marca la
pérdida de su personalidad jurídica y su liderazgo como una fuerza
social de choque, a la manera que fue concebido por Fidel Castro en el 2000.
De hecho, la decisión marca el cumplimiento de una propuesta registrada
en los documentos del VI Congreso del Partido Comunista de Cuba,
celebrado en abril, y que sugirió integrar todo el trabajo social en "un
único centro coordinador".
Hijos de la batalla de ideas
El programa de trabajadores sociales surgió al calor de la llamada
batalla de ideas, bajo la supervisión de la Unión de Jóvenes Comunistas.
La iniciativa comenzó con 513 estudiantes desvinculados del trabajo y
siete meses después Fidel Castro asistía a la primera graduación de
trabajadores sociales en una escuela de Cojímar, en La Habana.
Bajo la tutela de Fidel Castro, los trabajadores sociales se
multiplicaron vertiginosamente en escuelas creadas a lo largo del pais,
convirtiéndose en una fuerza juvenil empleada para sacar a flote tareas
de alta sensibilidad política, desde el control de la venta de
combustible hasta la sustitución de los bombillos incandescentes en los
vecindarios.
La prensa oficial los llegó a presentar como "médicos del alma
nacional". Fidel Castro los valoró como una fuerza clave para "eliminar
lacras sociales y "librar la batalla por la invulnerabilidad económica".
El ejército de trabajadores sociales llegó a contar con unos 45,000
jóvenes y cumplió además tareas como el multicopiado de cassetes de
videos para misiones educativas en Venezuela, la entrega de los llamados
"módulos de cocción" en los núcleos familiares, y la atención a ancianos
y discapacitados, así como labores de prevención delictiva y gestión
política en los barrios.
Desde su arrancada, el funcionamiento del programa estuvo encargado a
Otto Rivero, entonces primer secretario de la Unión de Jovenes
Comunistas y promovido a vicepresidente del Consejo de Ministros en el
2004 por sus logros al frente de la Batalla de Ideas. Rivero fue
destituido y separado de todas sus responsabilidsdes políticas en marzo
del 2008.
Vea el texto del Decreto-Ley 286 aquí:
http://cafefuerte.com/wp-content/uploads/2011/09/Raul-TSociales.pdf
http://cafefuerte.com/2011/09/28/raul-castro-desmantela-el-programa-de-trabajadores-sociales/
No hay comentarios:
Publicar un comentario